Erza vio como una de las criaturas atravesó la puerta de la habitación desde afuera. Pensó que serían más humanos pero eran seres parecidos a los goblins, mucho más grandes y fuertes, bien armados y que desprendían una fuerte olor. Titania intentó matarlo de un golpe, no obstante, la criatura se defendió con su espada.
—Es muy fuerte—pensó ella, no era el típico contrincante débil.
La pelirroja vio que sus compañeros estaban igual, Lucy esquivaba ya afuera de la casa mientras que Natsu y Gray hacian lo que podían, a golpe limpio con su adversario. Wendy utilizaba la magia de viento para volar y esquivar algunos ataques que le lanzaban.
Erza rodó esquivando un hachazo que por poco le corta el brazo. Se relajó un momento para respirar y calmarse, necesitaba centrarse del todo. Ahora que sabía el enemigo al que se enfrentaba, ya podía empezar el contragolpe.
Y así lo hizo, empezó a acelerar sus movimientos, algo que el enemigo no esperaba. Poco a poco iba ganando terreno, haciendo retroceder a este, justo cuando un enemigo que no había visto se abalanzó hacia ella desde atrás.
Un ataque de fuego impactó en el enemigo que lo hizo mandar bien lejos de la zona. Al voltear unos segundos, sus ojos captaron a Natsu sonriente. Mientras él estuviera allí, no tendría que preocuparse de los demás.
—Muere bestia—dijo matando de un golpe rápido a su enemigo. Usó su magia y habilidad, aunque eso le dejó un poco tocada.
Las otras criaturas no iban a retroceder. Lucy empezaba a fatigarse porque no encontraba una apertura. La magia de Wendy parecía no hacerle demasiado daño a su enemigo que cuando era golpeado por el viento, se volvía a levantar como si nada.
Un sonido irrumpió los combates. Era de una especie de cuerno o algo similar. Al escucharlo, los enemigos cesaron la lucha y retrocedieron, luego se fueron corriendo a la zona de donde habían salido para ocultarse y perderse.
—¿Estáis bien?—preguntó Erza.
Pero ella cayó de rodillas. Entonces vio que tenía algo en el costado clavado. Era una especie de dardo, ya lo había visto antes. Tenía magia que provocaba que perdieras fuerza y Erza ahora se sentía cansada.
—Erza-san—Wendy la tumbó en una de las camas para que descansase.
Todos aprovecharon para recuperar el aliento, el enemigo era mucho más poderoso de lo imaginado. Natsu estaba preocupado, pero la pequeña dragon slayer le dijo que solamente necesitaba descansar y recuperar fuerzas, que no era nada grave, algo que alivio a todos, pero especialmente a él.
—Solo necesito un rato y estaré bien—dijo ella.
—Esos enemigos dan muchos problemas—comentó Natsu molesto.
—A mi me preocupa más ese cuerno, puedo que haya un jefe—Lucy pensaba en el sonido de antes.
Gray tuvo una idea.
—Natsu y yo iremos a ver, vosotras cuidad de Erza, en cuanto os recuperéis, venid a ayudar—explicó el joven mago de hielo.
Ellas asintieron.
—Tened cuidado, no estaré para protegeros—dijo la pelirroja en un tono de madre protectora.
—Tranquila, te dejaremos alguno—dijo Gray sonriente.
—Si, o al menos lo intentaremos—añadió Natsu igual de sonriente y emocionado, quería pelear contras esos canallas.
Los dos magos comieron un poco y tomaron una pequeña poción que restauraba un poco de su magia. Luego, empezaron a caminar rumbo al lugar donde se habían escondido los enemigos mientras Lucy se curaba unos pequeños cortes que se había hecho.
—Tened cuidado—Erza tumbada, vio como ambos se alejaron.
Wendy cubrió la pared usando unos tablones y luego encendió un pequeño fuego para calentar el lugar que estaba bastante frío. Lucy agradeció y se acercó al calor, de paso mientras la pequeña revisaba de nuevo a Erza, ella cuidaría que el fuego no se extinguiera.
—Espero que les vaya bien—dijo Erza débil.
—Sabiendo como son...temo más por los enemigos—comentó Lucy restando importancia.
—Si...auch—le dolió el cuerpo al reírse.
Las tres se quedaron allí, protegiendo el lugar y asegurándose de recuperarse bien por el esfuerzo. Erza se durmió un rato debido al agotamiento.
—Deja que duerma, necesitamos a Erza al máximo de fuerzas—comentó la rubia.
Wendy se sentó junto a la maga celestial y miró el fuego mientras en su mano tenía una barra de chocolate para llenar el estómago.
—Esos dos estarán bien...Lucy-san—tras un bostezo, apoyó la cabeza en el hombro de ella y se quedó dormida.
Lucy solo sonrió, era la que menos cansada estaba. Miró por la ventana y en su mente les deseó la mayor suerte a sus amigos.
No muy lejos de allí, Gray y Natsu se quitaron de encima a unos vigilantes sin mayor problema, iban a pagar por hacerle eso a Erza.
—Sigamos—dijo el mago de hielo.
Ambos continuaron las huellas, sabiendo gracias al olfato de Natsu que algo gordo y grande les aguardaba no muy lejos. Además, desprendía un poder que se podía notar desde la distancia, era como sino le importase ser detectado, un alarde de su fuerza.
—Alerta, ahí viene—Natsu vio como una enorme figura oscura se aproximaba.
La criatura dio un sonoro grito y liberó tal fuerza que despertó a Wendy y Erza.
—Lucy...—dijo ella intentando ponerse en pie.
Lucy estaba mirando el fuego, sudando, temiendo por la vida de sus amigos. Y Wendy fue abrazada por el miedo que tenía.
No iba un oponente fácil.
Continuará...
ESTÁS LEYENDO
La lujuria de Titania-Natsu x Erza (Narza)
FanfictionPor mucho que se quiera reprimir, la naturaleza humana actuará en Erza quien deseará pasar más tiempo disfrutando del amor que de las misiones. Y lo hará con el chico con quien menos pensaba, el querido mago Natsu Dragneel. A Través de él, sentirá u...