Capítulo 2

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Brianna


¿Has escuchado sobre los ángeles guardianes? ¿Crees en ellos?

Jamás pensé en esto hasta hace poco cuando Timmy me estaba mostrando un dibujo de él, su hermano y dos personas detrás de ellos. Pregunté si eran sus padre y recibí una cara que decía "Brianna ¿Eres estúpida?". Después de eso, Tim dedico media hora de su valioso tiempo para explicarme sobre los ángeles guardianes y como es que se dio cuenta que él y su hermano tienen dos.

-Si solo tuviéramos uno, como es que el mismo día que esa señora me entrego mi botella de agua justo antes de atravesar la calle y ser atropellado, también alguien evito que Nam entrará a esa tienda que estaba por ser asaltada. Alguien murió ese día y pudo haber sido él.
-Sabes lo horrible que suena eso.
-Lo sé, pero es verdad y eso prueba mi punto. ¿Cuándo va a regresar Alanna?
-Puedo preguntarte algo Tim ¿Qué diferencia hay entre Alanna y yo? ¿Por qué ella te agrada y yo no?
-Suenas a una niña consentida, como las de mi salón, que hacen berrinche si no les das lo que quieren. No me agradan.
-¡Oh!- no supe que decir porque era verdad. Solía hacer berrinches con mi papá cuando no me compraba algo o no me dejaba ir a algún lugar. Tomé mi teléfono enseguida y envié un mensaje a Alanna.


*Esto es vergonzoso, pero si no le haces algún berrinche a mi padre, te descubrirá*


La respuesta llegó enseguida


A:*¿Estás de broma, verdad?
Brianna, dime que no es cierto..*

B:*Alanna, me estas haciendo un berrinche ahora, has lo mismo con él.. solo habla, como yo lo haría.*


Escuche el timbre y deje el celular en la mesa, era hora de que Timmy se fuera así que baje para entregárselo a Namjoon. Abrí la puerta y él estaba recargado en la pared junto a la puerta,

-Hola, Brianna- dijo burlón
-Ayer ya no te vi pero.. necesito preguntarte algo- dije un poco nerviosa mientras Tim salía corriendo de casa como si huyera de mi.
-¿Quieres saber como se que eres Brianna?- asentí -Vamos a mi casa
-¿Qué? ¿Por qué?
-No te haré nada- puso los ojos en blanco -Anda, vamos.

Namjoon me llevó de la mano como si fuera una niña pequeña, el toque de su mano quemaba mi piel, me sentía como una colegiala tonta que se emociona con cualquier roce que pueda tener con el niño que le gusta, y a mi no me gustaba él. Nam no me soltó hasta que estuvimos en la entrada de su casa, me daba un poco de risa que me tratara así, él pensaba que yo era una niña y yo simplemente quería mostrarle que no lo era. Desde que tengo memoria crecí con la costumbre de que lo que quiero, lo tengo... y no me haré la tonta, Namjoon me gusta.

