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Una figura espeluznante se alzaba frente a madre e hija, ambas temblando por la fiereza con la que él sacudía su puño en el aire, dejándolo caer ocasionalmente contra la mesa a su lado.

Gritos abundaban en el ambiente, ni siquiera los puños que apretaban las orejas de la menor lograban disiparlos un poco. La madre lloraba mientras que con odio gritaba sandeces contra el mounstro que le recriminaba una y otra vez cosas sin importancia.

Lo extraño de la situación es que el alcohol escaseaba en las venas del más grande, quien se acercaba cada vez más a donde se encontraban las féminas sentadas en el suelo.

El hombre gritó una vez más, esta vez siendo una amenaza que alertó a la madre.

Uno... dos... tres

El sonido de un vidrio estrellándose contra algo se expandió en aquella sala.

Cuatro... cinco... seis

Un golpe lanzó a alguien contra el suelo, la tos de la víctima se escuchaba tan cerca de la pequeña cuya mirada estaba estática hacia el suelo, el miedo bañando su rostro y su agitaba respiración acompañando a su inquieto corazón.

Siete... ocho... nueve

Porque no estaban parando? Siempre que llegaba al nueve parecía que todo volvía a la normalidad... porque no funciona esta vez? Sería posible que ese amiguito que hizo se equivocó?

Escuchó como la puerta principal era azotada y despertó, viendo como su madre estaba en posición fetal en el suelo, temblando y ocultando su cara entre sus manos.

Se acercó gateando hasta que se encontraba en frente de ella. También estaba temblando, ni siquiera se había percatado que lágrimas habían empezado a descender por sus prominentes mejillas.

A penas si toco los hombros de la mujer cuando esta la apartó bruscamente, levantándose y corriendo, aún ocultando su rostro de la menor.

La niña se quedo sentada, mirando el pequeño charco rojizo que manchaba la brillante madera del piso.

Su amigo se lo prometió... acaso rompió su promesa? Pero ella también estaba cumpliendo la que le hizo... por qué?

.................

Mierda, siento que la cabeza me va a explotar, y ni hablar de mis huesos. Puto aire de porquería, desde el primer momento en que te encontré te odie, pero ahora te odio mucho más; espérate que consiga mis poderes que voy a hacer que te revuelques hasta en el infierno... si es que hay un infierno aquí.

Abrí mis ojos con cuidado al escuchar una voces lejanas. Pude notar que estaba sobre algo cálido y cómodo que se mecía un poco. Hubiera seguido durmiendo si no fuera porque escuche algo que me llamo la atención en la conversación.

El chisme me llama y yo respondo

Cuando mi visión se adapto, confirme que mis sospechas eran ciertas, Aether me estaba cargando estilo caballito mientras hablaba tranquilamente con Paimon y Amber...

"A la verga y en qué momento llegó Amber? Y como es que recuerdo que se llama amber?!? Ese susto hizo un milagro con mi memoria"

Sin saber como unirme a la conversación siendo que se suponía estaba medio muerta, presione mi barbilla un poco fuerte contra el hombro del rubio. Cuando él lo sintió, se volteó a verme y me sonrió, preguntando si me encontraba bien. Por mi parte, solo pude quedarme embelesada viendo su carita de angelito, Dios, este hombre me tiene en la palma de su mano; por qué carajos debe ser tan tierno?

-Así que su amiga ya despertó, me alegra ver que aparentemente no tiene ningún daño grave. Fue una suerte que los encontrara justo cuando la buscaban, juntos pudimos terminar rápido con ese ojo de la tormenta- la conejita playboy me sonrió ladeando su cabeza.

EPA, que acabó de darme cuenta que los que he visto hasta ahora tienen sonrisa colgate.... Aunque nunca llegue a verles una sonrisa como tal en el juego... será que alguno podría tener caries? Si es así, 100% que razor e Itto tengan caries... y bennett por la mala suerte.

-Si, muchas gracias por la ayuda Amber- el ojidorado miró hacia la castaña -Si no hubieses aparecido, probablemente no hubiéramos dado con Morgana fácilmente- sonrió cerrando sus ojos esta vez y luego le preguntó algo que no llegue a entender.

