No puedo sin tí

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-Gavi

—Sabes que te voy a ganar, Ansu

—Sigue soñando

Ambos estábamos concentrados en el fifa, dando unos gritos que cualquiera que nos escuchara pensaría que están matando a alguien.

Mi atención se desvía de la pantalla cuando veo a Pedri bajar de las escaleras, con una camisa blanca y unos vaqueros negros, muy elegante, demasiado.

—¿A donde vas tan elegante? -pregunto algo confuso

—A cenar

—Con Elsa -añade Ansu, soltando una risita.

Así que es verdad, le había pedido salir.

No lo entiendo, es decir me da igual, pero, ¿Porque con el?

Nos despedimos del canario y seguimos con el juego, yo algo distraído por pensar en lo que harían en la cena.

—Eh, bro. ¿Estás bien? Te noto raro -suelta Ansu

—Si, ósea, no se. Es que...

No pude acabar la frase ya que sonó el timbre de casa, me levanté y abrí la puerta.

—¿Podemos hablar?

—No tenemos nada de que hablar, Ana

—Venga, porfavor

Suspiré y asentí, dejando un espacio para que pasara.

Pasamos al salón y yo miré a Ansu, este saludo a Ana y se fue al piso de arriba, dejándonos solos.

Nos sentamos en el sofá, lo más separados posibles y yo me harté de esperar y rompí el silencio que había.

—¿Tienes pensado hablar?

—¿Porque estás con Elsa? Soy mejor que ella, y que todas, lo sabes.

Genial, otra vez sacando el tema de Elsa, estaba tan cansado de todo que decidí pasar fingir, ¿Para que?

—No estoy con ella

—Pues entonces vuelve conmigo, pablito

—Te liaste con otro, ¿Crees que voy a querer estar contigo?

—Fue un error, no sabía lo que hacía, vamos, se que soy la mejor chica que vas a tener.

Mientras iba hablando, se acercaba más, hasta el punto de ponerse encima mío.

—Ana, basta

Empezó a tocarme todo el cuerpo.

Pero en mi mente solo estaba una persona.

Una chica.

La que había estado estos días.

Elsa.

Me niego a perderla.

Quiero estar con ella.

—Quita, joder

Aparto a Ana de encima mío, y ella se molesta, alzando la voz.

—¿Porque, Pablo? ¿Es por ella? Sabes que le gusta pedri, tú no.

—Cállate

—Que te apuestas a que ahora están besándose

—Basta, Ana

—Y le está tocando el cuerpo, por todas partes, esta noche seguro que follan, y gozará como una perra

En ese momento perdí el control de mi cuerpo y tiré la mesa del salón al suelo, haciendo que los platos que había se quebrasen.

Antes De Perderte ( pablo gavi )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora