Bebé abordo ✩ᴄʜᴀɴʟɪx

━✧✧CAPÍTULO 4✧✧━

Noche

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Chan le había explicado muy brevemente a Felix que los demás habían regresado a la torre. Nunca le dijo que casi se lanza a Minho por tocar al omega en un estado inconsciente.

Había sido exagerado, pero ahora que sabía sobre el embarazo de Felix y que era su bebé, todo parecía tener sentido para Bang.

Aun así, le debía una disculpa a Minho. Él solo quería ayudar.

—¿Se los diremos? — Preguntó ingenuamente el castaño, mirando fijamente las puertas del elevador.

Chan asintió. Tampoco es que pudieran esconderlo.

Bang estaba seguro que su aroma se volvería más intenso y, por ende, los vengadores restantes se darían cuenta.

—Supongo que les alegrará la noticia— Chan sonrió—Tendremos a un pequeño corriendo por la torre.

Felix sonrió divertido. Era cierto, un pequeño que podría ser tan curioso como él o tan calmado como Chan.

Cuando las puertas se abrieron, los ojos preocupados cayeron sobre ellos. Sana, Hyunjin, Changbin y Minho miraron al omega instintivamente.

—Estoy bien— Respondió de inmediato el genio.

Chan a su lado le permitió el paso y les pidió a los chicos que tomaron lugar.

Tendrían una pequeña junta.

—¿Seguro estás bien? —Sana lo escaneo cuidadosamente.

—Lo estoy— Respondió de nuevo Felix.

—Eso es un alivio, hombre de hojalata— Minho rio— De no ser así, no imagino como estaría nuestro amigo Bang.

Chan carraspeo en su lugar sintiendo la mirada del castaño.

Changbin, callado en su lugar, analizaba los gestos de Chan y Felix. Había algo diferente, aunque siendo un beta, no podría decir que con exactitud.

—Bien, tiene que ver con lo que el doctor nos dijo— Empezó Bang.

Felix se quedó callado, y los vengadores conociéndolo como lo conocen, sabían que no era normal. La preocupación empezó de nuevo.

—¿Se va a morir? —Pregunta Hyunjin.

—¿Que mierda? —Chan lo miró exaltado.

—Lee, lenguaje— Regaño Chan— Hyunjin no hables— Ordenó el capitán.

Hyunjin calló de nuevo por un pellizco de Sana.

—¿Felix? — Changbin se dirigió hacia el único omega.

El pecoso suspiró para después murarlos con disimulada calma.

—Estoy embarazado— Y como si la sorpresa del momento no fuera suficiente, Felix agregó con una sonrisa pícara— Y el padre es Bang.

Felix rio ante la cara de todos.

—¿Qué? — Preguntó Changbin.

—¿No se supone que se odiaban? — Hyunjin estaba confundido.

—¡En hora buena, mis queridos amigos! —Minho sonrió grande ante la noticia. Un pequeño ser viene en camino y eso no es otra cosa que un buen presagio.

Minatozaki no dijo nada. Sólo sonrió sabionda.

Chan suspiro avergonzado.

—Espera, espera, tiempo fuera— Hyunjin mira al rubio y al castaño— ¿Están saliendo?

—No/No— Contestaron ambos lideres.

—¿Entonces cómo es que están esperando un hijo? —No pudo evitar cuestionar Changbin.

—Bueno, es una historia bastante graciosa, Binie— Sonrió el genio.

—Lee— Chan lo mira con advertencia.

—Su capitán y yo tuvimos sexo de una noche— Dijo sin pelos en la lengua el castaño— Pero su capitán es tan bueno que me dejó preñado a la primera.

El soldado sentía sus orejas arder. Felix no tenía ni una pizca de sutilidad.

Sana sonrió abiertamente. Que divertida era su familia.

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Chan leía un libro sobre el embarazo de un omega. Sonreía conforme avanzaba.

—Realmente te emociona la idea ¿eh, Bang? —Felix bajo a la sala por un paquete de donas.

Tenía un hambre infernal.

—Te prepare la comida— Dijo Chan guardando el libro y alcanzando al genio—Tienes que cuidar tu alimentación por el bebé.

Felix rodó los ojos, pero no dijo nada. Muchos podían creer que era un hombre irresponsable e indiferente, y lo era, pero ahora las cosas eran muy distintas. No se trataba solamente de el sino de su cachorro.

Siguió mansamente al soldado y se sentó esperando los sagrados alimentos.

Frente a él apareció un gran plato de tocino, ensalada y pure de papa, jugo a un lado y lo que Felix imaginaba era el postre, pequeñas galletas.

Su estómago gruño con fuerza.

—Si necesitas algo, dímelo.

Felix sintió que su cuerpo se estremeció. Era la primera vez que Bang le sonreía de esa manera.

Sinceramente.

Comió en silencio con Chan a su lado. Este había ido por su libro para poder leerlo. No quería incomodar al castaño.

Era la primera vez que estaban juntos y no discutían.

Felix se sintió extraño.

—¿Lee?

En serio, se sentía extraño.

Corriendo, se dirigió a su habitación, específicamente al baño. Cuando llegó al inodoro, empezó a vomitar todo lo ingerido.

—Carajo— Felix sentía su estómago vacío y la boca amarga.

—¿Lee? ¿estás bien? —Escuchó que Chan preguntaba fuera del baño.

El omega se levantó del suelo, se lavó los dientes, de una manera desordenada, y abrió la puerta para decirle a Bang que se fuera. Ya era lo bastante vergonzoso que el alfa escuchará como vomitaba.

Al abrir la puerta, el rubio entró al baño y lo tomó del rostro. Felix perdió el habla en cuanto la mirada preocupada de Chan lo analizó.

Después, con toda la delicadeza del mundo, Bang lo dirigió al fondo del baño, tomó un pedazo de papel y con agua tibia del lavabo, empezó a limpiar el rostro de Felix.

Tenía la cara sudada y sucia. Felix se sentía, por primera vez en un su vida, cohibido.

—Es normal— Bang se encargaba de limpiar con cuidado— De acuerdo a lo que leí, en el tercer mes reducirán las náuseas y el vómito. Hasta entonces, hay que tener cuidado.

Felix estaba hipnotizado por los oscuros ojos de Chan.

—Prepararé cosas más ligeras— Chan volvió a sonreírle— Para ti y el bebé.

Felix reprimió un suspiro.

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～♡～♡ Disculpen si por ahí se me escapo algún error.