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Canción recomendada:


Lights are on - Tom Rosenthal.》

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Con el corazón pesado por la reciente pérdida de mi tío Sirius, comencé a empacar las cosas en el baúl mientras Hades volaba por la habitación sabiendo que en unas horas estaríamos en el tren.

El proceso de empaquetar se convirtió en un viaje nostálgico a través de los años, y mientras doblaba cuidadosamente la ropa, no pude evitar sentir una profunda tristeza por Harry, que había perdido una parte de su familia cuando se fue Sirius. La nostalgia surgía de todos los años que pasábamos juntos, aunque cada curso era recordatorio de que Voldemort cada vez está más cerca.

Sin embargo, a medida que organizaba mis cosas en el baúl, también me llenaba una emoción creciente. La razón detrás de mi alegría inminente era clara: finalmente, después de un tiempo difícil, estaba a punto de regresar a casa. La perspectiva de volver a abrazar a mis padres y sumergirme en el apoyo incondicional de mis seres queridos me inundaba de una felicidad cálida y reconfortante.

Al terminar cogí el periódico que me trajo Hades y me senté en mi cama para ponerme a leer.

"Debería dimitir el ministro"

"Umbridge ha sido cesada"

"Voldemort ha vuelto"

"Director de Hogwarts ha sido rehabilitado"

"Estas son las noticias que quiero leer."

Yo: Me voy a dormir chicas.- Hades ululó en la ventana. Antes de dormir le acaricié un par de veces y le dejé marchar

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Estábamos todos menos Harley que estaba con algunos de Slytherin, de camino al tren.

Harry: He estado pensando en algo que me dijo Dumbeldore.

Lucy: ¿Y qué es?

Harry: Aunque nos queden muchas batallas por librar, tenemos algo que Voldemort no tiene.

Ron: ¿Y?

Harry: Algo por lo que no vale la pena luchar.- Yo sonreí a Harry y él me devolvió la sonrisa.

Me acomodé en el asiento del tren, sintiendo la suave vibración a medida que comenzaba a moverse. A través de la ventana, el paisaje pasaba como un lienzo en constante cambio, con campos verdes que se extendían hacia el horizonte y pequeños pueblos que aparecían y desaparecían en un destello.

Hermione, Lucy, Harry y Ron charlaban animadamente. Sus voces se mezclaban en un murmullo, formando un telón de fondo constante para mi viaje tranquilo. Cada tanto, sus risas llegaban a mis oídos, creando pequeños destellos de alegría que se entrelazaban con el paisaje que pasaba.

"Siempre encontramos la felicidad en cualquier sitio."

Mientras el tren avanzaba, me dejé llevar por la serenidad del momento. Disfrutaba de la calma que llenaba el espacio entre nosotros, un silencio que me permitía sumergirme en mis pensamientos y apreciar la belleza efímera del mundo exterior. Cerré los ojos por un instante, inhalando profundamente y dejando que el ritmo constante del tren me relajara por completo.

Aunque estaba en silencio, me sentía parte de algo más grande, sentía que eran los mejores amigos que me he podido hacer en mi vida. A veces, sus voces se volvían más audibles, y yo sonreía ante los chistes tontos de Ron y las historias que compartían los demás.

"Falta Harley."

Me daba tanta rabia que estuviera tan separada por sus padres.
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Cuando llegamos al andén estaban mi padre y mi madre. Mi padre con los ojos rojos de llorar la muerte de su hermano.

Realmente lo pasó mal, tiene que ser doloroso perder a un hermano.

Harry se acercó a mi padre y le dió un abrazo en señal de apoyo.

"Después de todo, Harry también es familia, ¿no?"

Eleonor Foster Y La Orden Del Fénix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora