Capitulo 66

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Betty disfrutó muchísimo del teatro y también de la noche donde Armando la llevó a cenar a un lujoso restaurante luego de la ópera.
Llegaron bastante tarde al hotel ya que después de cenar, recorrieron el Central Park tomados de la mano.
Al llegar Betty y Armando se fueron a bañar juntos, dónde hicieron el amor con pasión.
Luego salieron de la ducha y Armando tapa a Betty con una toalla para después alzarla y llevarla a la cama donde hicieron el amor tiernamente, sin reservas y entregándose en cuerpo y alma como jamás habían hecho.
Para quedar laxos, luego ambos se quedan dormidos profundamente abrazados y con la alegría de estar con la persona amada.

Un nuevo día comienza a kilómetros de su ciudad, Armando y Betty se despiertan. Aunque primero lo hace ella, se queda un ratico más en la cama mirando a su prometido. Todavía no puede creer que ese hombre maravilloso que duerme plácidamente a su lado, sea su príncipe aquel del cual se enamoró desde el primer día que lo vió.
Todos éstos meses que pasaron a su lado,son los mejores que ha vivido. Pero todavía está llena de inseguridades que no la hacen disfrutar por completo de ese amor que le quema la piel.
Le acaricia la cara mientras piensa en lo afortunada que es al tener a ese hombre a su lado, también recuerda lo que pensaba cuando lo amaba en secreto, en silencio y no pudo dejar de sonreír porque sigue pensando que es un hermoso sueño y que algún día su mamá la llamará para despertarla y todo lo que ha vivido hasta ahora se esfumará como la bruma en la mañana que apenas aparece el sol, se devuelve a su escondite a esperar una nueva oportunidad para salir nuevamente.
Pero también en el fondo sabía que lo que estaba viviendo junto a Armando, era una hermosa realidad. Aunque también estaba llena de miedo, porque no se sentía la mujer adecuada para él aunque siempre se lo decía Armando.
Ella conocía el target de su amado y por eso era que tenía esa inseguridad ya que no se veía a ella igual o similar a ninguna de esas mujeres, aunque Armando le dijera que era mucho mejor que todas las mujeres que estuvieron con él.

Betty mientras pensaba todas éstas cosas, tenía los ojos cerrados no sólo para poder pensar, sino que también su mente la llevaba a esos recuerdos de la antigua Betty.
Por ende no se dió cuenta que Armando se había despertado y la miraba sonriente.
No aguantó más y tomó la mano de Betty con la suya haciendo que ésta saliera de su trance para mirarlo con una sonrisa.
A Armando le pareció la sonrisa más bella que había visto en su vida.

Armando:" Hola mí amor, hace mucho que te despertaste?"
Betty:" No cielo, hace apenas un momentico. Dormiste bien?"
Armando:" A tú lado siempre duermo bien mí amor. En que estabas pensando mí niña hermosa?" Le dice mientras acaricia su rostro.
Betty:" En todo lo que sucedió en éstos pocos meses entre nosotros amor"
Armando:" Y que piensas?"
Betty:" Que pareciera estar en un hermoso sueño y no quisiera despertar jamás"
Armando:" No estás soñando mí amor y si lo fuera, créeme que jamás te despertaría"
Betty se acerca a él para darle un dulce y tierno beso en sus labios, cosa que Armando responde gustoso.
Betty:" Amor se nos va a hacer tarde para la reunión con el CEO de Macy's y no podemos dejar una mala impresión"
Armando:" Ella siempre tan certera y aplicada, entonces para ahorrar tiempo podemos bañarnos junticos, que te parece?" Le dice con una sonrisa pícara.
Betty:" Que eres terrible Armando Mendoza y que siempre haces conmigo lo que quieres, bien vámonos a ducharnos".
Armando:" No siempre y no todo lo que quiero " sonríe.
Se van a la ducha dónde nuevamente hacen el amor, sin prisas y sin pausas hasta llegar casi juntos al clímax.
Una vez que se recuperaron ya que ambos les quedaron las piernas flojas, se cambiaron para ir a su reunión.
Armando se vistió con un traje negro con camisa celeste y corbata gris plata.
Betty se vistió con un traje de pollera con falda a la rodilla color lila con una camisa de color rosa. Por el frío se colocó un saco abrigado para el frío de Nueva York y Armando también.
Éste al verla se quedó embobado ya que ella estaba muy hermosa y no podía creer que ese ángel que Dios le había regalado, era toda suya y él era completamente suyo.

