El precio de la libertad. (Kuroshitsuji)

Parte 2: La Reina (editado).

N/A: antes de leer pido perdón por no subirlo cuando correspondía, como todos los personajes son respectivo a su autor lo mio es solo la trama.

- dialogo entre personajes-

———-Sueños———

-"pensamientos"-

ahora todo aclarado vamos a lo que nos interesa besos y abrazos.

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No quería quedar sola, era enorme aquella habitación y por más que fuera cómoda simplemente quería estar en la compañía de él, quería olvidarse de la incómoda presentación y la mirada atenta de ese joven albino, unos suaves golpes lograron sacarla de los pensamiento y ante el reconocimiento de la presencia se acerco con pasos apresurados abriendo de golpe la puerta.

-Estoy lista Ash.-
Eran minutos que trascurrió luego de abrirle terminando por romper el silencio formado, ya estaba vestida de sirviente siendo este a medida resaltando las curvas del cuerpo algo que no paso por desapercibido por parte de él

-Vamos tengo que enseñarte el lugar que te corresponderá.-
Dio la espalda empezando a caminar seguido por ella, si bien no se imaginaba terminar en un lugar como ese rodeado de humanos tampoco parecía molestarle, o eso intentaba demostrar.

Hace más de una hora que se presento a la reina, la voz le temblaba al igual que las manos llenando el lugar de rumores... FLASHBACK...

-Jade...- no tuvo más remedio que inclinarse como signo de respeto ante la presencia de la realeza respondiendo la pregunta que ella misma le había dicho sin la necesidad de que Ash hablara, si, por fin se había enterado el nombre del joven que le "salvo" –Es mi único nombre su majestad.- era escudriñada por todos los presentes, algunas se atrevían a mirar al albino y luego a la joven tratando de encontrar algún parentesco o alguna relación, pero nada más salió de los labios de la chica, nada que lograra satisfacer esa necesidad de la curiosidad.

La reina simplemente quedo callada y por más que sintiera la vergüenza no dudo en observarla mejor, aspecto frágil, piel en tonos grises, ojos azulados claros y cabello largo ondulado un poco más en tono grisáceo que la miraba de una forma que no le permitía hablar, no podía descifrar el porqué de ese silencio pero entendía, o eso quería hacer, ya que en si era extraño que al que consideras como guardaespaldas y mayordomo presentara a una jovencita como una criada más... FIN DEL FASHBACK...

- ¿Realmente me ha aceptado?-
Pregunto en un tono bajo que aduras penas los oídos humanos podía escuchar pero para él era diferente, sin contar que estaba atento a los cambios repentinos que ella tenía sonriendo tratando de tranquilizarla algo que parecía funcionar

- Lo ha hecho y si fuera lo contrario me hubiera tomado el atrevimiento de convencer de que lo hiciera.
-Gracias en todo caso.-

¿Felicidad era lo que realmente sentía?, era cálido el sentimiento que empezaba sentir y con ello el formar de una sonrisa algo tímida sobre los labios y una mirada más viva que simplemente a él le revolvía el interior contagiándose por aquella sensación que la misma joven desprendida.