Novela Web de Yo en Tensei Shitara Slime Datta Ken (Finalizada)

Otro Mundo

Antes de la creación, anterior a conceptos como el tiempo y el espacio, sólo existía una voluntad. Una existencia singular y completa con un poder limitado solo por su imaginación. Inevitablemente, esto se aburría, se aburría mucho.

Entonces se le ocurrió la idea de crear otras voluntades para saciar su hastío. Se necesitó trabajo para crear una gran construcción con espacio para que lo ocuparan las voluntades y tiempo para que pudieran experimentar los eventos secuencialmente. Después de hacer las bases para su construcción, la realidad, se dio cuenta de que sabría todo lo que sucedería dentro de él.

Al encontrar insatisfactoria la idea de saber todo lo que sucedería antes de que sucediera, decidió renunciar a su 'Omnipotencia' y 'Omnisciencia' y lo que quedó después fue Veldanava, un ser que seria conocido como el creador.

Veldanava despertó en El Lugar de los Comienzos, también conocido como, Palacio de la Estrella Celestial.

Tenia la apariencia de una adolescente femenina de unos 17 a 18 años, con cabello negro y ojos azules. Su largo cabello está lleno de motas blancas que la hacen parecerse al cielo nocturno.

Comenzó a trabajar para terminar la construcción de la realidad. Tomó el mando de los Diez Grandes Espíritus Santos, poderosas y puras fuerzas elementales sin voluntad, y creó para sí mismo siete sirvientes, que serian conocidos como los Ángeles Primordiales.

Usando el poder de los Grandes Espíritus Santos, Veldanava comenzó a construir muchas multitudes de Universos, con diferentes naturalezas y diferentes leyes. En el centro de todo estaba el Mundo Cardinal, que Veldanava planeaba poblar con espíritus poderosos e inmortales que encarnaran, una raza de hombres piadosos.

Antes de crearlos, creo un mundo que estaria conectado con este, el Mundo celestial, llamado Cielo Azul de los Dioses, seria el reino divino donde habitan seres superiores a los hombres, conocidos como dioses.

Los Tres Lideres que Veldanava eligió para Gobernarlos fueron Nosgalia, el dios que crea el orden y padre de los Dioses.

Militia, que representaba en cierta parte a Veldanava, la creación de cosas y apoyarla en la creación del mundo.

Abernyu, la diosa de la Destrucción, mantiene un balance en el mundo entero, destruye cosas para que otras aparezcan, es responsable de toda la destrucción que existe y existirá en el mundo.

Para facilitar la crianza de la raza de hombres inmortales, Veldanava primero creó a un ser fundador al que llamó Twilight Valentine para que sirviera como modelo y antepasado para ellos. Allí, sin embargo, surgió un problema, Twilight era un ser perfecto que carecía de cualquier concepto de género y era incapaz de la reproducción tradicional. Para resolver esto, Twilight usó su poderoso intelecto y creó dos especies basadas en su propio cuerpo. Los Altos Humanos y los Vampiros. Los Altos Humanos poseían vidas mortales pero largas y una capacidad innata para el conocimiento y la magia... pero sus enormes egos y tendencias autodestructivas los convirtieron en fracasos.

Los vampiros tenían la inmortalidad que buscaba Veldanava, pero su dependencia de la sangre y su intolerancia a la luz del sol los hacía inadecuados para poblar la tierra. Twilight volvió a la mesa de dibujo y finalmente creó a los Humanos y sus muchas sub-especies mas tarde conocidas como semihumanos que, aunque no eran inmortales como deseaba Veldanava, eran suficientes para satisfacer sus deseos y la llenaron de alegría.

Los humanos que crepúsculo creó se repartieron por muchos otros universos para garantizar la variedad en las culturas que desarrollaron, Veldanava por otro lado empezaba a mostrar sentimientos de soledad.

Al principio no le dio mucha importancia, pero habiendo llegado hasta este punto, se dio cuenta que necesitaba a alguien a su lado.

Viajo por uno de los Multiversos que habia creado en busca de un alma humana de su agrado, pasaron los millones de años en ese universo hasta que porfin la encontró, tomo el alma de la persona que habia elegido y fallecido en ese mundo y la llevo hasta el mundo cardinal.