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- Debe de haber algo que podamos hacer, es su padre biológico únicamente, Hoseok le ha dedicado toda la vida - hablaba Yoongi desde su oficina en su casa.

Su abogado había comenzado a llevar el caso de Hoseok desde que recibieron aquel documento durante la mudanza, no había parado ni un solo día buscando opciones para que Hoseok y Kook no los separaran.

- Mantenme informado - como dejando el móvil en la bolsa de su pantalón al ponerse de pie para salir de la habitación.

Camino despacio por la casa, pasando de largo frente a la puerta de la habitación que compartía con Hlseok, sabía que no encontraría ahí a su omega.

Abrió lentamente la puerta de la habitación de Kook, viendo al menor recostado y dormido, a un lado de pie a Hlseok, que velaba el sueño del pequeño.

Se acercó despacio, pasando sus manos por la cintura del omega y recargando su mentón en el hombro de este.

- Tengo que decirle, quien es su padre y todo lo que realmente pasó - murmuró Hoseok mientras pasaba sus manos sobre la de Yoon.

- La decisión que tomes yo estaré ahí siendo tu apoyo - afirmó dejándo un beso en la mejilla de él.

- Necesito decirle, si lo mandan declarar, él... - su voz sonaba con temblor, no quería que le quitaran a su pequeño.

- Él dirá que has sido el padre más amoroso y cariñoso que ha podido tener, que desde el primer momento has dado tu vida por él, le has dado comida, un hogar, educación y lo más importante, es amor - afirmó Yoongi sin soltarlo.

- ¿Estarás ahí en la primera audiencia? - Hoseok se giro para poder verlo, pasando sus manos por los hombros del alfa hasta llegar a su nuca.

- Toda la vida a tu lado - Yoongi sonrió dejando ver sus encías, aquella sonrisa que aún seguía derritiendo el corazón de Hoseok.

Desde que se mudaron, bueno, desde que se reencontraron, no había pasado más que intercambio de besos y algunas caricias, pero no habían estado en la cama, no de forma íntima, siempre dormían abrazados, a veces con Kook entre ellos.

- No despertara hasta mañana - aseguró Hoseok empujando a Yoongi para salir de ahí.

El alfa entendió, liberando un poco de hormonas sexuales al llegar al pasillo lo que provocaba que Hoseok comenzará a sentirse húmedo.

Extrañaba tanto esa sensación, sentirse exitado y enamorado.

Llegaron a la habitación, entrando de prisa, besándose como si no hubiera un mañana, la luz tenue en la habitación hacían todo más romántico.

- Espera Yoon, necesito confesarte algo - pidió Hoseok antes de llegar a la cama y sintiendo las manos de Yoongi sobre la piel de su trasero debajo de su ropa interior.

- Dilo amor mio - murmuró deteniéndose enseguida, sin dejar de ver a su omega.

- En este tiempo yo he estado con otros alfas - cerro sus ojos enseguida, esperando la desaprobación de Yoongi, que lo insultara.

Que le dijera que era un fácil por haber estado en la cama de otro.

Pero al contrario de lo que su mente pensó por un instante dejándose guiar por el estereotipo de los alfas, Yoongi comenzó a besar su cuello y sus dedos llegaron a su entrada rozando con suavidad.

- Y ninguno de ellos te hizo sentir lo que yo te hice sentir, esta noche lo recordarás - le menciono con un toque de picarona y coqueteo.

Fue entonces que Hoseok lo recordó, Yoongi nunca fue un alfa que entrará en los estereotipos, Yoongi era el mejor alfa que su omega hubiera podido elegir.

Las prendas de la ropa quedaron a los pies de la cama, mientras Hoseok estaba recostado sobre las mantas suaves, entre sus piernas estaba el rostro de Yoongi, que lo estaba haciendo sentir en las nubes con su lengua en du entrada, esas pequeñas secciones sobre la zona, sintiendo como su lubricacion natural aumentada con cada roce, casi podría correrse en ese momento, pero no queri lucir como un adolescente precoz, por que sabía que Yoongi le podía dar más.

Y fue así, con aquella última embestida, sintiendo como Yoongi comenzaba a anudar en su interior, sus manos acariciando la espalda de Yoongi, mientras se besaban despacio, se sentía en las nubes, satisfecho de haber dejado aquellos malos días atrás, de haberse encontrado con Yoongi, de haber hablado las cosas.

- Te amo - murmuró sobre sus labios.

Yoongi sonrió sin dejar de besarlo, sintiendo su corazón explotar ante aquellas palabras, no es que todas las otras veces no le creyera a Hoseok cuando le decía aquello, es que su omega también lo había aceptado.

Todos sabían que durante el nudo es el punto más sensible para el omega, por después de los celos, ya que la parte humana y licantropa de su ser se unían.

Su alfa interior aullaba de alegría, si tuviera vida propia estaría dando tres vueltas por la habitación moviendo la cola de alegría.

Pero ahí estaba, sonriendo y dejando más besos sobre los labios de Hoseok.

- Te amo mas - le aseguro sintiendo como su nudo comenzaba a disminuir.

Vio el cuello de Hoseok, tuvo la oportunidad de marcarlo, pero no deseaba hacerlo de aquella forma, primero quería que lo hablaran, que fuera especial y sabía que Hoseok deseaba lo mismo, ya que ningún momento este le reprocho, solo se veían como dos enamorados.

Aquella noche durmieron abrazados, con sus hormonas al tope en la habitación.

Era la primera noche que Hoseok dormía realmente tranquilo, sin el pensamiento del juicio por la custodia de Kook, esa noche sólo Yoongi estaba en su mente, su alfa y esa forma deliciosa en la que le hizo el amor, por primera vez después de tantos años, se sentía que había dejado de ser virgen otra vez, nuevamente con la primera persona con la que dejo de serlo hace muchos años.

La foto de papá - Yoonseok Donde viven las historias. Descúbrelo ahora