-¿Por qué aquí?- pregunté sonriéndole
-En primer lugar, porque muero de hambre. De verdad necesito comer algo.- entró y me hizo una seña para que lo siguiera -En segundo lugar, aparte de que aquí hablaremos más a gusto que en la entrada de tu casa, también puedo mostrarte algunas cosas.
-Esto se pone interesante- camine detrás de él y me senté en uno de los bancos
-¿Comiste algo?
-Si, acabo de cenar- me miro a los ojos -Tal vez pueda comer postre- levante una ceja y él rodo los ojos. No soy tan indecente, por más que quiera algo siempre busco una buena forma de conseguirlo, pero Nam me provoca querer jugar con él -¿Intentas alargar mi estancia aquí... Joonie?- pregunte fingiendo estar fastidiada
-Simplemente necesito comer, Bri- dijo sacando algunas cosas del refrigerador -Estudie toda la mañana y me olvide de desayunar. Estoy en exámenes así que me estreso y me olvido de ese tipo de cosas.
-Ese tipo de cosas te mantienen vivo- dije sarcásticamente pero me ignoro
-En fin, después de estudiar fui al trabajo, hoy estuvo a reventar el lugar, me fue bien pero no tuve tiempo de nada y si no como algo, probablemente tengas que darme primeros auxilios. ¿Sabes dar primeros auxilios?
-Podría darte respiración boca a boca
-¿Segura?- levantó una ceja y luego soltó una carcajada.
-Me subestimas Joonie.- me enderece en mi asiento -Puedes ir al grano
-Eres muy desesperada Brianna.- imitó mi tono -Bueno, quieres saber como se que eres Brianna.- puso una chuleta en la sartén y no pensé que oliera tan bien -Conozco bien a Alanna.. yo diría que bastante bien. Fuimos mejores amigos por mucho tiempo y por mas que la gente cambie en gustos y pasatiempos, su esencia es la misma. Ella y yo nos alejamos pero nunca dejamos de hablarnos por completo, y aunque esto se resume a pelear cada que nos vemos, es esa esencia la que mantiene nuestra amistad.- mientras hablaba, agregaba sal pimienta y mas cosas a la sartén. La cocina olía excesivamente bien y aún que no era mentira que acaba de comer, mi estomago hacía ruido conforme los olores incrementaban. Nam sirvió la carne en un plato y continuó en la estufa -No recuerdo toda mi vida pero si puedo presumir de una buena memoria, recuerdo eventos y personas de hace mucho tiempo, incluyéndote a ti.
-¿Y que recuerdas? ¿Recuerdas estar enamorado secretamente de mi- se recargo en la encimera frente a mi y tocó la punta de mi nariz con la punta de su dedo. Ese gesto me resultó un poco familiar pero no podía decir si era cierto o mi mente estaba jugando conmigo.
-Teníamos cinco y seis años, niña tonta.- dijo con cariño pero aún así sonaba a insulto

Regreso a la cocina y empezó a aplastar unas papas para hacer un puré.

-¿Y?- dije -¿Así de simple?- pregunte sintiéndome estafada -¿Solo recordaste que existía una Brianna y ya?- no quería sonar tan dolida, pero el hecho de que me recordara solo porque Alanna era su mejor amiga, me provocaba una sensación fea. No es que quisiera que todo mundo me extrañará y corriera a mi, porque es algo que probablemente también yo debí hacer y ni siquiera puedo llamarle abuela a la abuela. Namjoon se río y sirvió el puré junto a su chuleta. Me dio la espalda mientras terminaba de saltear unos vegetales y, ¡Por Dios! Que espalda... Namjoon era guapísimo y tenia un cuerpo de muerte, podría jurar que incluso estaba más marcado que el idiota de Luke. Verlo cocinar me hizo perderme en mis pensamientos. Se veía tan sexy que mientras mi mente volaba, no me di cuenta que él se había girado y me estaba viendo
-Brianna…
-¿Mmh?. Lo siento me perdí en algo más interesante
-Si. Me di cuenta- sonrió de lado -te decía que no solo recuerdo que existías. Recuerdo jugar contigo y esas cosas, digo, teníamos cinco años ¿Qué podíamos hacer a esa edad?- corto un pedazo de carne y coloco un poco de puré encima, lo llevo a su boca y sentí que me perdía en sus labios. Necesito salir de aquí, antes de que se me caiga la baba o algo peor.

Me levante del taburete y me gire para irme pero atravesó su cuerpo sobre la barra y me detuvo. Ahí estaba de nuevo, la corriendo que provocaba su tacto sobre mi piel y que enviaba una descarga por todo mi cuerpo.

-Creo que me iré ahora- dije intentando reafirmar mi decisión
-¿Tan rápido?- sonrió y me soltó para rodear la barra, tomó asiento en el taburete a lado de mi y me guío nuevamente a mi asiento. Nuestras rodillas estaban juntas y no sabía que era lo que me sucedía, el menor de los roces me provocaba cualquier sensación. Mis hormonas estaban descontroladas.
-Bueno, creo que me has dicho todo- dije justificando mi reacción repentina. Coloco una mano sobre mi pierna para que dejara de moverla, cosa que no me había dado cuenta que hacía. Giro la parte superior de su cuerpo hacia su plato para cortar otro pedazo de carne, tomó el bocado junto con un poco de puré y llevó el tenedor hacia mi boca
-Vamos, come conmigo, se que se te está cayendo la baba por culpa de mi comida-sonrió burlón, él sabía que la comida era lo que menos me hacía babear.
-Bueno, cuéntame algo más entonces- dije y abrí la boca. Cerré los ojos inmediatamente al sentir el sabor, estaba delicioso y no podía creer que este tonto acaba de prepararlo, parecía salido de un restaurante.
-También tengo una foto vieja en algún lugar, pensé que querías verla.- abrí los ojos de golpe, definitivamente quería ver esa foto -¿Quieres beber algo?- levante una ceja
-¿Quieres embriagarme?- subí un dedo y negué con el mientras levantaba mi ceja. Él se río fuerte
-Agua será- coloco una botella de agua frente a mi y siguió comiendo, entre cada bocado suyo, llevaba un trozo de carne o vegetales a mi boca y yo hacía lo mismo todas las veces.
-¿De qué te ríes?
-De nervios- dijo y retiro la vista de mi boca -creí que me pedirías una copa de vino refinado o algo así
-Idiota
-Que linda- lo dijo bajito pero lo escuche

Termino de comer, lavo rápido su plato y lo que uso para cocinar, fuimos a su sala y tomo asiento en el piso, extendió su mano para que me sentara junto a él. En el centro de la sala había una pequeña caja de madera llena de fotos antiguas. Amaba estas cosa, el hecho de que ahora todo lo hiciéramos en el celular perdía valor. Empecé a ver varias fotos de cuando Tim era un bebé, después algunas en donde salían ellos con sus padres, lo cual me llamó la atención ya que era idéntica al dibujo que había hecho Timmy esta mañana.

-¿Haz visto los dibujos de Tim?- pregunté casi en un susurró y Nam me miro confuso, me acerque aún más a él
-Esta mañana dibujo algo. Eran ustedes y dos personas atrás, se parecía mucho a esta foto.- le mostré y él se acercó un poco más a mi. -Le pregunté si eran tus padre y me dijo que eran ángeles guardianes. Me contó una historia sobre...
-Cuando casi lo atropellan y ese mismo día asaltaron la tienda a la que iba a entrar.- dijo un poco ausente. Nuestras mirada se encontraron y lentamente levantó su rostro cada vez más cerca del mío. Bajé mi mirada a su boca que estaba a centímetros de la mía y mordí mi labio. Cuando me acerque un poco más para tocar sus labios con los míos se alejo. -No es la primera vez que lo hace y sus explicaciones suelen ser bastante convincentes.- continuó. Asentí y trague saliva. Me sentí extraña, no es que haya besado a mucho hombres, de hecho aparte de Luke tal vez a uno o dos en la secundaria, así que puede que esos no cuenten. Pero sé de todos los que querían besarme y sentí que Namjoon definitivamente no era uno de ellos, él me estaba rechazando. Sentirme avergonzada era poco
-Creo que yo...- dije para despedirme pero me interrumpió
-Aquí esta- Subió su mano y me mostró una foto. La tomé y no pude dejar de ver a ese par de niñas idénticas pero a la vez diferentes. No se que era; sus expresiones, su sonrisa, su mirada. Algo en ellas dos era distinto a pesar de estar vestidas y peinadas igual. Sentí un escalofrío y me maree, todo se empezó a poner oscuro y sentí a Nam colocar un brazo debajo de mi cabeza antes de ser golpeada contra el suelo.

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Telepathy (Namjoon & JK Historia Hetero) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora