Corazón frío | Spreen

I

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❝ ᴍɪᴇᴅᴏ. ❞

Sus piernas no resistían más, habia caminado todo el desierto, pero aun así no paraba. Su pecho subía y bajaba del aire que tomaba, su miedo era quien controlaba el cuerpo.
Sus recuerdos estaban hecho trizas, no recordaba como llegó a ese lugar y mucho menos que esta en un lugar donde su vida corre riesgo.

Una gran alarma suena por todo el mundo, era tan fuerte que Spreen cayó de rodillas cubriéndose los oídos, el ruido era capaz de romper tus tímpanos en segundos.
Sus ojos se cerraron por intento, su cuerpo temblaba del miedo.
Su respiración era más agitada de lo inusual.

——Bienvenido jugadores.

Spreen miro al cielo, una voz de una mujer destaca y hace eco en el mundo.

——Muchos de ustedes ya se despertaron, me alegro mucho que todos se encuentren bien. Quería repasar las reglas... Están aquí para sobrevivir, todos poseen tres vidas, cada vez que mueras reviviras en el centro de todo, donde estas libre de peligro —— Spreen se congelo, al escucharla la palabra morir y revivir hizo que su piel de erizada, ¿acaso era posible? —— Cuando tus tres vidas se acaben, lamento decirles que ya no podrán volver, morirán permanentemente. —— Spreen trago en seco, ni siquiera se levantó del suelo, el miedo lo impedía. —— Podran formar grupos para no estar solos y caer en la locura, lo máximo será hasta cinco personas, ni más ni menos. Cuando escuchen la alarma prepárense para correr, porque en ese tiempo ustedes podrán matarse, y para su mala suerte, hay muchs gente que adora matar... ——

Esto debía ser una broma pesada, Spreen buscaba las cámaras ocultas mientras una sonrisa nerviosa aparecía en su rostro. No pudo resistir más, aún con una sonrisa en su rostro las lagrimas empezaron a caer, golpeó el suelo y soltó un grito frustrado.

——Mierda, esto es una mierds ¡La puta que me parió! —— Golpeó el suelo con más intensidad hasta lastimarse los nudillos.

Lamentablemente Spreen no pudo seguir ya que una fuerte alarma sonó en los cielos, cubrió sus oídos rápido, el miedo invadió de nuevo su cuerpo, eso significaba que la cazeria empezó.
Se levantó y sin más empezó a correr aún con la alarma en el cielo, si eso significaba que la gente iba a morir no podía confiar en nadie, ni siquiera en su propia sombra.

Spreen no paraba de correr, incluso la noche cayó y a Spreen eso no le gustaba.
Cubrió su boca y se escondió detrás del árbol, el sonido de unos huesos moviéndose lo hizo espantarce, no sólo había jugadores asesinos, sino que también monstruos.
Tomo aire y volvió a correr alertando al esqueleto, quien no dudo en dispararle con sus flechas. Spreen lo esquivo por centímetros pero aun así no paro de correr.