¡La portada no es mía!
•Esta historia relata una vida entre Rubius y Vegetta dos adolescentes que están totalmente enamorados, un día del año 2000 Rubius regresa muy raro,buscando de manera desesperada y al no encontrarlo no tuvo otra opción...
-Sol...
Se hizo muy amigo de Conter, aunque era una regla no muy situada.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Diciembre 12 del 2009.
Un Spreen de nueve años iba saliendo de la academia, cuando llego a la salida vio como niños, jóvenes y hasta adolescentes se juntaban con sus familiares para reencontrarse
Espero durante unos minutos, sus padres llegaron, pero no los vio estaba muy concentrado viendo a la hierba.
- ¡Ivan!.- Llamó su padre.
El mencionado alzó la cabeza y los vio, se levanto y se dirigió a ellos.
- Buenas tardes ma y pa.- Saludo Spreen.
Fue directamente a su madre pero vio algo raro. Un pequeño niño azabache, ropa morada con un abrigo color azul marino.
- ¿Quien es él?.- Preguntó con un poco de curiosidad.
- Oh, él es tu hermanito.- Respondió Vegetta.
Spreen se quedo con cara de no saber nada.
- Lo hubieras sabido, pero cierto niño dijo que no lo visitarán.- Se quejó Vegetta.
- Perdón.- Se disculpo Spreen.
- Te dejamos un año en este lugar y ya eres muy diferente.- Reclamó Rubius.
- ¿Bueno?, ¿Dónde está Quackity? Lo extraño.- Spreen vio el piso.
- Dijo que vendría, esta ocupado.- Respondió Rubius.- Y... ¿Desde cuando a ti te importa tanto el pato?.
- Desde que me dio dinero para unos cromos de rayo Mcqueen.- Respondió Spreen con una gran sonrisa en la cara.- Y bueno ¿Como se supone que se llama mi hermano?¿Qué edad tiene?.
- Bueno, yo no le puse el nombre, se lo puso tú papá, lo digo no mas porque no me convence del todo.- Recalcó Vegetta.
- PERO MISSA ES UN BUEN NOMBRE.- Regaño Rubius.
- ¿Missa?.- Preguntó Spreen.- Es un buen nombre.- Dijo animado.
- ¿Ves? Al niño si le gusta.- Presumió Rubius.
- Tenían que ser osos...- Murmuró Vegetta.
- ¿Disculpa?....- Y antes de que pudiera comenzar a pelear una voz llamo su atención.
- ¡YA ES HORA DE VOLVER!.- Sonó una voz por unos altavoces.
- Bueno, ya me tengo que ir. Saluden a Quackity de mi parte por favor.- Se despidió Spreen para ya irse.
- Espera.- Dijo Rubius.- Te trajimos algunas cosas.
Rubius se acerca a su hijo y le da una maleta de viaje.
- Quackity puso algunas cosas, también hay ropa.- Y para finalizar Rubius besó la frente del pequeño.
- Gracias.- Sonrió.
- ¡ESPERA!.- La voz de cierto híbrido llamó.- Perdón por llegar ahora, tengo unas cosas que hacer.
Le dio una bolsa blanca de tela.
- Te servirá.- Quackity le guiño el ojo al pequeño.
- Esta bien, si tu lo dices.- Contestó Spreen.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
- ¿Qué es eso?.- Preguntó el híbrido de conejo con curiosidad.
- Mis padres me lo dieron.- Sonrió.
- ¿Puedo acompañarte? Es que me ganó la curiosidad.- susurro lo último.
- Está bien.
Y así Spreen abrió el cierre de la maleta de viaje.
Vio ropa, cajas y snacks. Lo primero que agarro fue una caja blanca rectangular con una nota que decía: " Supongo que ahora pasas ocupado intentando mejorar pero esto es para que te diviertas, no lo dañes, me costo mucho comprarlo y configurarlo".
Abrió la caja con intriga y vio un celular, sabía que era, había visto a algunos estudiantes con uno de estos. Era pequeño y con un forro de color negro, supuso que era para proteger al celular.
- Oh... ¿Tus padres son ricos o algo por el estilo?.- Preguntó su amigo.
- No, hasta donde me acuerdo no.- Prendió el aparato y vio que tenía la hora la cual marcaba 17:00 pm, deslizó la pantalla (porque el celular dio la orden) y vio que habían pequeños cuadros con nombres y antes de poder seguir escucho que los altavoces daban la orden de bajar al gran comedor par así cenar.
Apago el aparato y lo dejo en su cajón.
Bajo junto a Conter, se encontró con sus otros amigos, Crisgreen y Shadoune.
Se sentaron en una de las mesas a esperar a que les sirvieran la comida, debido a que no podían escoger, era para mantener bien alimentados a los estudiantes.
Se acerco una mesera o mejor dicho la encargada de esta área.
- Hola ¿Como están?.- Preguntó amablemente.
- ¡Estamos bien!.- Contestaron al unísono.
- Bueno, les traje su comida, la hice yo así que espero que les guste.- Sonrió.
- ¡Muchas gracias señorita July!.- Agradeció Shadoune con interferencia debido a que estaba aprendiendo español y resaltaba mucho la g.
- Haz mejorado con tu español, eres muy bueno.- July le dio una caricia en la cabeza al pequeño.- Cuando terminen sus sopa habrá postre. Adiós.- Se despidió para después irse y servir más comida a los estudiantes.
Sin más comenzaron a comer sus sopas de champiñón, la disfrutaron de ella, sabía bien. Sin embargo, Spreen por más deliciosa que este la sopa no pudo disfrutarla.
- ¿Pasa algo Spreen?.- Preguntó Crisgreen notando la cara extraña que tenía su amigo.
- No es nada, solo que tengo un hermano y mi mamá nunca me dijo su edad.- Mintió, pero no del todo porque su madre nunca se lo dijo.
Y siguió comiendo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.