XVI

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Minho cerró la puerta de su casillero, saltando sorprendido al encontrarse a Jisung recostado del casillero contiguo.

—Hola Minho.

Minho suspiró cansado, se acomodó la mochila sobre sus hombros y caminó, ignorando al menor.

Jisung caminó rápidamente, alcanzandolo y caminando a su lado casualmente, como si estuvieran juntos.

—Es de mala educación no saludar —volvió a decir el más pequeño. Minho seguía sin hacerle caso, apurando el paso para que el contrario se cansara de seguirlo— ¿Podrías madurar? Ni siquiera te hice nada como para que me trates así.

Minho se volteó indignado, mirándolo con las cejas levantadas.

—¿Ah no? ¿Tú dices que no me hiciste nada? Pues deberías hacer memoria.

Jisung bufó.

—¿Estar ocupado es un delito tan grande como para que me canceles de tu vida?

—¿Según tú, eso fue lo único que hiciste mal? —Minho estaba controlando sus ganas de soltarle todo, pero por el bien del plan, no debía demostrar que sabía de la infidelidad— Me parece que tienes Alzheimer o no eres el mismo Jisung que salía conmigo —Esto último lo dijo en un susurro, pues algunas personas los estaban mirando intentando saber de qué hablaban.

—Pues que yo recuerde no hice más nada.

—Aun tengo las fotos de los moretones que me dejaste todo ese año ¿Quieres que te los muestre para que se te refresque la memoria?

Jisung se rió.

—Esas son cosas que pasan en todas las relaciones.

—No, no lo son, Han Jisung... En las relaciones sanas no se golpean entre si por discusiones estúpidas, tampoco obligan a los otros a hacer cosas que no quieren, ni usan su cuerpo solo como si fuera un objeto sexual inanimado. ¡Tú me convenciste de que era algo normal cuando no lo era!

Jisung rodó los ojos.

—¿Ah sí? Pues tú seguiste conmigo después de eso, así que no vengas a decir que esa fue la razón por la que me terminaste. Admite que me estabas engañando con Chris.

Minho tenso la mandíbula, apretando los puños alrededor de las correas de su mochila.

El timbre sonó, salvando a Minho de hacer algo de lo que luego se arrepentiría.

—No vale la pena que gaste mi tiempo contigo.

Minho simplemente se dió la vuelta y se perdió en el mar de estudiantes que caminaban hacia sus aulas de clases. Solo esperaba ver a Chris para relajar toda la molestia que sentía.

A la hora del almuerzo, Minho compró un par de sandwiches y dos jugos en una máquina expendedora y se los llevó junto con su propia comida en dirección a la cancha de básquet.

Ahí ya se encontraba Chris, repiqueteando un balón naranja contra el suelo para luego lanzarlo y encestarlo.

Minho lo felicito, haciendo que este saliera de su concentración para luego sonreírle a él recién llegado.

—¿Que haces aquí? ¿Cómo me encontraste? —Preguntó Chris sorprendido.

—Dijiste que ibas al baño, pero cuando bajé a la cafetería no estabas ahí, Felix me dijo que habías dejado tu almuerzo en casa, así que te compré algo y vine a acompañarte a comer... Solo supuse que estarías aquí.

—Ya me conoces muy bien.

Minho sonrió alegre y se sentó en una de las bancas, colocando los sandwiches a un lado para abrir su propio almuerzo, se moría de hambre.

Chris siguió dando algunos lanzamientos más hasta que Minho lo regañó por no comer.

—Es que tengo las manos sucias, no quiero comer así.

Minho destapó uno de los sandwiches, ofreciéndo dárselo en la boca a Chris, quien solo sonrió y se acercó a darle un mordisco para luego seguir lanzando mientras Minho comía.

Siguieron así hasta que ambos terminaron de comer, aún les quedaban algunos minutos más antes de la clase.

—Quedé con hambre —Mencionó Chris.

—Oh —Minho hizo un puchero— la próxima vez compraré tres, no creí que comieras tanto.

—No, no —Chris se rió— Tengo hambre es de otra cosa.

Minho lo miró confundido, inclinando la cabeza como un cachorrito.

Chris se acercó y le plantó un beso en los labios.

Minho se separó sorprendido, mirando a todos lados por si había alguien que pudiera verlos.

—No hay nadie aquí, no tengas miedo. A esta hora nadie se acerca por aquí... Estamos solos —Dijo Chris tomando por las manos a Minho para levantarlo de su asiento.

Minho un poco inseguro colocó sus manos en los hombros de Chris, mirándolo a los ojos mientras este le sonreía tiernamente.

Chris terminó de romper la distancia, besándolo lentamente, tomando su cintura para que no se alejara, aunque Minho no planeaba ir a ningún lado.

Chris se agachó un poco, tomando por los muslos a Minho para levantarlo del suelo y que este enrollara las piernas en su cintura. Esto ocasionó que Minho rompiera el beso sorprendido, mirando a Chris quien le decía que no se iba a caer. Este comenzó a dar vueltas, causando que Minho riera y esta risa se le contagiara a él mismo.

Jisung los veía desde la entrada a la cancha, sintiendo náuseas por tanta cursilería.

Decir que los había encontrado ahí de casualidad sería mentira, pues este había seguido a Minho una vez notó desde lejos que salía de la cafetería.

Necesitaba aclarar sus dudas sobre ellos dos, y vaya que las había aclarado, no solo eso, sino que se le había ocurrido algo.

Pauso la grabación, sintiendo que era suficiente, con eso bastaría, y luego se fue antes de que lo descubrieran.

El timbre sonó y con el Chris y Minho se separaron para ir a su aula de clases como si solo fueran un par de buenos amigos.

Por su lado, Hyunjin y Changbin planeaban mejor como iban a humillar a Jisung.

Tenían muy pocas pruebas, pues no sabían en que momentos Jisung se reunía con las chicas con las que salía, necesitaban comenzar a seguirlo.

—¿Y luego de conseguir suficientes fotos que haremos con ellas?

Hyunjin pensó en como responder a la pregunta de Changbin.

—¿Hacemos como en la película Do revenge y lo exponemos en una fiesta?

—No, no creo que funcione en nuestro caso, la gente en las fiestas siempre está dispersa, y nunca van todos los de la escuela.

Hyunjin siguió pensando.

—¿Lo reproducimos en algún evento de la escuela? —Changbin negó.

—Nos podemos meter en problemas.

—¿Y si lo publicamos en la página de chismes de la escuela? Todos los alumnos siguen esa página de facebook, pero los profesores ni siquiera saben de su existencia, siempre publican chismes de ese estilo, así que no nos regañaran. Recuerda que yo soy creador de contenido de esa página.

—Puede ser buena idea, ten eso en mente, por ahora vamos a seguirlo para recopilar más pruebas.

Ambos chocaron las manos y se voltearon al frente de la clase, viendo cómo Christopher y Minho entraban seguidos de la profesora de historia.

Este sería un aburrido bloque.

Do Revenge - MinchanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora