XV

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Sus respiraciones se mezclaban debido a la cercanía, jadeos al unisono llenaban toda la habitación al igual que algún que otro gemido traicionero que se escapaba cuando se descuidaban.

Chris colocó su mano sobre el cuello ajeno, apretando suavemente mientras eliminaba la distancia para besarlo en los labios, su otra mano apretaba el glúteo de Minho, moviéndose hasta su cadera para ayudarlo a moverse.

Minho dejó salir los gemidos que se estaba aguantando, ahogandolos en los labios del mayor, estaba sintiendo mucho placer, estas últimas semanas había recibido más placer del que había sentido los últimos años.

Minho se hallaba dando saltos sobre el miembro de Chris, sintiendo como cada vez que bajaba, la punta de este chocaba contra su próstata, haciéndolo ver estrellas.

Nunca se imaginó ser el que recibiera, pero ahora no se imaginaba haciéndolo de otra forma, le gustaba mucho como se sentía.

Llevaban casi un mes saliendo, esta clase de cosas se habían hecho una rutina.

Chris había adelantado el horario de las clases de inglés de Jeongin, yendo a su casa directamente luego de la escuela con la excusa de que así Jeongin tenía la tarde-noche libre, pero en realidad era para poder pasar más tiempo con su chico, pero como Jeongin lo sentía mejor de esta manera, estaban todos contentos.

Pasaban la mayoría del tiempo hablando sobre algún tema que les interesara, jugando videojuegos, viendo películas o algún vídeo de Youtube, y de vez en cuando hacían cosas como la que estaban haciendo en este momento.

No sabían si eran las hormonas o simplemente la atracción sexual entre ambos era muy fuerte, pero se tenían muchas ganas todo el tiempo, para ellos era lo mejor estar juntos, ambos se daban placer y pasaban tiempo de calidad.

Incluso a veces se ponían a estudiar.

Minho realmente se sentía muy bien con Chris, pero le daba miedo iniciar una relación después de lo ocurrido con Jisung...

Por su lado, Chris no quería forzar a Minho a nada de lo que no se sintiera seguro, recordándole que lo quería mucho y que esperaría a que se sintiera preparado, pues para él, lo más importante era la comodidad de Minho.

Ambos habían descubierto ciertas cosas con el otro, sobretodo en el ámbito sexual.

Minho había descubierto que le gustaba que Chris lo ahorcara o nalgueara, el australiano era cuidadoso, haciendo estas cosas con la fuerza exacta para no lastimar al chico pero que se sintiera satisfactorio.

Por su lado Chris cada vez amaba más que el coreano lo llenara de rasguños, sobretodo en la espalda. Le excitaba saber que Minho lo hacía cuando estaba a punto de correrse, de igual manera, siempre lo hacía con la intensidad justa para que no llegara a romper su piel, solo dejaba unas líneas rojas que con el pasar de las horas se borraban como si no hubiera pasado nada.

Minho cada vez sentía más confianza y seguridad con Christopher, igual que las familias de ambos también se habían vuelto más cercanas.

Chris no era el único que pasaba el día fuera de casa, cuando Félix no estaba con Hyunjin, Jeongin se iba a casa de los Bang para pasar tiempo con Félix, se había vuelto su nuevo mejor amigo, y Minho sentía que esto era mejor que a que siguiera con los amigos que solía tener anteriormente.

Muchas veces los padres de ambas familias solían salir a divertirse en la noche, dejando a sus hijos solos hasta la mañana siguiente, ya ni se extrañaban si encontraban a alguno durmiendo en la casa contraria esos días.

Los padres de Minho le habían agarrado mucho cariño a Christopher, tratándolo casi como si fuera un hijo más... Si tan solo supieran.

Un par de saltos más y Minho sintió que todo se puso blanco mientras clavaba sus uñas en los hombros del otro chico, corriendose fuertemente manchando el abdomen del australiano, por suerte ese día Chris no se había puesto franela debajo de la camisa del uniforme, sino hubiera sido un desastre.

Do Revenge - MinchanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora