Lᴏᴠᴇsɪᴄᴋ Gɪʀʟs // [Yᴇᴊɪ x ᴛᴜ] PAUSADA

Capítulo 49: "Famila adoptiva"

—Te veo cansada ¿dormiste bien? — preguntó el doctor mientras comenzaba a analizarme, como ya era costumbre

—Dormí muy mal— al final de la frase solté un bostezo

—¿Por qué? Hoy te daré de alta— dejó de hacer lo que estaba haciendo para mirarme con atención

—Por lo mismo...tengo miedo de irme con personas que no conozco— comencé a jugar con mis dedos nerviosa, mientras esquivaba la mirada del doctor

—No creo que sean malas personas ____, así que relájate— siguió haciendo lo suyo— además, no será por mucho tiempo— yo asentí a lo dicho— cambiando de tema, tuviste suerte que ayer lloviera— yo sonreí

—Estoy muy feliz por eso, no sabe lo importante que es ese partido para mi— el sonrió

—Se ve que es muy importante, ya que ayer me lloraste todo el día para que te dejara ir— yo rodeé los ojos mientras sonreía— bueno, estas en perfectas condiciones— termino de anotar algo en su Tablet

—Muchas gracias doc, por cuidarme— hice una reverencia acostada

—No hay de que, es mi trabajo. En un rato llegará la asistente social a buscarte, así que ya puedes alistarte para irte— le sonreí— me despido ahora de ti, porque después tengo una cirugía, espero no volver a verte por estos lados— yo solo reí

—No le prometo nada— me encogí de hombros, el rió y salió de la habitación.

Con cuidado me levanté de la camilla, tomé un bolso con ropa que me había traído Felix esta mañana y me metí al baño para poder asearme y cambiarme.

Al estar lista. Salí del baño y me senté en la camilla, esperando que la asistente social viniera. Tomé entre mis manos el tigre de peluche que me había obsequiado Yeji y lo abracé con fuerzas, logrando así tranquilizarme un poco.

Solo esperaba que la familia que me iba a acoger, fueran buenas personas y no de aquellas que solo "acogen" por el bono que les da el gobierno.

Comencé a escuchar como unos pasos se acercaban a la habitación en donde me encontraba yo, así que atenta miré hacia la puerta, logrando que mis manos comenzaran a sudar nerviosa. Tres golpes sonaron en la puerta, para luego ver como la cabeza de la asistente social se asomaba.

—Buenos días ____ ¿estas lista para irte de aquí? — yo asentí no tan segura— ¿qué sucede? Te veo preocupada— yo asentí

—Tengo miedo de que la historia se repita con las personas que me "adoptaran" — hice comilla con mis dedos

—Tranquila, te encontré a unas personas excelentes que cuidaran muy bien de ti, no te preocupes— colocó su mano en mi hombro en forma de apoyo y yo le sonreí forzada— ya nos están esperando ¿vamos? — asentí con mi cabeza mientras me levantaba de mi camilla

—Vamos— la asistente social tomó mi mochila y yo en mis manos llevaba el peluche que Yeji me había regalado, parecía una niña pequeña que su único refugio,era su peluche.