History Teacher |Camren|

Capítulo 1

Es el primer día trabajando como profesora de Lauren. Ama su profesión y ha pasado muchos años estudiando para poder llegar a dónde se encuentra ahora. Por lo tanto, debe hacer las cosas a la perfección para conservar el trabajo que le ha costado tanto conseguir debido a su inexperiencia.

Es gracioso como la gente no quiere contratarte si no tienes experiencia ¿De dónde se supone que saques la experiencia si nadie quiere darte la oportunidad de tenerla? ¡Es ridículo!

Toma su maletín, se mira al espejo y arregla un poco su salvaje cabello antes de salir, esboza una sonrisa nerviosa y comienza su camino hacia el primer capítulo de una larga historia (O eso espera).

Camila Cabello está en el último año de la secundaria y no podría sentirse más feliz por eso. Ella odia la escuela, nunca le gustó estudiar, y no es que fuera tonta ni mucho menos, ella se consideraba una persona muy inteligente, de no ser por eso, no habría llegado tan lejos. Pero siente un especial rechazo hacia el sistema educativo y todo lo que implica, incluso los profesores, sobre todo los profesores. En especial los de Historia, la materia que odia con todo su ser, es decir ¿Por qué querría saber ella sobre cosas que le pasaron a gente la cuál vivió mil o más años atrás? ¿De qué carajos le puede servir?

Toma su mochila y se arregla un poco el cabello frente al espejo antes de salir, dándole su mejor sonrisa al mismo, con el pensamiento fijo de terminar éste año lo más rápido posible, sin complicaciones ni obstáculos. No dando ni demasiado ni muy poco y, sobre todo, sin meterse en problemas.

Pobres ilusas...

Lauren ya se encuentra en el aula donde dará la primera clase del día, 5to 6ta. Ningún alumno ha llegado todavía, así que aprovecha para observar los nombres en la lista, hasta que llega a uno que le llama la atención y ríe "Camila Cabello" No puede evitar preguntarse si la chica en cuestión tendrá un lindo cabello o todo lo contrario. Sería gracioso si no fuera así, si al tomar lista una chica con un horrible, sucio, enredado y ultra despeinado cabello dijera presente.

Sacude la cabeza para sacar sus infantiles pensamientos de ella y se recrimina mentalmente ¡Ya es una profesora, no puede andar teniendo pensamientos tan idiotas sobre sus alumnos!

Cuando quiere darse cuenta, el curso ya está lleno de adolescentes revoltosos charlando entre sí y, probablemente, contándose todo lo que han hecho durante las vacaciones. Los observa a todos en general, sin prestar atención a ninguno en particular y da dos palmadas fuertes para llamar la atención de sus alumnos. Para su sorpresa, todos hacen silencio automáticamente y la miran, parece que el factor sorpresa ha jugado a su favor, ninguno parecía haber notado su presencia anteriormente.

-Buenos días a todos, me presento, soy su nueva profesora de Historia y mi nombre es Lauren Jaure... -Se ve interrumpida a mitad de su presentación porque alguien entra al curso, empujando la puerta bruscamente y sin pedir permiso. Algo enojada, se prepara para regañar a quién sea que se hubiera atrevido a entrar de esa forma en su clase. Pero entonces la ve, es hermosa, se queda totalmente eclipsada por la belleza de esa chica. Ojos marrones, carnosos labios, cabello castaño oscuro y ondulado enmarcando su bello rostro, una grácil y delgada figura... Está segura de que se ha quedado con la boca totalmente abierta, al igual que los ojos, observándola fijamente.

-Sale de su trance porque alguien aclara su garganta y luego una dulce voz dice, suavemente- Lo siento mucho profesora, no me di cuenta de que había empezado la clase. -Luego, como si nada, la bella chica de voz dulce se va y se sienta en el primer banco de la fila del medio, el único que queda libre, el que se encuentra justo frente a el escritorio de la profesora.

Está completamente aturdida, no debería pensar esas cosas de una alumna ¡De una menor de edad! Probablemente sea como 20 años menor que ella o algo así. No puede permitirse si quiera pensar en que es guapa ¡Tan solo hacerlo ya debe ser ilegal! Encima se ha quedado atontada mirándola frente a toda la clase ¿Qué pensarían de ella? ¿Se habrían dado cuenta? ¡OH POR DIOS, AHORA HABÍA VUELTO A QUEDARSE ASÍ! Sacude su cabeza para despejar su mente y mira a todos, por suerte, nadie le está prestando atención, han vuelto a enfrascarse en sus conversaciones y ella suspira aliviada, agradecida por la falta de atención de los adolescentes. Pero entonces siente una mirada fija en ella, y algo temeraria posa la suya en la chica causante de todos sus actuales problemas, la cual la mira con el ceño fruncido.

Traga saliva y se siente sonrojar prácticamente de pies a cabeza ¿Qué demonios le pasa? Ella no es así, siempre se ha sentido muy orgullosa de su seguridad, superioridad ante todo, su capacidad de no darle importancia a las cosas. Entonces llega ésta niña de unos 17 años y tira todo abajo con tan solo una mirada. Debería dejar de pensar en ella y concentrarse en la clase, de lo contrario, le irá muy muy mal. Pero, por dios, se le hace tan inmensamente difícil, sabiendo que ella está allí, observando todos sus movimientos y escuchando cada palabra. Nunca se había sentido tan nerviosa.

Tiene que hacer algo al respecto. Y por eso, al terminar la hora, le pide a la chica que se quede. Que por cierto, esa chica es ni más ni menos que la tal "Camila Cabello", la cuál tiene un cabello precioso, al contrario de lo que había fantaseado al leer la lista.

Su alumna la mira confundida y nuevamente con el ceño fruncido, pero ella siente que una corriente la recorre de pies a cabeza y trata de mantenerse firme, con todas sus fuerzas.

-Buenos días señorita Cabello -Menciona al ella acercarse y se endereza, para parecer más calmada de lo que en realidad está.

-Buenos días profesora ¿Qué se le ofrece? -Qué se le ofrece, que se le ofrece... Lo dice con tanta inocencia y naturalidad, mientras que por la cabeza de Lauren pasan numerosos pensamientos que se esfuerza en desviar rápidamente.

-Voy a necesitar que, a partir de ahora, todos los días de ésta semana, al finalizar las clases, venga a éste aula y me ayude a corregir las tareas y exámenes. Es un castigo debido a su mala actitud ésta mañana al entrar a clases. - ¿QUÉ SE SUPONE QUE ESTÁ HACIENDO? ¡DEBÍA ALEJARLA DE ELLA, NO ACERCARLA MÁS! La cara de Camila se deforma notablemente debido a la sorpresa e indignación.

-¡Pero si ya le he dicho que lo siento! ESTO ES INJUSTO, NO VOY A TOLERARLO. No merezco ese castigo. -Dice todo esto gritando, completamente enojada, y Lauren se siente mal consigo misma, es verdad, no se lo merece. Pero ya no puede dar vuelta atrás.

-¿Ah sí? ¿Se atreve a cuestionarme así? Bien, pues que sean dos semanas -Su labio inferior tiembla -Dios, qué hace mirando sus labios- y abre la boca como queriendo decir algo, pero lo único que hace es irse rápidamente del aula y cerrar de un portazo.

¿Qué está haciendo? El primer día y ya castiga a una alumna, además sin razón, la van a odiar...