Extra

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Habían pasado ya 3 largos años desde que Giyu y Sanemi habían fallecido y Tengen se encontraba visitando las tumbas de ellos y la del resto de sus compañeros.

- Hola chicos, lamento no haber podido visitarlo en mucho tiempo, pero el cuidar de una familia muy numerosa si que te consume mucho tiempo y al fin pude darme una escaaodita, aunque no puedo estar aquí mucho tiempo -

El ex pilar empezaba a limpiar cada una de las lápidas de sus compañeros mientras recordaba a cada uno de ellos.

- Sabes algo Kocho - decía mientras limpiaba su tumba y la de Kanae - las niñas de la finca están bien, suelo ir muy seguido y veo que todos son muy felices, Kanao y Aoi se encargan de dirigir la finca, realmente me alegro que tengan paz depues de tanto tiempo -

Luego se dirige a la tumba de su amigo Rengoku.

- Espero me perdones amigo y tu también Kocho, pero ahora el joven Senjuro sera tan extravagante como yo, ya que se casara dentro de poco con las trillizas - sonreía feliz de tener un discípulo.

- Himejima, asi como tu fuiste un ejemplo para nosotros en la cofradía, yo también trato de dar el ejemplo para las futuras generaciones - decía limpiando la tumba del pilar más fuerte.

- Iguro y Kanroji, estoy seguro que ustedes hubieran sido muy felices en esta era de paz, solo espero que en el más allá puedan estar juntos - decía también limpiando la tumba de ambos.

- Tokito, tu eras solo un niño, a veces la vida no suele ser justa con todos pero espero puedas ser feliz donde quiera que te encuentres - realmente lamentaba que un niño tuviera que morir, el gustoso hubiera dado su vida por la de el.

Luego se empezo a dirigir a las tumbas de Giyu y Sanemi, aquellos con los que compartió sus últimos días.

- Saben chicos, si que se hacen extrañas, pero no se preocupen por nada, como se los prometí yo me estoy haciendo cargo de velar por sus familias -

Empezo a limpiar sus lápidas.

- Sabes Giyu, Yae actualmente sigue viviendo en la finca del agua, se encuentra feliz, ya que ah hecho varias amigas, entre ellas mis esposas, tu hija es un encanto, me suele llamar tío y siempre se alegra cuando llevo a mis hijos e hijas a su casa para que jueguen con ella -

- Por otra parte Sanemi, tus hijas y esposa  viven en la finca del viento y también esta felices, tu hijas también disfrutan mucho cuando traigo a los demás niños para que jueguen todos, aunque me fije que una de tus hijas definitivamente tiene tu caracter mientras la otra es dulce y tranquila -

En ese momento Tengen saca una botella de sake y derrama un poco sobre las tumbas de cada uno de sus compañeros, menos en la de Tokito, ahí derramó jugo.

- Saben, me hubiera gustado poder beber este sake con ustedes, pero supongo que eso sera algo imposible - tenía un triste semblante - A veces me pregunto si todos ustedes podrán tener una nueva oportunidad de vivir una vida pacífica -

Tengen seguía hablando con sus amigos, cuando sintió la presencia de un joven demonio a sus espaldas.

- Supuse que te encontrarías en este lugar pilar del sonido -

- Ya no soy un pilar y de paso que haces acá, tu no sueles venir a estas tierras -

La relación entre Yushiro y Tengen era algo fría, si bien no se odiaban ni nada por el estilo, tampoco es que sean amigos, se podría decir que son conocidos y nada más.

- Vine porque Kamado me insistió en que lo hiciera, me mando a que te llevara a la finca y de paso para que aclare algunas dudas que tu tienes -

Tengen lo mira y solo asiente, luego de eso ambos parten rumbo a la finca mariposa, ya que ahí se estaba dando una fiesta y todos se encontraban reunidos.

Seremos felices en otra vida (Giyushino) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora