𝐍𝐄┊A Dahyun le gusta el violeta.
A Jungkook, el negro.
A Dahyun le dan miedo muchas cosas.
A Jungkook, le da igual.
A Dahyun le gusta Namjoon.
A Jungkook, que nadie lo moleste.
¿Quién diría que un pequeño accidente unirá vidas tan diferentes?
Ell...
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Kim 09:10am.
Necesito decirte algo muy importante 09:10am.
En persona no tengo el valor suficiente para decírtelo 09:10am.
Namjoon, tú me gustas 09:15am.
**
Solté el celular en la mesa con rapideza y brusquedad. El sonido estruendoso que generó el impacto no fue tan fuerte como para que lo escuchen los presentes en la cafetería, los cuales eran muchos, pero si fue lo suficiente para que Hyesoo dirigiera su atención absoluta en mi persona. Me miró interrogante con una ceja arqueada, alternando su mirada en mi y mi celular. Necesitaba una explicación. Frunció su ceño al ver que yo simplemente no hacía ni decía nada.
Me resulta complicado hablar en este momento. Mi respiración esta alterada, mis manos temblorosas sudan demasiado, y en mi interior hay una rebelión de emociones. Hice lo que tanto temía hacer. Lo hice sin más y ya no hay vuelta atrás. Ahora él sabría de mis sentimientos y aunque eso en parte me aterraba, también sentía cierta sensación de alivio. Como cuando sueltas el peso de lo que te ha mantenido cautiva tanto tiempo, y ahora sólo puedes disfrutar de esa libertad que te has otorgado tú misma. Y sinceramente, así me sentía yo. Una cautiva enamorada de un chico que me da el peso de un amor no correspondido.
Sentí una mano en mi hombro que me sacudió levemente, sacándome de mis pensamientos. Aunque al principio me asusté por tal acción, de inmediato me calmé al ver a la castaña de mi mejor amiga, a mi lado, con una mueca preocupada y cuestionante a la vez. Hyesoo, es como una hermana mayor, con instinto maternal impregnado en ella. Siempre protegiéndote y alentandote a seguir adelante con lo que sea que te propongas. Su rostro está decorado con pecas, lo cual es poco común en los asiáticos, aquello la hace ver sumamente adorable. Es mi mejor amiga hace mucho tiempo, ya que nos conocimos en la primaria y desde entonces hemos estado juntas. Siempre ha intentado ayudarme en todo, en algunas circunstancias con éxito y en otras, con fracaso. Y ha estado a mi lado sin importar qué. Sin duda alguna, estoy agradecida con quién sea que me haya puesto a una persona tan maravillosa como ella en mi vida.
Volví a sentir como mi hombro era sacudido pero con un poco más de fuerza. Su ceño aún permanecía fruncido pero su mirada, esta vez, se mezclaba entre lo inquietante y analizante. Necesita una explicación y la necesita con urgencia. Entonces, fue ahí cuando caí nuevamente en lo que había hecho. Y la rebelión volvió a desatarse.
─Dahyun, ¿Qué pasó? ─inquirió tan rápido como vió que estaba a punto de sumirme en mis pensamientos de nuevo.
Aunque abrí mis labios para hablar, no lo hice. Mi atención cayó inmediatamente en el chico que acaba de entrar en la cafetería, captando muchas miradas, no sólo la mía. Mis labios formaron una fina línea, mientras lo observé hacer su recorrido hasta llegar a la mesa donde siempre se unía a sus amigos. Aquello intensificó la rebelión en mi interior. Por un lado, estaba enormemente feliz al verlo, lo cual hizo enloquecer más a las mariposas en mi estómago; y por otro, estaba demasiado ansiosa tanto por la posible respuesta de él, que aún esperaba, como por mi confesión, lo que alteró a las abejas africanas en mi interior para que me picaran con insistencia y fuerza.