Tomaron un taxi y llegaron al lugar donde fueron recibidos muy amablemente, se presentaron y empezaron a hablar sobre todo lo referente a la empresa, a lo que aspiraban con ese contrato y lo que Ecomoda podía brindarles a sus tiendas.
Los ejecutivos quedaron muy complacidos con todo lo tratado, les dijeron que analizarían en detalle el contrato y a la brevedad les responderían.
Pero estaban seguros que sería afirmativo y tanto Armando como Betty salieron del lugar muy felices ya que era casi un hecho.

Armando:" Amor, tenemos que festejar ya que estoy completamente seguro que firmaremos ese contrato"
Betty:" Opino lo mismo mí vida, pero no podemos festejar antes de tiempo cielo ya que todavía no estamos seguros"
Armando:" Cómo así? No te diste cuenta como asentían mientras hablábamos? Quedaron asombrados por todos los beneficios que obtendremos en ambas empresas y también por la brillante inteligencia de la presidenta de la empresa, que casualmente es mí prometida " le dice abrazándola a ella.
Betty:" Ojalá que así sea ya que es verdad, es muy beneficioso para ambos. También parece ser que será bueno para esa ejecutiva muy bonita que no dejaba de mirarte" le dice celosa, cosa que a Armando le gustó mucho porque subió un poco su ego masculino, además muy pocas veces Betty lo celaba y eso hacía enorgullecerlo.
Armando:" Me parece a mí o estás un poquitico celosa mí vida, porque si es así no tienes que tener ya que soy sólo suyo mí Dra Pinzón. Además yo también noté a ese tipo, ese ejecutivo galán de telenovelas que no dejaba de mirarte. Estaba a punto de romperle la cara por atrevido, que se creía ese tipo"
Betty(sonríe):" Cuál? Ni me fijé ya que sólo tengo ojos para ti mí vida "
Armando:" No me digas que no te diste cuenta de ese tipo que tenía un cierto parecido al actor Jorge Enrique Abello, zafó de darle una paliza porque necesitamos ese contrato "
Betty:" Bueno vamos a almorzar para festejar que hicimos un buen negocio y es muy probable que firmemos el contrato"
Armando:" Si estoy seguro que aceptarán, es un excelente negocio para ellos como para nosotros amor."
Betty:" Así es mí vida, vamos a comer?"
Armando:" Así es, mí amor últimamente estás comiendo mucho"
Betty:" Si tengo mucha hambre, supongo que debe ser los nervios que tenia por la colección"
Armando:" Pero ya pasó, así que tranquila mí vida. Vamos a comer entonces "
Se fueron en taxi hasta un hermoso restaurante de lujo para festejar, decidieron que regresarían al día siguiente a Bogotá y no ese mismo día. Para así poder estar juntos un poquitico más y no tener que escaparse de la perseguidera de don Hermes.
Almorzaron en ese bello restaurante y mientras tanto conversaban de todo, en especial de esa junta que habían estado recién y de como harían para poder llevar a cabo todo. Decidieron que Palm Beach sería lo apropiado para distribuir a Macy's.
Terminaron de comer y fueron a pasear un rato tomados de la mano, recorrieron un shopping y Betty no pudo hacer que Armando no gastara plata en regalos para ella, ya que él quería consentirla porque la amaba pero también porque todavía sentía remordimiento por todo el daño que le causó a ella. Sabía que lo había perdonado pero aunque él también se había perdonado, todavía tenía vestigios sobre eso y muchas veces se preguntaba que había hecho para merecer el amor de ese ángel que tiene como prometida.
Volvieron al hotel donde descansaron un rato y donde siguieron los festejos haciendo el amor apasionadamente.

Continuará

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