Lunes, 6:00 am
Desperté con Seth al lado abrazándome, admito que aunque esté dormido se veía atractivo. Me levanté de la cama para ir al baño y lavarme la cara, luego bajé a la cocina para darle de comer a galleta y ver que comida había en el almacén para hacer el desayuno para ambos antes de irnos a clases.
Debido a que estábamos solos decidí solamente dormir con un short rosa y un top negro bastante cómodo para dormir. El almacén era bastante grande, era al tamaño de un closet y cabía perfectamente, estaba dentro de él buscando pimienta en polvo para hacer el almuerzo.
Escuché que Seth bajaba las escaleras y cuando menos lo pensé ya estaba detrás de mí.
-Normalmente te ves bien, pero aquí conmigo te ves tan sexi, despertar conmigo te sienta bien- me tomó por atrás de la cintura pegándome a él.
-¿Tu crees?- pose mis manos sobre las de él.
-Definitivamente- empieza a besar mi cuello- ayer te salvaste, pero hoy no vamos a ir a clases sin que te folle primero.
-Necesitamos almorzar primero- mis manos seguían sobre las suyas.
-Créeme que con esto se te irá el hambre...
Me jalo hacia atrás con él llevándome hacia la mesa que tenía en medio de la cocina subiéndome arriba de ella.
Me tomó del cuello con una mano y la otra la enredo en mi cintura pegándome más a él.
-Mi sexi adoración- susurró en mi oído.
-Mi chico arrogante- solté un pequeño jadeo cuando sentí su miembro rozando mi intimidad.
Metió su mano en mis shorts sacándolos y dejandome en ropa interior.
-Solo lo haremos a un lado, de acuerdo?- me besó el hombro.
-Si...
Sus dedos estaban fríos, al contacto con mi piel caliente sentí un escalofrío, mi sexo empezó a humedecer ante su tacto y imaginar lo que haríamos a continuación. Se movían al rededor de mi entrada jugando con mi humedad y presionando de vez en cuando mi clítoris.
-Si me vas a penetrar hazlo de una vez, Seth- jadee.
-No, quiero jugar primero- sonrió malicioso.
-No tenemos tiempo para jugar ahora- me quejé.
-Claro que sí- estaba sentada en la mesa cuando vi que Seth se empezó a agachar hasta quedar arrodillado frente a mi sexo.
Su respiración estaba tan cerca de mi zona que con cada respiración que soltaba chocaba, provocando pequeños espasmos en mí. Poco a poco se acercó jugando con mi clítoris, mordisqueando un poco y lamiendo, su lengua empezó a acercarse a mi entrada jugando con su lengua para luego introducir dos dedos. Mis gemidos ya empezaban a salir por el placer, me estaba martirizando ya que solo dejó los dedos quietos sin hacer ningún movimiento y yo necesitaba que empezara a moverse o me iba a dar algo.
-¿Qué quieres, Lisa?- su voz estaba ronca y eso me calentaba.
-Muévete.
-Dime que quieres y lo haré- sus labios repartían besos por mis piernas y una que otra mordida.
-Mueve tus dedos.
-¿En dónde? no entiendo.
-Mueve tus dedos dentro de mí, dame placer Seth, o solo cojeme, pero necesito tenerte dentro de mí- supliqué impaciente.
-A la orden, mi adoración
Empezó a meter y sacar sus dedos empapados de mis fluidos, se deslizaban tan fácilmente que eran movimientos rápidos que me daban tanto placer que en ese punto ya estaba gritando y suplicando.
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DULCE RENCOR
Mystery / ThrillerOscuridad y luz, una brecha diminuta entre dos mundos colapsando. Una oscuridad tan profunda como el mar mismo dispuesta a morir por el brillo y la paz; una luz a la cual la oscuridad la consume con cada suspiro que da, ambos luchan por un poco del...