N.city - [NCT]

10. Diez estamos en problema.

—Tu padre me mintió —Hablo ChenLe observando a el castaño, JiSung solo dejo de tocar la guitarra y miro a ChenLe con duda.

Ambos están sentados en la alfombra de la sala (a petición de JiSung) para estar más cómodos, mientras el contrario le enseñaba lo básico de los acordes.

—¿Sobre qué?

—De que no sabías tocar la guitarra. El señor SeHun me dijo que tenías nula experiencia en eso —Explico el contrario.

—La verdad es que así lo es. Solo que tuve un... Maestro virtual que me enseñó lo básico, lo seguí intentando por mi cuenta hasta que me aburrí, y lo deje.

—Si te digo la verdad, solo debes de afinar más cada acordé, y relajar tus dedos al momento de tocar, suena muy brusco en cuanto la melodía tiene que ser más suave, aunque creo que una guitarra eléctrica te hubiera sentado mejor —Recomendó el chino al contrario, JiSung suspiró y paso una mano con su cabello, recostado su espalda al mueble de la sala.

—Me gusta más la guitarra acústica, que mi apariencia no te deje engañar por lo que me gusta o no —JiSung no trato de sonar grosero, aunque el pelinegro se sintió cohibido de inmediato por lo dicho del menor, bajado su mirada avergonzado.

—Lo siento, no quise decirlo de esa manera —Y el pelicastaño de inmediato se sintió mal, él tampoco quería que su vecino lo interpretara de esa manera lo que dijo.

Eran tan diferentes, ChenLe era el típico preppy boy bueno en todo, mientras que el contrario era un adolescente pasando por su etapa edgy de no media en nada lo que decía.

—¡ChenLe! —Antes que él Oh del medio dijera algo, escucho su padre llamar a su vecino a la cocina, este apartó todas las partituras a un lado y se paró del piso.

—Vuelvo enseguida —El menor asintió viéndolo, y el pelinegro desapareció de la sala.

ChenLe entró tímidamente a la cocina de los Oh, viendo al padre de JiSung en su teléfono.

—Ya la hora que es y Ten no aparece. Este niño me sacará canas verdes.

Hablo solo el mayor, algo que le pareció gracioso a el pelinegro, también algo que le causó gracia fue al ver al mayor con un delantal de algunos personajes de Hello Kitty en la cintura, con la camisa blanca aremangada y un poco de harina por doquier.

Era una imagen muy diferente a la que solía ver de su padre, el señor Qian siempre era alguien el cual se mantenía impecable siempre, sin importar qué.

—¿Algún problema? Señor SeHun —Se atrevió a preguntar ChenLe, y al fin el contrario se dio cuenta de su presencia y cambiaron su semblante serio a uno más calmado.

—Ah, hola ChenLe, perdoname por interrumpirlos, solo quería entregarles la merienda, ya que Ji está lesionado, quise llamarte a tí —Dijo amablemente SeHun, colocando una bandeja con galletas y jugó—. Y no, no hay ningún problema, solo que estar al pendiente de 5 niños es una tarea un tanto... Complicada, y un Oh sin supervisión es un tanto peligroso.

—Comprendo, viví un tiempo con mi tía en China, y ella tiene 3 hijos, son dos menos, pero la verdad valían por diez —Comento ChenLe, SeHun sonrió.

—Bueno, si ellos valían por diez, yo tengo todo un escuadrón de guerra. No los interrumpo más, sigan y espero que les guste.

ChenLe agarró la bandeja en sus manos, pero antes de irse SeHun le detuvo.

—Ten le un poco de paciencia a Ji, es un poco torpe con las palabras, pero no quiera decir nada que haga sentir nadie mal, solo es un Oh siento un Oh.