SETH

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SETH

Viernes, 7:00 am

La alarma sonó, los rayos de sol se colaban por las cortinas y escuchaba las aves cantar, me cambié la pijama por un conjunto deportivo para salir a trotar 2 horas como de costumbre, las calles de Bel-Air eran tranquilas y pacíficas así que solo puse mis audífonos en mis oídos empezando a trotar pensando en Lisa, la quejumbrosa con la cual había hecho un trato de solo estar con ella y viceversa. Yo no era fan de tener relaciones duraderas o oficiales y eso no cambiaría con ella, muchas personas pasaron por mi viday cama a lo largo de mis 21 años, pero todas han sido en vano, han dicho y hecho cosas solo para poderme enredar en sus brazos para siempre pero eso nunca funcionaba, mi padre me enseñó que ninguna estaría conmigo para siempre, tal vez unos años sí, pero cuando se cansara de mi se alejaría y adivinen qué? Eso pasó, asi que no volveré a cometer el mismo error dos veces seguidas.

Al terminar con los entrenamientos regrese a casa por mi mochila y me dirigí a entrenar, me gustaba mantener mi cuerpo en forma, me gustaba resaltar no solo por mi atractivo, sino también por mi cuerpo.

El sonido de las maquinas escuchandose por todo el espacio vacío, la pesadez que empezaba a sentir conforme los minutos pasaban y yo seguía levantando una y otra vez las piernas, mentiría al decir que no pensaba en el momento en que Lisa casi besa a ese tipo como motivación de mis entrenamientos al igual que imagino a ese imbecil en vez de el costal de box que uso. Aunque también no me agrada la idea de golpearlo ya que me ensuciaría de sangre mi ropa que vale más que su intrascendente e insignificante vida, asi que lo dejaré por la paz y solo lo mantendré en mi imaginación.

El sonido de mi teléfono me desconcentra, ha estado sonando de tal manera que pareciera que alguien está muriendo y yo fuera el doctor encargado. El ruido comienza a fastidiarme asi que opto por responder, de mala gana, claro.

-Quien sea que seas, más te vale que sea importante y no una pendejada, asi que habla- espero respuestas del otro lado hasta que responden.

-Te recomendaría bajar tu tono de voz conmigo, Seth- una voz varoníl- te necesito en el punto de siempre, a las 3:00 de la mañana, puntual- Cuelga.

No se quien mierda se cree para decirme que hacer, pendejo.

Olvido la situación para posteriormente regresar a casa a darme un baño con agua fría y ponerme un traje para salir. Tengo una cita de negocios con mi padre y algunos jefes de la corporación debido a que él me quiere implementar en su zona para producir más riquezas, la cita es en un restaurant prestigioso, tiene el mejor servicio al igual que un menú que no deja nada que desear, normalmente las reuniones son aquí porque es un lugar tranquilo y aunque es muy bien conocido no es tan regular encontrar comensales.

El Lamborghini Huracán me espera en el estacionamiento de mi propiedad, me monto en el auto al tiempo que prendo la radio poniendo algo de música. Lis me había recomendado un cantante asi que decido escuchar una de sus canciones.

The weeknd con una canción llamada Reminder suena en mi alrededor, el resto del camino sigue sonando una playlist con sus canciones y admito que tiene buenos gustos, no son tan malos como creía. Al pasar de los minutos llego al lugar de la cita, al parecer ya todos estan dentro y solo faltaba yo.

-Hasta que llega el hijo prodigio- empieza a reprenderme uno de ellos- pensamos que el maravilloso hijo de Anton faltaría a nuestra reunion.

-Pues podrás deducir que no, aquí estoy.

-Ya, Seth, toma asiento para poder empezar- mi padre me señala la silla a su lado.

-Entonces, Anton, tendremos más producción esta semana?- empieza Rodolf, uno de los viejos de la empresa quien administra nuestros empleados al igual que su rendimiento.

DULCE RENCORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora