El camino de la redención (AzulaXAang)

Parte 2: Escape

El viaje del equipo Avatar fue muy silencioso y relativamente calmado, pero no se podía ocultar que todos se encontraban tensos, tener a la princesa con ellos en el mismo lugar los hacia sentir cosas diferentes a cada uno, pero todas eran terribles.

Zuko sentía una mezcla de miedo y preocupación, pero también se sentía extraño, había notado algo en Azula que no había visto jamás, pero aun así no podía evitar pensar que Azula en cualquier momento se iba a despertar y trataría de matarlos a todos, el sabia que Azula en máximo potencial era capaz de pelear contra todos los que estaban encima de Appa.

Katara sentía mucho enojo y rabia, sentía que Aang no la había tomado en cuenta. El había decidido traer a su mayor enemiga con ellos, estaba exponiéndolos a un peligro indescriptible, ella sabia de lo que Azula era capaz, sabia cuan cruel y despiadada era esa chica y no podía evitar sentirse un poco traicionada por Aang. 

Aang por otra parte estaba encima de la montura de Appa cuidando que Azula no se fuera a despertar y a atacarlos, al fin y al cabo el que Azula estuviese viajando con ellos era su responsabilidad, ya que nadie mas estaba de acuerdo con traerla con ellos, aceptaron a regañadientes pero todos estaban absolutamente tensos con la decisión del Avatar.

Azula no despertaba, estaba desmayada, aunque parecía que dormía plácidamente su rostro estaba tenso y tenia ligeros espasmos, pareciese que estuviera teniendo pesadillas, aun así Aang no se separaba de ella, porque si ella despertara y algo malo sucediese seria su culpa, y el decidió no arriesgarse. 

Llegaron a un bosque bastante alejado del templo aire del oeste en el que por fin pudieron aterrizar y armar el campamento, era un lugar oculto y perfecto para esperar e ir a buscar a los demás, ya que durante el escape el grupo se había separado, pero sabían que Toph seria capaz de encontrarlos. Aang estaba genuinamente preocupado por sus amigos faltantes, sabia que estaban bien, pero siempre existía la preocupación de no verlos, de pensar "¿Y si esta vez no consiguieron escapar?" Dudas que se despejaron al amanecer porque Toph junto con el resto consiguieron encontrar el campamento.

La felicidad del reencuentro fue efímera, ya que mas pronto que tarde comenzaría la discusión de nuevo sobre lo peligrosa que era Azula y lo estúpido que fue traerla con nosotros. Sokka se apresuro y ató a la princesa para que cuando despertara no fuera un peligro, o al menos para que le tomara un poco de tiempo el volverse uno.

El grupo se encontraba en una encrucijada total, no podían mantener a Azula en el grupo porque seria demasiado peligroso para todos que ella estuviese cerca, ya que no sabrían cuanto tiempo podrían contenerla antes de que ella consiguiese escapar de alguna forma, ya tenían experiencia en eso y sabían perfectamente que Azula siempre tramaba algo. Pero tampoco les parecía bien dejarla en libertad porque entonces ella volvería con las topas de la nación del fuego.

Toda esta situación tenia al equipo Avatar dividido y estresado, la confrontación final estaba cada vez mas y mas cerca y la decisión de que hacer con Azula podría ser algo crucial en el desenlace de la guerra.

_Entiendo lo peligroso de tenerla como prisionera, podemos llevarla lejos antes de que despierte y dejarla en algún lugar_ Dijo Aang tratando de darle solución al problema.

Zuko respondió con un tono de frustración por lo que había pasado en el templo _¿Eso que importa? ella nos encontrará, ¡Siempre lo hace!_

Katara con su tono de molestia secunda a Zuko _Odio estar de acuerdo con el, pero tiene razón Aang, no importa lo que hagamos Azula siempre nos encontrará tarde o temprano, y se nos esta agotando el tiempo_ 

Aang miró por un momento a Azula, que ha dejado de tener espasmos y ahora parece que descansa en total calma, vista de ese modo pareciera una chica completamente indefensa, así ni siquiera parece el frio y despiadado monstruo que siempre trata de asesinarnos, así incluso se ve linda. Aang deja de divagar y se concentra en intentar buscar una solución para el problema en el que se ha metido ahora.