𝙇𝙊𝙑𝙀 𝘼𝙉𝘿 𝘿𝙍𝙐𝙂𝙎 [Niragi]

I

Mí corazón latía a mil. Los nervios se apoderaban cada vez más de mí,al saber que no puedo cometer ni un solo error en este trabajó. Todo tiene que salir a la perfección.

Cerré mis ojos con fuerza unos cinco segundos para luego abrirlos encontrándome con la mirada de aquel pelí negro sobre mí. Lo que más me llama la atención de el,es que es muy reservado y tiene un aspecto frío.

Entre susurros de los demás chicos,logré escuchar que está intentando algo con una chica. la cual conoce desde toda su vida. En pocas palabras,se conocen desde guardería.

Siento que eso es mala idea.

¿Porqué arruinar una relación bastante linda para intentar ser más que amigos?

Es algo que nunca entendí y nunca entenderé.

Solo se que eso siempre acaba mal. sea temprano o tarde. Pero nada bueno sale de eso. Solo muy pocas personas lograron que esa relación acabe bien.

Ken,el castaño de ellos. Es un chico súper chistoso,amable y buena onda. Nada parecido a sus demás compañeros de grupo. Sobresalta en todo aspecto de ellos. Es con el único que eh logrado cruzar unas palabras desde mí primer día.

Bueno,ayer comencé a trabajar aquí.

Clerk,el chico rubio. Tiene un aspecto demasiado frío y reservado,al igual que el peli negro. Su sonrisa es lo que mas me gusta de el,ya que es bastante bonita. Su carisma es ser coqueto con todas las que ve en este lugar. Logró hasta que algunas chicas le dieran su número. Que, unos minutos después terminaba tirando el papel en el cesto. Ya que según el no le interesa conocer a nadie que viene aquí.

Reik,el castaño. Es demasiado serio y reservado. Desde que trabajo aquí no lo eh escuchado decir cosas con sus demás amigos. Se queda callado mientras observaba su teléfono o escucha atento a sus amigos. De vez en cuando me echa una que otra ojeada y cuando nota que lo miro,me guiña el ojo mientras me sonríe. Es demasiado coqueto al igual que su amigo Clerk.

Y por último estoy yo. Kato Hana. La pelinegra,o más bien un negro azulado. La más tímida y amable a comparación de mis compañeros. Trato de esforzarme en que todo me salga bien y de no cometer ningún error en este trabajó. Soy demasiado exigente conmigo misma en todo. Estudios,trabajo,notas,cabello en todo.

Con el único que logré hablar es con Ken,ya que el fue como mí tutor para que pudiera entender un poco sobre este trabajo y no estar como estúpida mirando a los chicos sin hacer nada para descifrar que debo hacer. Gracias a el,pude hacer todo bien.

El puesto que yo tenía era de cobrar la entrada y repartir las pulseras para que puedan ingresar a la fiesta. Nadie puede hacerlo si no tiene la pulsera.

Una de las reglas del lugar: "Nadie ingresa sin la pulsera"

Según el dueño del lugar,es mejor ya que nadie entra colado o el lugar no se llena tanto. Ya que tiene un máximo de personas,unas 1050 para ser exactos.

Acomodé la falda de mí vestido para luego reincorporarme y atender al pequeño grupo de chicas. Que por alguna razón,me miraron mal y no se el porque,pero eso es algo de lo cual me tendré que acostumbrar según Robert.

Se me olvidó.

Rokujo Robert. El dueño del lugar y fundador de otros dos boliches ilegales. Es un señor bastante carismático y amable. A pesar de tener cincuenta años está bastante bien cuidado. Yo cuando lo vi,no pude creer que tenía esa edad ya que parece más joven.