˘ᵕ˘ ‧₊˚ El solo tenía antojo
de esos ricos pastelillos
de chocolate, nunca espero
que regresaría a su departamento
con un omega que no
paraba de llorar.
⌮┊Taehyung top
⌮┊Jungkook bottom
⌮┊Drama, angst, omegaverse, fluff, soft
⌮┊Mención de...
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—Debe estar bromeando.
—Siento decir que no es así, los análisis no mienten, su hija está embarazada, alrededor de 6 semanas de gestación.
La señora no espero nada para tomar sus cosas y salir con tanta furia del lugar, una mirada de desagrado se formo en su rostro al divisar a las personas que la observaban, poco le importo dejar a su hija en el lugar y salió hecha furia del estacionamiento.
Eun Ji por el contrario no tuvo mayor remedio que caminar hasta casa, las lágrimas recorrían su rostro y su mente no podía dejar de pensar en que demonios debía de hacer, no contaba con el apoyo de absolutamente nadie, estaba sola, como siempre...
Solo tenia 16 años cuando su martirio había comenzado...
፧ ♡ ፧
Despertó tan temprano que incluso se espantó de si mismo, tenia un par de planes que posiblemente podrían dar buenos resultados, aunque aún había algunos factores que estaban en su contra, como por ejemplo el guardia de la entrada que estaba por llegar, también las incontables cámaras que estaban colocadas por todo los alrededores, y sobre todo, no sabía donde se encontraba.
Tenia todas la de perder, pero aun así lo intento, tomo sus cosas y con todo el sigilo posible salió de la habitación, llego hasta la planta baja en donde se encontró con la infinidad de empleadas que había, se adentro a la concina en donde tomo un poco de agua antes de pensar con más claridad lo que estaba a punto de hacer.
Y no iba a mentir, tenia tanto miedo que sus manos temblaban, había una gran incertidumbre y el era muy pequeño como para manejar la situación.
Se dispuso a dejar todo atrás y rápidamente salió de la casa, eran cerca de las siete de la mañana el siguiente guardia está a punto de llegar, con el tiempo en el que estuvo a pudo notar que la salida quedaba sin resguardarse al menos unos dos minutos, tiempo perfecto para que el pudiera hacer su jugada y escapar por fin del lugar.
