❝一方通行❞
▭𝓔𝓼𝓽𝓪 𝓼𝓮𝓻á 𝓼𝓲𝓮𝓶𝓹𝓻𝓮 𝓼𝓾 𝓬𝓪𝓼𝓪, 𝓷𝓸 𝓲𝓶𝓹𝓸𝓻𝓽𝓪 𝓬𝓾𝓪𝓷𝓽𝓸 𝓽𝓲𝓮𝓶𝓹𝓸 𝓹𝓪𝓼𝓮.
Incluso por más que deseara no haber nacido, los dioses nunca le hicieron caso, y su peor terror se volverá realidad. Todo por el bien d...
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Plan
El regreso hacia el refugio fue más rápido de lo que pensaron, a Ray se le estuvieron revolviendo las ideas de cómo podría hablarle a los demás sobre un tema tan delicado. Para empezar, hacer conocida la existencia de Kin de por sí es difícil. Aunque haya demonios, a nadie se le pudo haber ocurrido que la magia es verdadera. Todo el mundo que conocen se ha basado en hechos lógicos y científicos, los demonios utilizan la tecnología para hacer sus cosas. Lo más acercado a la "magia" era lo que había en Cuvitidala.
Una vez llegaron a su hogar temporal, fueron recibidos por todos, aunque a Kin le dieron una grata bienvenida con una pistola apuntando directamente a su cabeza.
—¡Espera, Yugo! ¡No nos va a hacer nada!
—¿Y cómo sabes tu eso?
Ray esquiva la mirada, buscando cómo responder a la pregunta de Luca. Suspira, no se le ocurra otra opción más que decirles ahora mismo sobre su "hogar". Aprovecharía que todos están presentes.
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—. . . ¿Nos estás diciendo que este animal, que se supone que es una deidad, te ha acompañado desde que eras pequeño y te ha prometido sacarnos de este "mundo" para volver al que verdaderamente pertenecen porque el Dios de los demonios los secuestró hace años, borrándoles la memoria e implantando recuerdos diferentes con el fin de que las "plantas" puedan crecer mejor, teniendo en cuenta la promesa que hizo hace no sé qué cuantos años?
Resume Yūgo, la sala queda en silencio hasta que suelta un quejido, chistando la lengua.
—Me debes estar jodiendo...
—Es verdad, puedo confirmarlo.
—¿Y cómo lo vas a hacer? De por sí es un poco imposible que los demonios tengan un dios para que me digas que este tigre es una deidad.
Refuta el adulto contra el menor, volviendo a sacar su arma. Los niños tiemblan ante lo que pueda pasar, y los más grandes observan sin saber cómo intervenir.
