Mew Suppasit es un guapo y talentoso músico y cantante tailandés de veintisiete años, el cual es muy consciente de que es el amor platónico de muchas y muchos fans en su país. Sin embargo, su corazón se mantiene cerrado a cualquier intento de entrar...
Bangkok, Noviembre 2021, un mes antes del concierto.
En la casa familiar de los Kanawut todo estaba tranquilo, excepto en la habitación del pequeño de la casa.
Gulf permanecía sentado en su escritorio frente a su ordenador, muy atento a la pantalla y no, no estaba estudiando como había asegurado a sus padres que haría.
Tras terminar su comida, este había subido y había entrado en la página de concursos de la productora musical MMTS.
En la mañana, este había escuchado decir a una compañera del instituto, que ese día terminaría el plazo para participar en la encuesta sobre Mew Suppasit, un guapo y talentoso músico, del cual se sorteaba una entrada doble a su próximo concierto, con un pase VIP para conocerlo en persona.
...-Vamos, vamos, tiene que ser mía. No puedo perder la oportunidad de conocerlo, llevo esperando por esto mucho tiempo-le repetía a su monitor mientras sus piernas y manos se movían incesantes e impacientes- venga, venga..
El moreno adolescente de diecisiete estaba muy nervioso y no era para menos, ya que los resultados saldrían en poco tiempo y debía responder correctamente a cada una de las preguntas y demostrar ser el mayor fan o no lo lograría.
Para él, conocer en persona y estar al lado de Mew, era como alcanzar lo máximo pues desde que lo había descubierto dos años atrás, poco a poco había ido creciendo en él, no solo la admiración de un fan cualquiera, sino que también lo había hecho un enamoramiento platónico muy intenso.
En su habitación tiene múltiples fotos del artista, las cuales fue recopilando de revistas, de periódicos y también de capturas de las redes sociales.
Además, guardaba celosamente muchos archivos, con cada una de las entrevistas que el músico ha concedido desde sus inicios y todos los recortes con noticias que han salido acerca de su vida.
A menudo, su mejor amigo Mild le ha tachado de estar muy obsesionado, hasta el punto de ser enfermizo pero Gulf no lo veía así, solo creía que el guapo músico era el amor de su vida y que jamás logrará amar a nadie más.
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Finalmente, tras muchos nervios y releer varias veces cada pregunta para no fallar, este consiguió enviar sus respuestas, entonces sintió en su estómago un fuerte dolor debido al estrés.
Ganas de vomitar vinieron y rápidamente corrió al baño pues la comida ingerida estaba pidiendo paso para abandonar su cuerpo.
Eso no era una novedad para él pues muy habitualmente sufría ese tipo de contratiempos pues su estado de nerviosismo era tal que su sistema colapsaba, aunque nunca había llegado a más.
Finalmente, tras levantarse del retrete donde se había arrodillado, este se lavó los dientes y regresó a su escritorio, donde el cronómetro de la página da por finalizado el plazo.
Los resultados no tardaron mucho pues todo estaba automatizado, sin embargo la espera fue una tortura para cada uno de los participantes y mucho más para el adolescente.
Tras entretenerse revisando fotos y demás cosas sobre su ídolo musical en su ordenador, Gulf volvió a impacientarse.
-Venga, venga, vamos...
De repente su móvil comenzó a sonar y este miró la pantalla con desánimo pues era Mild quién llamaba, seguramente para saber.
-¿Qué tripa se te ha roto?- preguntó tras descolgar.
-Hey, oye, ¿Ya sabes algo?, ¿Iremos o no al concierto?
El moreno chequeó la lengua en señal de desacuerdo.
-¿Cuándo te he dicho yo que la otra localidad sería para ti?
Una irónica risilla se escuchó al otro lado de la línea
-Oh vamos, soy tu único amigo, ¿Quién más iría contigo?
-Ni siquiera te gusta él, ¿Por qué irías?
-Pues por cuidarte y que no cometas una locura abalanzandote sobre él o algo así
-Ja ja ja muy gracioso, amigo.
Un breve silencio se hizo.
-Bueno, entonces, ¿Sabes el resultado o no?
Gulf soltó un desolador suspiro.
-No, todavía no han salid...
Este no pudo terminar de responder a su amigo pues la página de la productora musical se actualizó y una nueva publicación se mostró.
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-Oye Gulf... Gulf, ¿Sigues ahí?, ¿Qué está pasando?
Este no pudo articular palabra de inmediato, ya que estaba en shock pues no podía creer que su nombre estuviera escrito en la pantalla.
-Oye...oye, ¿Estás bien?-Mild ya estaba empezando a preocuparse-¿Acaso te has desmayado?, Respóndeme.
-S-Si est-estoy bien...lo he co-conseguido-balbuceó finalmente el moreno tras unos segundos-¡las entradas son mías!, ¡Siiiiiii.....!
A continuación, otros gritos se escucharon también del otro lado de la línea.
-¡WooooW!, ¡Siiiiiii...!, ¡Eres genial Gulf!, ¡Realmente el mejor!, ¡Siiiiiii.....!
