capitulo 3

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5 de diciembre de 2010

Querido diario hoy fue un día increíble. Y eso que, el cumpleaños ni siquiera era mío.

Apenas llegué a la escuela no aguante más y fui directo a buscarla. Debía darle su regalo o yo mismo lo abriría.

—¡Pequeña ninja!—grite corriendo hacia ella apenas la localicé en el patio.

—Ya te he dicho que no ...

—¡Feliz cumpleaños!—la interrumpí a la vez que le extendí el paquete que tanto me costó envolver.

—¿Eh?—dijo confundida "pobre seguro no se lo esperaba"

—Tu regalo. Tómalo.

—Pero ... ¿Cómo lo...?

—¿Encerio creiste que se me iba a olvidar? Agradece que no aparecí a las 12:00 en tu ventana y cantarte las mañanitas solo para ser yo la primera persona en felicitarte.

—De hecho, si eres la primera persona en hacerlo.

No estaba seguro si sentirme feliz por aquello. Ni siquiera supe que decir.

—Solo abre tu regalo.

Ella algo dudosa lo tomo y con mucha delicadeza y muy lentamente (para mí desgracia) empezó a quitarle el envoltorio.

—¡Ábrelo ya!

—Espera, quiero conservar el envoltorio. —mi paciencia no pudo con aquella tortura y rompí el envoltorio yo mismo.

—Luego te compro todos los envoltorios de la papelería si quieres.—por primera vez desde que la conocí oí como se reía.

¡Joder era la risa más jodidamente hermosa! Ojalá lo hubiese grabado para poder tenerla de alarma.

—¡Oh por Dios!

—Ya puedes decirme que me amas.

—No puede ser. ¡No puede ser! ¡Joder, te has pasado!

—No habías parado de hablar de esos libros. Así que con ayuda de mamá los pedí.

—Pero ... Algunos aún no han salido a la venta.

—La preventa ha iniciado un poco antes.

—¿¡Los pediste en preventa!?

—Algunos. ¿No te gustaron? ¡Si quieres puedo cambiarlos! Perdóname yo creí que ...

—¡No!—Tomo los libros antes que yo—. Están perfectos. Encerio. Es solo que, me cuesta creer que hayas hecho esto. Por mí.

—¿Cómo no hacerlo pequeña ninja? Feliz cumpleaños—volví a repetir sonriéndole.

—Gracias, Dani. —me dedicó una pequeña sonrisa que me asegure de guardar en mi memoria.

—¿Qué planes tienes?

—ninguna.

—¿¡Cómo que ninguna!? Es tu cumpleaños

AmanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora