Oasis Vivo

10. La Ruptura

- J....J.... Jee... eet.... – Susurra Llovizna desde su cuello, aun con la cara baja, no puedo verla, pero puedo ver pequeñas gotas de agua cayendo por sus mejillas.

- T-Todo va a estar bien Llovizna... - Le digo con voz tranquilizadora mientras daba cortos pasos hacia el portal, parándome en medio de Mar y del Shura, en cierto punto respirando profundo a unos milímetros del portal, el cual succiona el aire a mi alrededor, y mueve mis ropas y cabellos hacia su interior. La decisión que voy a tomar en este momento... marcaría mi vida para siempre...

- ¡¡Todo va a estar bien Llovizna!! – Dije con fuerza en el instante que me abalancé sobre el Shura quien sostenía los cuernos de gusano del olvido, yo saqué unos de su bolsa y él no alcanzó a reaccionar cuando con mucha fuerza rompí uno de esos cuernos en su frente liberando el líquido.

- ¿¿P-PERO QUEEEE?? ¡¡AAAHHHH!! – Gritó fuertemente mientras su cara cambia por completo, sus ojos cambiaban por completo, como si instantáneamente se hubiera vuelto alguna clase de Zombie sin voluntad por culpa de los cuernos. Rápidamente cayó al suelo de rodillas mirando hacia el infinito con el líquido del olvido escurriendo en su rostro.

Intenté hacer lo mismo con Mar, pero este fue mucho mas rápido que el Shura, y no logré acertarle con el cuerno, Mar sacó agua de sus tuberías intentando apresarme de nuevo, pero, de tantas veces que lo había visto ya, una que otra cosa había aprendido de sus movimientos. Rápidamente tomé sus manos, entrelazando sus dedos, y traté de en lo posible arrinconarlo contra una pared, tratando siempre de pisar sus pies, como si lo atara con mi propio cuerpo, pude ver que, si no podía mover las manos o los pies, tal vez podría tener un chance.

En medio de nuestro forcejeo pude notar como el portal se cerraba, ya que el Shura no podía controlarlo mas en este estado, solo miraba hacia el vacío, y llegado un punto movía la cabeza despacio sin dirección, como intentando comprender lo que sentía.

- ZEKI, ZEKI MALDICION, ABRE UN PORTAL!! – Gritaba desgarradoramente Mar a su compañero, quien no lo miró, sino que solo giró un poco la cabeza en su dirección.

- P... Po.... Portal... Abrir... portal... - Susurraba espectralmente como si de un zombi se tratara el Shura que aun miraba al espacio vacío, y luego con un movimiento de su brazo a hacia lado se abrió uno de esos portales azules, pero parecía abierto muy torpemente, dentro del portal no se veía nada, solamente el infinito espacio blanco con manchas negras que siempre se veía por dentro, es como si fuera un portal que no apuntara a ningún otro portal, a ninguna dirección, una puerta que no da a ningún lugar.

- Arrggg, Nooo... ¡¡ZEKIIII reaccionaaa!! Portal de vuelta, un portal de vuelta a la base – Le gritaba intentando pelear contra mi peso, yo casi no usaba fuerza, casi no me quedaba, sino que intentaba usar mi peso para atraparlo aún.

- P...Portal... de... de... de vuelta... - Susurraba el hombre con larga cola de caballo aun sin conciencia, de rodillas al suelo, en ese momento movió sus dos brazos abriendo un portal delante suyo y otro detrás.

Ambos portales estaban conectados entre ellos, pues en el interior de un portal podía verse de vuelta clarísimamente mi espalda agarrando a Mar, era la sensación mas rara del mundo, como el tiempo y el espacio se doblaba tan raro que dentro del vórtice podía yo mismo verme a lo lejos. Era como estar en una de esas casas de espejos como si al caminar hacia ese portal me terminara chocando con un clon de mi mismo. Era en todo sentido, un portal de vuelta.