𝙥𝙧𝙞𝙢𝙖𝙫𝙚𝙧𝙖 𝙚 𝙞𝙣𝙫𝙞𝙚𝙧𝙣𝙤 ⌇ ᴶᵃᵉᴰᵒ

𝙖𝙞𝙧𝙚

Semana del aire, por mala suerte no podían viajar, pero varios rincones del palacio fueron adecuados para el cortejo del omega. La semana había empezado maravillosamente, Jaehyun y Doyoung parecían totalmente acoplados, después de tanto tiempo conociéndose y aprendiendo del uno al otro hacía creer a todos que todo era perfecto y dulce. 

Pero la verdad es que a veces tenían pequeñas discusiones, siempre empezadas por los miedos de Doyoung, como ahora que el omega estaba a punto de llorar y Jaehyun se sentía un mal alfa al no saber cómo ayudar a su omega a alejar esos malos pensamientos. 

— Aun tenemos tiempo para romper el cortejo, podemos parar esto, tu no mereces a un omega roto y defectuoso, no puedo estar a tu nivel Jaehyun... 

Llegaron a este momento porque mientras daban uno de sus paseos se presentaron frente a ellos algunos de los omegas del palacio que Doyoung conocía bien, esos omegas han sido concubinas de varios alfas que pedían su ayuda, pero esto no era el caso y solo pudo incomodarlo y todo aumento al ver que Jaehyun deber de rechazar las pláticas con esos omegas continuó hablando y aparte sonriendo ampliamente causando que Doyoung sintiera dolor y sus miedos salieron, no se molestó en indicar que se iba, el omega solo se alejó aunque a lo lejos escuchó la voz del alfa llamándolo. 

Y eso nos trae a este momento, Doyoung hecho un mar de lágrimas, sintiéndose humillado y inútil, un alfa necesita descendencia y más cuando iba a ser rey, eso era algo que Doyoung siempre tenía presente, pero las últimas semanas había olvidado eso ya que la felicidad lo cegó, pero volvió en sí y no había porqué seguir soñando con tener a alguien a su lado y menos alguien como Jaehyun, no era digno del próximo rey del reino del invierno. 

— Doyoung, no quiero terminar de cortejarte porque te amo...

— ¡El amor no es suficiente!, tú serás rey, necesitas descendencia y yo no puedo dártela y no quiero ver que una concubina tenga a tus cachorro... Yo no quiero...

— Nunca sucederá eso, yo no tendré a ninguna concubina, tu eres lo único que quiero, no me importa la descendencia, podemos adoptar o buscar alguna forma de tener un bebé sin recurrir a una concubina, Doyoung quiero que entiendas que solo te necesito a ti — El alfa empezó a liberar de sus feromonas para calmar a su omega, se acercó con cuidado y rodeo al más pequeño entre sus brazos donde lo acurrucó contra su pecho y acarició con cuidado su cabello para poder tranquilizarlo, podía sentir como su camisa quedaba húmeda por las lágrimas del omega pero eso no era importante para él. — Estamos en la semana del aire, en esta semana debemos aprender a confiar el uno del otro por medio de la comunicación, por eso quiero que hablemos y estemos bien, odio verte llorar por mi culpa...

Doyoung no habló, se quedó quieto sollozando por lo bajo y se quedó acurrucado en el pecho del alfa el cual no lo presionó y espero a que hablara. 

— Tengo miedo... — Doyoung susurró entre sollozos, era comprensible que el omega tuviera miedo, se la ha pasado siendo ignorado por no ser el omega perfecto, siempre fue rechazado por no ser el típico omega pequeño y lindo, y sumándole su infertilidad eso lo volvía un omega inservible por eso no había tenido alfas cortejandolo y ahora estaba temeroso de no llenar las expectativas que habían caído en él. 

— Lo se cariño, pero necesitas confiar en mi, yo se casi todo de ti, se que tienes problemas para concebir, se que no eres como los otros omegas físicamente y eso no me importa porque creo que eres hermoso, todo de ti es una obra de arte y me encantas, te amo Doyoung y no lo digo a la ligera, realmente estoy enamorado de ti, así que por favor creeme, nadie es como tú 

Doyoung rodeo con sus brazos al alfa y se acurrucó contra él, sabía que estaba diciendo la verdad, pero igual seguía teniendo un poco de problemas más que nada consigo mismos porque sabía que debía confiar en su alfa, pero también quería ser lo mejor para él y saber que no podía hacía que algo de su orgullo se hiriera, Jaehyun pudo notar ese toque ácido en el olor del  omega, haciéndole ver que tenía aún algunas dudas.