—¿De que va, Jihyo?
—Por la luna, Alfa. Son las 6 de la mañana y llevas todo el fin de semana hablándonos de esto, cállate. —pide Daniel mientras rueda los ojos.
Lisa bufa, cruzándose de brazos y recostando la espalda contra el respaldo de su asiento en la cafetería. La luz del sol era anaranjada, filtrándose por los ventanales del local y haciendo que la piel de Lisa se viera angelical.
Mientras Lisa refunfuñaba desde su lugar en la cafetería, con una de sus barritas de chocolate favoritas entre sus manos, Daniel y Jihyo se encontraban tras la barra, dando los últimos retoques antes de que sea la hora de apertura.
—¡Me llevó hasta mi casa! —exclama como si fuera la mayor locura en el mundo— ¡Mientras estaba borracha!
Daniel puso los ojos en blanco sin detener su trabajo.
—¿Y que esperabas? La chica es más dulce que la leche condensada. —Lisa rueda los ojos para seguidamente dar un mordisco a su barrita de chocolate blanco.
—Esto es vuestra jodida culpa por poner tanto alcohol en la cena. —dice después de masticar y con el ceño fruncido.
—¡No sé de que hablas! —dice Jihyo a la defensiva, soltando el trapo con el que limpiaba y levantando las manos en alto— Yo no hice nada.
Daniel en cambio pone los ojos en blanco por quinta vez en lo que lleva de mañana, seguidamente sale de detrás de la barra para bajar las sillas de encima de las mesas y colocarlas para cuando los clientes entraran.
—Jennie está a punto de llegar Lisa, sal corriendo antes de que llegue. —bromea el omega, mientras bajaba las últimas sillas.
A Lisa sin embargo, le parece una buena idea. Lo último que quería era toparse una vez más con aquella chica con aspecto de Bambi.
Lisa simplemente era una loba solitaria. Amaba a sus amigos y familia, pero la gente nueva siempre se le hacía difícil de procesar. Y es que al vivir en una pequeña isla en la que todos se conocen entre todos, la gente nueva no suele ser habitual.
Y hace tiempo llegó ella.
Haciendo que el corazón de Lisa latiese y cometiera el error de confiar en una humana sin pensar en las consecuencias. Y cuando ella se fue, Lisa construyó paredes de hielo alrededor de su corazón, negándose a dejar que nadie entrara en ella de nuevo.
—Nos vemos a la hora de comer, os amo. —se despide mientras se abrocha su chaqueta negra y abre la puerta para salir del local.
Sin embargo, no tarda en encontrarse a la castaña por el camino. Y lo que era peor, su perro, Love, caminaba alegremente a su lado.
—¿Pero que mierda? —pregunta mirándolos con el ceño fruncido.
—Buenos días, Lisa ¿Cómo te encuentras hoy? ¿Aún sigues con resaca? —se burla la más baja cuando llega frente a ella.
—No me jodas, ratona ¿Ya has secuestrado a mi perro también? —Lisa ignora la pregunta mientras Love se sienta en la nieve, entre ambas, mirándolas con la lengua fuera.
Love simplemente parecía estar feliz todo el tiempo.
—Creo que le gusto. —Jennie sonríe, sus encías se llegaban a apreciar en su sonrisa y eso no debería ser algo que Lisa encontrara atractivo.
—Voy a ponerte una orden de alejamiento. —se limita a rodar los ojos al ver como Jennie se inclinaba para acariciar la cabeza de Love.
—No es mi culpa que tú perro opine que soy mejor que tú. Esta mañana me lo he topado en el porche de mi casa, creo que me estaba esperando. —Jennie sonríe, mirando al perro sentado a su lado.
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Heart Cold As Ice Blue - (Jenlisa G!P) (Adaptación)
Fanfic❝En un mundo donde la raza humana desconoce de la existencia de los alfas y los omegas, Jennie se muda a una remota isla helada. Sin saber que lo más frío que habitaba aquel lugar, era el corazón congelado de Lalisa Manoban.❞ ➳ Jenlisa ➳ Jennie bott...