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Luego de esa fatídica noche, Gulf estuvo intentando pensar durante las horas del siguiente día, ¿qué había sido tan grave para que Mew hubiera sido tan irracional?.

Durante el desayuno, el ama de llaves le había comentado que probablemente Janis le habría comunicado algo sobre el bebé, lo cual lo había puesto así de alterado.

A parte de eso, el omega estaba muy nervioso pues no sabía si tomarse el supresor a destiempo habría funcionado, por lo que para asegurarse, se tomó otros dos más.

Tras darle vueltas y más vueltas, finalmente decidió que le preguntaría a Mew en cuanto lo viera, a pesar de que sabía que se enfadaría y probablemente lo llenaría de moratones pero la curiosidad era más grande.

Sin embargo, el alfa no lo llamó en todo el día y en la noche no acudió a dormir y a pesar de que este preguntó a todos, nadie supo que decirle.

Sin embargo esa no fue la única pues durante tres días y noches más, Mew no apareció por la casona, ni requirió los servicios de Gulf por lo que este empezó a sospechar que quizás ya el alfa se había cansado de él.

Tan solo Sam sabía los motivos reales de la desaparición de Mew pero no podía decirlo pues el alfa le había hecho jurar que no lo diría o su madre y él se quedarían sin trabajo.

El misterio se reducía a que Mew se había encontrado con Janis y esta le había dicho que tenía un alfa y que en una semana se irían a Corea del Sur para quedarse definitivamente.

Eso había enfurecido a este pues a pesar de que las había visto en contadas ocasiones, tras abandonarle, al menos sabía que estaban cerca pero si se iban a otro continente, jamás volvería a verlas.

A pesar de pasarse días y noches discutiendo por esa decisión, Janis no cedió e incluso el empresario alfa se había liado a golpes con el nuevo alfa de esta, pasando unas horas en el calabozo de la comisaría.

Finalmente Mew comiéndose su orgullo, había optado por suplicarle a su esposa que no se fuera pero no sirvió de nada pues tenía la custodia y nada le retenía ya en Bangkok.

Una semana más pasó y una tarde en la que Mew estaba en su despacho, de repente su secretario le informó de que tenía una llamada de su casa.

El alfa extrañado frunció el ceño pues era inusual que ocurriese eso pero aún así le ordenó que le pasase la llamada.

...-Necesito hablarte de algo - se escuchó la voz de Gulf por el auricular.

-¿Por qué me llamas?, ¿acaso no puedes esperar a la noche?.

-¡No!...¡esto es importante!-gritó el omega molesto pues llevaba varios días ya intentando que lo escuchara pero sin éxito alguno.

El alfa resopló molesto.

-Estoy muy ocupado omega y no tengo tiempo para esto.... Espera que llegue a casa y me lo cuentas.

Gulf soltó entonces un grito de importancia.

-¡AAAAAHHHHH...¡Eres un maldito estúpido!

-¿Cómo te atreves a insultar m...

-¡Escuchame ahora!-volvió a gritar Gulf desesperado-...¡Cuando llegas aquí solo me follas bruscamente y luego te vas!, ¡En la mañana desapareces de aquí huyendo, ¿Cómo mierda pretendes que te diga algo?.

El alfa suspiró resignado.

-Está bien ¿qué es lo que pasa?

El omega suspiró profundamente, luego tragó fuerte y se secó las lágrimas.

-E-Estoy e-embarazado

Nada se escuchó al otro lado del auricular, por lo que Gulf no sabía si el alfa continuaba escuchando o no.

30. Luces y sombras -MewGulf-Omegaverse-TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora