Ocean Eyes•Pablo Gavi

CAPÍTULO XXI//FINAL DEL ACTA I

GAVI

Las horas pasaban tan lentamente que parecía que el tiempo se había detenido. Desde que Atenea está en cuidados intensivos, no nos permiten entrar a su habitación ni a Mila,ni a Pedri,ni a mí,algo que come por dentro y me llena de nervios y ansiedad.

-Joder,no nos pueden decir nada?!- exclamo alterado.

-Gavi...- Pedri pone su mano en mi hombro y trata de calmarme.

-Ella estará bien- dice Mila moviendo su pierna impacientemente.

Las lágrimas volvieron a caer por mi rostro una vez más. Esta situación era demasiado para mí,llevábamos ya mucho tiempo en el hospital y ninguna enfermera o médico nos decía nada sobre el estado de Atenea.

De repente un pitido se empezó a escuchar tan fuerte que tuvimos que taparnos los oídos,provenía de la habitación de Atenea,y eso no significaba nada bueno.
De repente una marea de médicos y enfermeras entraron en la habitación.
Intenté entrar con ellos pero Pedri me cogió alejándome de la puerta.

-Sueltame! Necesito estar con ella- digo con la respiración agitada y las lágrimas cayendo por mis mejillas sin control.

Pedri no dijo nada, simplemente me alejó de la puerta de la habitación mientras me abrazaba.
Me aferré a él con todas mis fuerzas.
Se escuchaba como trataban de reanimar a Atenea sin éxito.

-Lo hacemos?- pude escuchar a una de las enfermeras desde el interior de la habitación.

Supuse que el médico respondió un "sí" ya que después de eso salió de la habitación y se paró delante nuestra.

-Son ustedes los acompañantes de Atenea Silva?- preguntó con un semblante serio.

-Está bien?- me apresuro a preguntar.

El médico nos dedicó una mirada a los tres, tragó duro y después hablo.

-Vereis... El estado de Atenea es peor de lo que nos temíamos. Hay un desgaste en su cerebelo que nos preocupa demasiado.

-Al grano- digo con el pulso acelerado.

-Ha sufrido un paro cardiaco- al escuchar esas palabras el corazón se me encogió- hemos tenido que inducirle un coma por su seguridad.

Esas fueron las palabras que me remataron.

-No,no,no!- grito y trato de pasar a la habitación- Atenea por favor!- meto un pié en la habitación y siento como los brazos del médico tiran de mi para sacarme de ahí.

-Basta!- dijo el doctor haciendo fuerza mientras me echaba hacia atrás.

-Atenea por favor,te necesito- digo con la voz entrecortada y con un nudo en la garganta.

De ahí a unos segundos,las enfermeras cierran por completo las puertas de la habitación alejándome de ella y de toda esperanza.
Un coma es algo complicado. Nunca sabriamos una fecha en la que Atenea podría despertar,todo era demasiado impreciso y doloroso.

-Tranquilo Gavi...- dijo Pedri abrazándome mientras lloraba- ella es fuerte.

Lo sé. Sé que lo es pero,y si cuando despierta ya es demasiado tarde? No puedo vivir sin ella. Ella es como el oxígeno que entra en mis pulmones y me permiten respirar. Ella es cada bombeo de mi corazón que hace que la sangre se mueva por mi cuerpo. Ella es todo en lo que mi cerebro piensa día tras día. Ella lo es todo,ella es mi vida.