Cuando pedí mis deseos... Nunca pensé que esto pasaría...
Pensaba que con mi poder no habría nada que se pudiese interponer en mi camino, que sería invencible. Solo buscaba diversión. Aventura. Y un escape de la cruel realidad sobre haber muerto...
─ Ohh, no puedo creer que mi hermanita irá a Beacon conmigo. ¡Este es el mejor día de todos!.
Esas fueron las palabras de una chica rubia de ojos morados que bestia con ropa de color café, y negro mientras abrazaba a cierta caperucita roja, que el día de ayer junto con un nuevo amigo habían intentado evitar el robo a una tienda por parte de un grupo de delincuentes.
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Ruby se veía con una cara similar a la que una persona traumatizada tras descubrir una atrocidad, por lo que intentó hacer que la situación parase de alguna forma, pidiéndole con una voz suplicante que se detenga.
─ Porfavor paraaaaa...
La hermana de Ruby la dejo de abrazar mirándola de frente ya agarrándola de los hombros con una gran sonrisa y una actitud muy animada, notándose orgullosa por su hermana menor.
─ Estoy tan orgullosa de ti. Es increíble que hayas entrado antes a Beacon antes de lo usual.
─ Vamos Yang, no fue para tanto.
Ruby le refuto a su hermana mayor Yang , la cual pese las palabras de modestia de su hermana, no paro de elogiarla y felicitarla.
─ Porfavor hermana. Eso es algo increíble y lo sabes. Cuando entres a Beacon todos pensarán que eres lo mejor de lo mejor. Solo piénsalo que te llamen de esta forma: "Ruby Rose. La joven promesa de Beacon".
Esto ultimo lo dijo abrazando a su hermana por el cuello y movía su mano por el aire imaginando que esa forma de llamar a su hermana aparecía en el aire en letras grandes y brillantes. Sin embargo la expresión de Ruby solo empeoro, pareciendo cómo si Yang le estuviese contando la peor de las pesadillas, quitándole el brazo de su cuello, y recriminándole de nueva cuenta.
─ ¡No!. No quiero que piensen que soy "Lo mejor de los mejor", ni que me digan "La joven promesa de Beacon". No quiero ser nada de nada. Tan solo quiero ser una chica normal, y que me digan "La joven normal de Beacon". Es todo
Mientras Ruby perdía la paciencia de a poco con su hermana, esta solo la miraba con una gran sonrisa, pero igual le parecía un poco raro su comportamiento.
─ ¿Qué pasa contigo?. ¡¿Qué no estas emocionada?!. ¡ES BEACON!... ¡La academia a la que siempre quisiste entrar desde que tienes conciencia!.
─ Ya se. Y por supuesto que estoy emocionada... Es solo que... Me adelantaron dos años, y todo fue tan repentino. No quiero que todos piensen que soy especial o algo así.
Dijo Ruby dejando ver la inseguridad que sentía por el hecho de que la hayan adelantado académicamente de una forma tan repentina.
Yang trato de reconfortar a su hermana dándole un fuerte abrazo diciéndole que eso no importaba, ya que ella si era especial.
En otra parte de la nave se veía a cierto peli castaño ver la escena a la lejanía, indeciso de si ir a saludar a la chica que había conocido ayer. El siempre había sido algo tímido he inseguro con respecto al hecho de socializar tanto en su vida pasada cómo en su nueva vida. Sus círculos de amigo siempre habían sido reducidos, no pasando de las cinco o seis personas, y en Remnant nunca había tenido alguien a quien llamar amigo debido a sus pocas habilidades sociales y timidez. Sin embargo, el enserio quería entablar una amistad con Ruby. El día anterior cuando se conocieron le pareció una persona bastante agradable y tierna, además que sería una buena idea ir entablando amistades en la academia. Pero por su cabeza pasaban dudas cómo, ¿Qué pasa si no le caigo bien fuera de las peleas?. ¿Qué pasa si digo alguna idiotez?. ¿Esa chica rubia será amiga suya?. Y así siguió un buen rato en el lio mental del querer hacerlo pero no poder hacerlo.
