❝一方通行❞
▭𝓔𝓼𝓽𝓪 𝓼𝓮𝓻á 𝓼𝓲𝓮𝓶𝓹𝓻𝓮 𝓼𝓾 𝓬𝓪𝓼𝓪, 𝓷𝓸 𝓲𝓶𝓹𝓸𝓻𝓽𝓪 𝓬𝓾𝓪𝓷𝓽𝓸 𝓽𝓲𝓮𝓶𝓹𝓸 𝓹𝓪𝓼𝓮.
Incluso por más que deseara no haber nacido, los dioses nunca le hicieron caso, y su peor terror se volverá realidad. Todo por el bien d...
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Dos días después.
—¡¡¡ES TAN GRANDE!!!
—¡No puedo creer que estos árboles. . .
Los jóvenes de Grace Field miraban con asombro la vegetación, hasta el punto de tener la boca abierta. Incluso yo tenía la boca abierta, ¿quién ve todos los días unos arboles tan grandes? En mi mundo no existen algo parecido, a pesar de que hay magia no afecta directamente a la naturaleza para causar algo así.
—¡Es un bosque!
—¡Pero mucho más grande que los otros que hemos visto! —exclamó Don, uno de los hermanos mayores.
—¿Está el escondite allí? —Oliver se hizo escuchar con una pregunta, la cual va dirigida hacia el chico de máscara que se ubica a su lado derecho.
—¡Sí! Ya casi llegamos
Seguimos con nuestra caminata después de habernos detenido unos momentos para admirar la flora y fauna a nuestro alrededor. Llevaba en mi forma de tigre a algunos niños en el lomo para que pudieran de alguna manera descansar, no era lo más cómodo pero definitivamente era mejor a no poder tomar descansos largos.
—Los árboles se ven todos iguales, ¡no distingo hacia donde voy!
—Me adelantaré, ¡le diré al jefe sobre ustedes! —exclamó Hayato, quien estaba capitaneando— ¡Jin, Zazie, muéstrenle el camino a nuestros amigos y manténganlos a salvo!
—Entendido.
El chico se preparó para salir disparado hacia adentro del refugio, sorprendiendo a los tres mayores de Grace field house, y también a los demás pertenecientes a aquella planta.
—Aquí es. Este es nuestro escondite.
—Wow. . .
Por fin habíamos llegado, el escondite era como una ciudad oculta entre los arboles. No pude ocultar mi sorpresa, la verdad es que nunca se me había ocurrido, ni siquiera en mi infancia, o al menos que recuerde, tener casas en los arboles. Estaba acostumbrado a las casas de cemento o de madera. Voy a agregar esta idea a mis notas, después analizaría que tan bueno es vivir entre los arboles para poder hacerme una casa.
—Wow, wow, ¡¡wow!! ¡¿Es este lugar?! —exclamaron Thomas y Lani al unísono.
—Nuestro escondite.
—Sí, ya sabemos.
—No soy bueno con este tipo de cosas, pero esta alguna vez fue una aldea oculta de antiguo clan de demonios, o algo así. —comenta el azabache de la máscara— Los otros demonios no saben de este lugar, así que no se acerquen. Tratemos a los heridos primero. —entramos a una puerta cerca de ellos, que tenía camillas y medicinas— Todos los demás, vengan conmigo.