Me recosté otra vez sobre el hombro del muchacho y le di un vistazo a mi alrededores. Estábamos en la placita que queda frente a la iglesia. A pesar de sentir que pasaron horas, el sol todavía no llegaba a ocultarse, quedando prácticamente tapado por el gran edificio frente a nosotros.

Los jóvenes siguieron hablando sobre una prueba - que asumí era esa de volar -que debíamos hacer antes de andar volando por ahí. Escuchando atentamente, me percaté de la poca participación de cierta garrapata, Alcé mi cabeza y busque la pequeña figura, encontrándola al lado de la exploradora, brindándome una confusa mirada.

-Sucede algo Paimon? Te veo un poco... perdida- pregunto con voz suave, empezando a sentirme un poco somnolienta.

-NoNoNo- movió sus manos de un lado a otro de manera frenética, pero no lo suficiente como para distraer a los otros dos -Es solo... no te preocupes Morgana, Paimon esta bien- y colocando sus manos tras su vestido me brindo una sonrisa floja acompañada de una mirada apagada.

Era más que obvio que me escondía algo, sobre todo porque no es la que se pueda considerar experta en el tema de disimular. Ya después me encargaré de sacarle información, por ahora me concentraré en que estamos por fin en la ciudad con inspiración Alemana.

Di unos toques a los hombros del muchacho y le hice señas para bajarme; me encontraba disfrutando de la calidez y comodidad que me brindaba pero tampoco quería abusar de la amabilidad del angelito. Incluso en algo tan simple como eso, el rubio tuvo la mayor delicadeza del mundo. Solo puedo decir que soy main Aether desde la beta.

-Casi lo olvido- Amber corrió un poco hasta estar en frente de mi- Morgana, permíteme presentarte la ciudad del viento, de los dientes de León, de la música bucólica. La Capital de la Libertad. Viajera bajo la protección de los Caballeros de Favonius y de mi, la exploradora Amber. ¡Bienvenida a Mondstadt!- terminó su pequeño día discurso con la posición de manos de jazz y una sonrisa que dejaba a la vista incluso sus muelas - pero se veía muy linda sonriendo así, me arrepiento de haberla dejado en cuanto me salió Yoimiya -

-Paimon te da puntos extras en la presentación por decir exactamente lo mismo que a nosotros- la pequeña asintió frunciendo su ceño como si fuera algo de suma importancia.

-Pues... gracias por la bienvenida, Amber, es un gusto- respondo lo más amable posible, siempre me han dicho que mi cara de culo ahuyentaba a todos; debo hacer un esfuerzo por este Rayito de sol.

A pesar del mundo ambiente que se estaba desarrollando, no podía evitar sentirme inquieta. Se supone que Duvalin se aparecía, mandando a la estratósfera al viajero, en donde carajos se había metido??

Seguí mirando hacia los lados como esquizofrénica en ascenso pero, en cuento escuche que mencionan la palabra invitar seguido de cena, mi estómago tomó el control de mis pensamientos y solo se encargó de recordarme las imágenes de los pollos con miel que vendían. Mi boca se hizo agua pensando en ese manjar y no pude evitar emocionarme pensando en su sabor y en que ahora podría probar el original.

Amber habló un poco más y luego nos entregó los planeadores bonitos, nos lanzamos desde el pilar que se indicaba en el juego - yo casi dejando los dientes plasmados en la pared por abrirlo mal - llegando después de un rato al buen cazador.

Nos sentamos - excepto Paimon que se quedó flotando- y Amber se encargó de pedir por nosotros. La comida más sabrosa es aquella que se comparte con personas que quieres... mentira, es la comida gratis.

Después de un rato vi como dejaban cuatro jugosos pollos en la mesa, mis ojos se encontraban soltando brillos y mi boca un poco abierta. Estaba hipnotizada por el seductivo aroma que destilaba el platillo, definitivamente iba a disfrutarlo.

.......

Gracias por leer y espero que les guste este extraño intento de historia!

Stuck In Another World (A Genshin Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora