UNA VIDA SIN TI [COMPLETO]

FINAL [ CAPITULO 20]

Estoy despertando, Tony está sentado a un lado, Eduardo parado y su amiga Jenna acaba de entrar, me siento mal, no tengo ánimos y me duele mi cuerpo, mi cabeza no soporta el dolor y cuando menos me doy cuenta de donde estoy, me encuentro en una camilla, confundido de la situación pregunto.

- que pasó - responde Eduardo - te desmayaste cuando el doctor dijo lo que le pasaba a Annie.

poco apoco recuerdo me acomodo en la cama y el dolor de la cabeza es insoportable.

Quiero verla - las miradas de todos se cruza y después son fijas hacia a mi - no creo que sea buena idea - no dejo que terminen de hablar - quiero verla, déjenme verla - poco a poco me levanto de la cama - Harry, no insistas no puedes.

sin importas que me hablen me acerco a la puerta, giro la perilla y veo el movimiento, la gente se mueve de un lado para otro, no sé dónde está Annie, o eso parece, aun no comprendo cuántas horas o minutos mis ojos estuvieron cerrados, solo veo como los padres de Annie, caminan a lado de una camilla donde ella se encuentra, duele saber que sus ojos aún no se abren.

Volteó hacia el cuarto para preguntarle a Eduardo y los demás - a donde la llevan - mis ojos poco a poco se llenan de lágrimas mientras pregunto y mi voz se vuelve frágil.

Eduardo responde - la llevan a un cuarto, al parecer estará ahí, para ver si reacciona.

mis ojos, una lágrima recorre mis mejillas y solo volteó al pasillo, camino un poco rápido tras ella, sus padres con su rostro serio me miran con rencor, pero no me importa sólo decido ir tras ella, no dejarla.

Cada vez estoy más cerca llegó a su lado y tomo su mano, los enfermeros y médicos tratan de apartarme, pero es imposible hacerlo, opongo fuerza y me quedo a su lado.

Camino junto a ella estamos llegando al cuarto y me apartan, la colocan en esa cama grande que han pagado los padres de Annie, estoy a su lado me acerco y no resultó otra vez, tomo su mano y la beso, entre lágrimas mi cabeza cae en ella, mi voz tan frágil presente, los padres de Annie saliendo del cuerpo y los demás me miran con condolencia.

Mi vista no se aparta de ella, solo pienso que está dormida como aquella noche donde me pidió estar con ella, acurrucados y mostrando su sonrisa en todo momento, pero hoy no es el caso, no aparece su sonrisa, ni siquiera ese brillo de noche que provocaba.

Tan solo pronunció un par de palabras si es posible que me pueda escuchar, miro su rostro me limpio las lágrimas y mi voz frágil se presenta una vez más.

- si tan solo supieras que yo daría la vida por ti, moriría para saber que estás bien, solo pido que despiertes, Annie por favor despierta, por favor.

- entre palabras llegan más lágrimas de lo normal, tan solo le ruego y le pido que por favor despierte, aria lo que fuera por ella y dejaría de vivir si es necesario para que ella vuelva.

Me mantengo toda la noche mirándola y llorando le, no siento el cansancio o en una parte sí, pero da igual si estoy con ella, la miro, cada minuto que pasa se siente como un año de no poder verla, a si de vacío me siento ahora al saber que no abre los ojos.

**

Todo ha cambiado desde que no estás, tan solo te miro en aquella cama, tus ojos cerrados y tú sonrisa no está pues de alguna manera duele saber que no reaccionas y tampoco ríes como antes, jamás te cambiaría por alguien más, por qué tú eres mi amor en vida y el verdadero igual.

Estoy sentado frente a ti, poco a poco mi voz frágil desaparece, pero es casi imposible no sentirla así.

- poema de amor, recuerdas este?, Amor sé que no despiertas, pero tal vez me estás escuchando, pero mira el lado bueno es que al fin pude robar el libro que querías y sabes, ahora sí no me equivoque.