Antes De Perderte ( pablo gavi )

Luces de Discoteca

—Elsa

Llegamos a la discoteca, estaba bastante llena.
Nerea se pidió un cubata y yo me pedí un ron-cola.
Estábamos hablado de la vida cuando me fijé en un chico el cual estaba sentado con cara tristona, y decidí acercarme.

— Hola, puedo sentarme? -le dije con un tono amable y el solo asintió y se movió para dejarme sitio.

—Estas bien? -le pregunto —Sé que no me conoces de nada pero me puedes contar lo que sea.

No obtuve respuesta y perdí la esperanza de saber que pasaba así que me levante y estaba dispuesta a irme hasta que escucho al chico.

—Quédate -dijo casi murmurando. Eso hice, me volví a sentar esperando respuesta.

—He discutido con mi novia, bueno no es mi novia, es algo raro - dice el chico con cara triste.

—Por qué habéis discutido?

—Pues ya estaba cansado de que me controlara, no es mi puta madre, joder.- Dijo un poco más alto y sin querer se me escapa una risita.

—Perdón, bueno a lo que iba, se que es una mierda discutir con la persona que quieres pero si de verdad te sentías mal es lo correcto.- digo apoyando mi mano en su hombro como gesto de apoyo.

—Bueno si, no hemos hablado desde entonces y no quiero perderla

—Mira, has venido aquí ha pasártelo bien, así que sal ahí y baila, bebe, lo que te dé la gana.- digo con una sonrisa y a él le sale una sonrisilla tímida.

—Bueno ya veré, gracias por todo..-dice esperando a que le diga mi nombre.

—Elsa -digo con una sonrisa, me levanto y me voy, la verdad esque el chico era guapillo.

Vuelvo con Nerea y antes de que pudiera contarle nada, suena she don't give a fo, nos miramos a la vez y nos fuimos corriendo a la pista de baile. Nos pusimos a cantar a todo pulmón con más gente de allí. Después el DJ puso regueatton y empezamos a bailar todos, de vez en cuando miraba al chico de antes y hacíamos contacto visual.

Nerea parecía haber encontrado a un chico, porque estaba bailando bastante cerca de él, yo estaba bailando con una chicas que había conocido, cuando de repente noto una mano en mis hombros.

Me giro y veo al chico de antes, ahora llorando.

—Que ha pasado? Estas bien? - digo preocupada y él niega con la cabeza.

Le cojo de la mano y lo llevo afuera de la discoteca.

—Por que lloras? -digo mirándole a los ojos, que parecían cansados.

—He visto a Ana, mi novia, o eso pensaba- dice casi murmurando, intentado aguantar el llanto.

—Y habéis hablado? -digo

—La he visto con otro tío liándose -Dijo con la voz rota.

Yo solo le abracé y el rompió en llanto.

—Quieres dar una vuelta para despejarte? -dije y el solo asintió.

Caminamos un buen rato, le sacaba cualquier tema para que olvidara lo que había pasado. Al final acabe contándole anécdotas mías y lo vi sonreír por primera vez. Tenía la sonrisa más bonita que había visto en mi vida. Una llamada nos corto el royo, era Nerea, me fui sin avisarla y estará preocupada.

—Lo siento, me tengo que ir , me espera mi amiga.
Me lo he pasado muy bien -digo con una sonrisa

—Yo igual, muchas gracias por escucharme.-dice y yo vuelvo a la discoteca.

Doy vueltas por la discoteca tratando de encontrarla, y al fin lo hice. Estaba en la barra con un chupito en la mano, y al lado había un tío que no se le quitaba de encima, Elsa al rescate.

—Hola amore, nos vamos? -digo y ella asiente.

Le arrastré hacia fuera, estaba bastante pasada de copas, vaya tía. Llamé a un uber y tardé unos 10 minutos, cuando llegó, ayudé a Nere a subir al coche y acto seguido subí yo. Le di las indicaciones y nos llevo al piso. Dejamos todo echo una mierda porque estábamos demasiado cansadas como para ordenar, nos tiramos en la cama y nos dormimos al instante.

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A la Mañana siguiente, me levanté con un poco de resaca, pero nadie supera a la de Nere, que no se puede ni mover. Aprovecho para desayunar un batido con unas tostadas y ordenar todo.

—Buenos días, que tal la resaca?.- digo al ver a Nere  saliendo de la habitación toda despeinada.

—Mejor que otras veces, la verdad.- dice ella cogiendo el brick de leche de la nevera.

Yo cojo mi portátil y me pongo a ver ofertas de trabajo por todas partes, necesitamos trabajo para mantener el piso. Mientras Nerea se incorpora en el mundo real, de repente mi teléfono suena y lo miro, es mi tío,David.

—Hola tío.- digo con tono feliz.

—Hola Elsa, qué tal estás?

—Muy bien, ayer llegamos a Barcelona.

—Pues ya nos veremos por aquí, tienes que venir a mi restaurante

—Podemos ir hoy si quieres, que cuando empiece la Uni poco tiempo tendremos.

—Claro, venid por el mediodía, os espero encantado.

Cuelgo la llamada y miro a Nerea con una sonrisa.

—Hoy comemos como se debe.- digo y ella ríe.

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Que pasará en el restaurante? 🫣🫣
intentaré actualizar la historia, aunque también escribo en la otra historia: almas gemelas! las puedes leer tmb, seguro que te gusta <3