15. fantasy book

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capítulo quince
'libro de fantasías'

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HAEUN ACOMODABA UN POCO SU PELUCA MIENTRAS SE MIRABA EN EL PEQUEÑO ESPEJO QUE SE ENCONTRABA EN SU RECAMARA. Hace dos semanas que había entrado al castillo y que había dormido a su compañera de habitación, Yuri, por lo que, milagrosamente y de una manera u otra, terminó siendo la doncella de la princesa y todavía no lograba acostumbrarse a su peluca de color castaño, era muy fastidiosa, a veces le picaba. Pero eran detalles a los cuales no debía prestarle tanta atención, ya que así podría pasar desapercibida.

La princesa al recibir la noticia que su doncella Yuri había decidido repentinamente desaparecer ya que, según los rumeros de otros criados, había querido viajar por el mundo, no le quedó de otra que solicitar una nueva, aunque hubiera preferido no tener ninguna, su madre, la reina, se lo obligaría. La princesa Selen había estado observando silenciosamente a varias criadas del castillo, pero supo al instante que Haeun debía ser su doncella, su actitud iba a corde con la de ella y capaz podían llegar a ser amigas, le urgía a alguien que no fuera una cabeza hueca.

Haeun acomodó su camisa y quitó uno que otro doblez en su falda. Aún era un poco torpe con la plancha. Al estar totalmente lista, con su cabello amarrado perfectamente sin ningún mechón que se le escapase de su moño y sin que hubiera alguna arruga muy notoria de su uniforme, y finalmente, revisar que su compañera Yuri estuviera respirando, acostada en su respectiva cama; salió de su habitación y se dirigió al área del castillo donde la habitación de la princesa se encontraba.

En dichas semanas que había empezado con su plan, había descubierto varias cosas, una de estas siendo que los vampiros habían aparecido después de una ceremonia que había tenido la princesa para quitar sus dolencias, ya que al parecer, su alteza sufría de varias enfermedades y como consecuencia, era alguien muy débil.

De lo poco que le habían contado las otras empleadas, era una ceremonia de sangre, donde se utilizaría la sangre de hombre lobo, la cuál era sanadora, y la familia real tenía total disposición para hacer y deshacer con ella lo que quisiesen.

Era asqueroso. Ellos lo tenían todo, mientras que varios campesinos, antiguos vecinos, deseaban desaparecer sus dolencias para poder seguir trabajando, para así poder un plato de comida a sus mesas. Eso la enfadaba de tal manera que solo deseaba prender el castillo en llamas.

Pero luego de sus largas jornadas de trabajo, donde prácticamente consistían en estar detrás de la princesa y buscarla con sus caballeros ya que era algo rebelde y necia, regresaba a su habitación y se cambiaba, usando algo más cómodo para salir del castillo y empezar a cazar a cualquier vampiro que se encontrase vagando por el bosque en busca de su presa, un pueblerino inocente.

Su padre debe estar sacándose las canas de su cabello ya que su hija no era para nada indiscreta cuando salía a cazar, además, eso no formaba parte del plan. Lo bueno es que como no podía ver a su padre, se estaba ahorrando todos sus regaños, además, necesitaba hacer algo: actuar, saber que con cada vampiro qué eliminaba, hacía sentir más segura a las personas.

Las noches eran lo más divertido para ella, no es que fuera alguien sádica, claro que no, pero realmente sentía satisfacción al escuchar el sonido que producía el sacar el corazón de aquellos repugnantes vampiros o el sonido repetitivo de ella clavando una estaca ¡o hasta cuando los prendía en llamas y escuchaba sus lamentos!

Los guardias del reino ya estaban en alerta, todas las noches esperando atraparla o que diera un paso en falso para poder conocer su identidad pero era imposible. Haeun era astuta cuando se lo proponía, además de que siempre estaba con un capa tapando su rostro.

STRANGE ━━ enhypenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora