CAPITULO CATORCE

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Isla Thaber


Camine hasta la sala. Esthela ya se había marchado, bostece y fui a la cocina, me encontré con una nota pegada a la barra

En el refri hay mucha comida, volveré temprano para llevarte a la tienda esa de telas. No hagas un desastre ¿De acuerdo? Si se incendia la casa, asegúrate de que Brittney muera primero (Es broma, no quiero tener que lidiar con cargos penales) cuídate niña

Esthela:).

Fui directo al refri, y. Wow no mintió cuando dijo que había mucha comida, ninguna estaba malgastada o vencida. Todo estaba perfectamente bueno

Mi estómago gruño de hambre, hice una mueca y cerré el refri

Me dirigí a mi habitación temporal, saque las cosas de mi bolso, las ordene perfectamente y saque una ropa sencilla. Ni siquiera quise verme en el espejo como todas las mañanas, me vestí de manera rápida y me tumbe sobre la cama

Sin teléfono, con posible internet, y sin algo con que entretenerme de repente recordé algo. Brittney, ¿Ella solo tenía guardia en la noche o de día? Salí de la cama y me puse mi sueter

Me acerque al balcón para apreciar un poco la vista era de día pero, el cielo estaba oscuro, el ambiente era muy frio, las calles no estaban desoladas aunque pasaban pocas personas a diferencia que en la noche

Ahora con un poco más de claridad; Habían arboles de pino al frente, a lo lejos podías apreciar una gran montaña nublada, todo era muy tranquilo y pacífico, casi sentí que podía sentirme relajada y algo más calmada. Tome una manzana de la mesa y salí del apartamento, muchas personas subían, bajaban, caminaban por los pasillos

Fruncí los labios, nerviosa, y baje a la recepción. Justo en ese momento Brittney entro por esa puerta con una mini falda de jean, una camisa blanca que se ajustaba a su cuerpo y el pelo suelto por los lados. Estaba guardando las llaves cuando me vio

-Ay, hola -Su voz continuaba siendo chillona, aunque estaba un poco más calmada esta vez. Me acerque cuando dejo su en el escritorio y, se sentó - ¿Tu eres la amiguita de Esthela no?

Ladee la cabeza mientras, recargaba mis brazos en la parte más alta de la cerámica

-Soy... su prima en realidad -Confesé llevándome la manzana a la boca

-Aww, pero que lindura. Deberías venir más seguido -Empezó a sacar sus cosas, me miro -¿Quieres un café? Hay una maquina aquí atrás.

-Tranquila, estoy bien así -Relamí mis labios esta vez teniendo una actitud, un poco más positiva -¿Cuántos años tienes?

-Acabo de cumplir 19. Dime, que se siente tener una prima tan amargada -Había alargado la palabra pero estaba, consiente que, lo hacía con humor

-No es amargada... -Me miro fijamente a los ojos -Bueno si lo es, pero así hacido la mayoría del tiempo, pero se le quiere, creo -Reí -Es broma, la quiero mucho

-Qué lindo, yo no tengo primos. Pero si tengo un pequeño perrito, se llama Chuck

-Yo siempre quise una perrita

-Oh no, Chuck es una perrita. -Dijo de manera alegre

Vale. La tía es brutisim...

No lo digas, estuve un rato hablando con Brittney. Me conto que era nueva en este trabajo, pero la mayoría del tiempo estaba aburrida o algo sola. Dice que una vez a la semana Esthela bajaba y comía con ella, pero que siempre la mandaba a callar porque no quiere escuchar sus chillidos

¿Y Si Todo Fuera Un Sueño? (Parte I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora