The Red Moon

Capitulo 7

Dos pares de pies que se mantenían perfectamente sincronizados, una mano en la cintura y otra que sostenía la suya con fuerza como si no quisiera que se alejara una vez. Para Christopher aquello era como un sueño, porque tenerlo una vez más junto a él era mucho que procesar.

Y Felix... Felix se encontraba perdido en los ojos rubíes, mientras su inerte corazón no podía manejar todo aquello que sentía. De pronto la musica cambio, dejo de ser un vals agresivo para convertirse en uno más suave y tanto el elev como maestro se miraron, conocían a la perfección aquella pieza, el mismísimo Wagner la habia escrito para ellos hace un par de milenios en la vieja Italia.

Sus cuerpos permanecieron estáticos por unos instantes y después de una sincera sonrisa ambos continuaron moviéndose al compas de la pieza fluyendo cual océano  por el piso de mármol.  El mayor nunca separo su mirada del más joven y entre notas y gotas rojas volvió a perderse en el rio de sangre frente a sus ojos.

—Estas loco si piensas que voy a cuidarlo.

—Felix...—Sentencio el Líder — No puedes abandonarlo, ademas le e dicho al consejo que tú te encargarías de él.

—¿QUE HAZ HECHO QUE? —  exclamo el rubio sorprendido levantándose de su silla, la ira implantada en sus ojos — Sifir yo no puedo cuidarlo, sabes como están las cosas en el gremio, en cuanto la camarilla se entere de su existencia querrán su cabeza! Jamas aceptaran a un neonato de un Caitiff.*

—Es por eso que no tiene por que enterarse que Onuris lo a convertido.

—Tu amigo mio estas demente — Felix volvió a sentarse en su silla, retirando sus gafas y dejándolas sobre el escritorio.

—Dragón escucha — comenzó el pelinegro cuando noto a su protegido un poco más calmado — Solo tienes que mantener al chico contigo un par de años, después de eso yo me haré cargo esta bien?
—¿Por qué no puedes cuidarlo tu ahora, eh?

— Felix por el amor de dios, van a matarlo! — Sifir alzo la voz y tanto el chico detrás de él como el nombrado se tensaron. Era extraño para el rubio ver a su amigo enojado, el vampiro mayor conservaba su personalidad relajada y juguetona la mayor parte del tiempo, sin embargo, por la actitud de sifir Felix podia deducir que esto parecía serio

—Hace cuanto lo convirtieron? —indago un poco el menor.

—Según tengo entendido, Onuris lo convirtió cuando salió a cazar por la noche hace tres dias, el consejo lo encontró al día siguiente cuando el chico intento alimentarse con una mujer que pertenecía al rebaño. Los imbeciles creyeron que era hijo de la daga negra y querían respuestas, desde entonces lo han estado torturando, el informe dice que van a matarlo a medio día de hoy. Si Azahar no me lo hubiera comentado, él ya estaría muerto.

— ...

—te recuerdo que su situación es parecida a la tuya cuando recién llegaste Felix — Mencionó Sifir tratando de terminar de convencerlo, cuando su Elev no dijo nada

El rubio suspiro, analizando lo dicho por su líder imaginando el peor de los escenarios de lo que hubiera pasado si Sifir no hubiera decidió ayudarlo hace un par de milenios. Chistando la lengua, el menor se levanto de su asiento rodeando el escritorio de roble y recargándose en este.

—¿Como te llamas niño? — preguntó con los brazos cruzados mirando por sobre el hombro de su amigo. El chico volvió a tensarse al sentir la mirada del vampiro sobre él.

— Christopher — Murmuró el recién nacido con la cabeza agachada.

Felix lo estudio por un momento mientras se acercaba a él, el miedo podia olerse emanado de su ser, el rubio supuso que a excepción del mayor, todos los demás del gremio debieron lastimarlo. —Levanta la cabeza Christopher, déjame verte.