Sus ojitos se cerraron aun con Erwin entre sus brazos, podía sentir como su respiración poco a poco se convertía en bradipnea*, e incluso podía escuchar sus latidos en sus oídos de forma fuerte y clara, tanto que le asusto que Erwin pudiese oírlos desde donde estaba. –Está bien porque eres tú– su estómago se llenó de mariposas escuchando al rubio, abrió sus fanales lento para encontrase con los del contrario.
Su corazón se sintió achispado, como si estuviese borracho tal vez simplemente estoy soñando, y aun si así fuere, no hizo nada para despertar.
Con delicadeza se separó del encasillado cuerpo de Erwin sentándose a su lado, sus carrillos estaban rosas, mientras que las comisuras se levantaban con una divinidad pura, tal vez, sus palabras no habían sido tan claras, pero parte de su corazón se sentía más aliviado ahora, aun si Erwin pensaba en el cómo un cómodo hombro para llorar.
Con un poco mas de confianza, sus manos tomaron las de Erwin, acercándose despacio hasta quedar tan cerca que podía recargar su cabeza sobre su hombro, pero no lo hizo, solo lo miro con ojos refulgentes. Erwin pensó que Levi tenía un aura tan encantadora que sería imposible que cualquier chica cayera ante él. –Tus manos están heladas, y dejaste de temblar– El rubio asintió ahora con una ligera sonrisa, pero aun con los mofletes marcados con lágrimas secas, Levi soltó una pequeña risita sintiendo este instante tan cercano.
Aunque aun en su inconsciente quería aprovechar tanto su tristeza para acercarse a él, para curarlo, para que lo amara, y para amarlo. –Gracias Levi– El azabache sonrió apenado, supuso que ahora el chocolate se había enfriado, removió de forma consciente sus cursilerías, para levantarse siendo detenido por el agarre del rubio –¿Adonde vas? – Enternecido inclino su cabeza mirando a Erwin, recordando la película de Coraline y el gato negro, regreso a su postura normal.
–Iré a calentar el chocolate– Erwin se negó, halando descuidadamente a Levi, incitándolo a sentarse de nuevo a su lado
–Bebamos mañana– Una bocanada de aire silencioso salió de sus labios, aquel "mañana" significaba un "juntos" para el –Iré por la mañana a mi trabajo y quiero regresar aquí contigo– Levi lo miraba en silencio sintiendo su corazón arder –Solo si no te molesta– Antes de que las manos de Erwin lo soltaran el azabache tomo una de ellas.
–No me molesta, quiero ser de ayuda– Sintió que su ánimo había pasado de un gato cariñoso a un Golden retriever de tajo. Erwin sonrió grande, mirándolo. El reloj prontamente marco las 11, el mas pequeño aun no sabia a que hora Erwin acostumbraba a salir de su casa a su trabajo, pero estaba seguro de que necesitaría dormir bien, y mas aun ahora que se encontraba algo decaído –Vayamos a dormir, es tarde– Erwin asintió, Levi se dirigió a su habitación esperando a ser seguido por el hombre, sin embargo, no sucedió. –¿No vendrás? – El rubio lo miro extrañado –No voy a dejarte aquí, por la noche la sensación térmica baja demasiado y mas aun con la tempestad afuera– Erwin parecido pensarlo, para después levantarse y seguir a Levi.
6:30 am
El mas bajo estiro su cuerpo mirando a Erwin recostado en su cama, por la noche había insistido bastante en quedarse en el futón porque era una visita, pero como Levi había aprendido de su madre, el insistió en dejarle su cama. Claramente el azabache había ganado.
Conservo su pijama saliendo de la habitación, la pequeña sala se sentía helada en comparación, y gracias a dios Erwin no había dormido allí.
Recogió las tazas de chocolate que aun estaban en la mesa, tirando el chocolate al fregadero ya que este había estado toda la noche ahí, y ni siquiera quería averiguar si un par de insectos se habían colado en su casa para permanecer cálidos. Frunció la nariz viéndose notablemente asqueado por lo que había imaginado, lavo las tazas para seguidamente ponerlas en la tarja a su lado para que estas se secaran.
De forma rápida encendió el fuego en la estufa para comenzar a cocinar un omelette de champiñones, esta vez usando mas huevos que de costumbre, eso lo hizo sonreír.
Escucho la puerta de su habitación siendo abierta y pasos siendo hacia la cocina, un Erwin con el cabello revuelto y cara hinchada apareció en el umbral de la puerta –Buenos días– No era nada especial, pero Levi se encogió, llevaba tiempo sin escuchar eso de alguien que no fuese su madre o Eren en la florería
–Buenos días– Devolvió con una sonrisa mirando de nuevo al omelette– Puedes ocupar la ducha, tu ropa esta sobre el sofá, anoche me dio insomnio y la planche, también puse algo de ropa interior para ti, no se tu talla, pero tenía unos que había comprado y no me eran de mi talla– Volteo la tortilla fácilmente esperando a que se cociera del otro lado, para luego mirar a Erwin –¿Qué pasa? – Erwin sonrió.
–Se siente como una pareja de casados– Levi se sintió desfallecer al ver una gran sonrisa plantada en el rostro del hombre. –Con permiso, iré a la ducha– Luego de causar un tifón de emociones el rubio desapareció en la puerta del baño. Antes de que pudiese reaccionar, el olor a quemado inundo sus fosas nasales.
7:25 am
Erwin había comido el desayuno entero como si no hubiese comido en días enteros, su corbata estaba mal puesta y su camisa arrugada del cuello, era tarde.
Se levanto de la mesa apresurado aun con un bocado en su boca descolgando del perchero su abrigo. Antes de salir sosegadamente Levi lo detuvo. –No creo que te veas muy bien llegando tarde y con el traje en un trágico estado– Rodeo el cuerpo de Erwin dirigiendo sus manos al cuello acomodándolo, al igual que su corbata, dando unos pequeños golpecitos en su pecho –Bien, ya esta grandote, ve– Se quito de la puerta mientras Erwin se ponía sus zapatos a toda prisa, pero antes de salir, quedo en la puerta unos segundos pensando –¿Te falta algo? – Dio media vuelta. Atrayendo a Levi entre sus brazos en un cálido y apretado abrazo, Levi pestañeo, su corazón se acelero y sus mejillas enrojecieron.
–Gracias– Susurro en su oído para después salir.
Iba a actualizar hasta el Viernes o sábado, pero aprovechando que hoy no tenia que estudiar, lo escribí, creo que es el capitulo mas largo hasta hoy. Lo siento, no estoy acostumbrado a escribir cosas tan largas.
Gracias por leer
No olviden votar (。^▽^)
-Mirio
ESTÁS LEYENDO
Sobre ti || Eruri
FanficAU Levi tiene un pequeño negocio de flores a las afueras de Kioto, mientras que cierto rubio pasa a comprar unas cuantas camelias cada fin de semana. o donde Levi está enamorado del desconocido de las camelias.