- ¿Quieres pasar un rato agradable? - le pregunto.
Xavier sonrió y dejó a un lado su bebida.
- Claro - le contesto.
Bianca y Xavier se levantaron de los troncos y comenzaron a caminar por el oscuro bosque, buscando un lugar alejado. En el camino, Xavier no pudo ignorar el ver a Yoko sentada a lo lejos junto a aquella alfa. Sin duda, su amiga la iba a pasar tan bien como él... O eso era lo que creía. La realidad era otra.
- ¿En serio crees que no puedo? - le pregunto.
- No, las omegas no tienen la misma fuerza que un alfa - le contestó.
- Sí puedo hacerlo, ¿Qué gano? - le pregunto.
Divina lo pensó...
- ¿Dinero? - pregunto.
- Bien, ¿Cuánto? - pregunto.
- 300 - le contestó.
- Hecho - le dijo y se levantó del suelo.
Ningún alfa se iba a burlar de ella.
Se aproximó al pequeño riachuelo y se acercó a aquella piedra. Sin duda parecía ser pesada pero... ¿Qué más daba? Iba a ganar 300 dólares por levantarla.
- ¿Lista? - le preguntó la alfa en la lejanía.
Yoko extendió su mano, mostrándole su pulgar como respuesta.
La omega se posicionó y... Comenzó a levantar la piedra.
- ¡Tiene que llegar al pecho! - le dijo la alfa.
No era problema, hasta el pecho... Hasta la cabeza. Conforme fue levantando esa piedra, el peso de la misma comenzaba a ser insoportable. No debía rendirse, mucho menos ante la mirada de la burlesca alfa.
- ¡Diablos! - exclamó mientras dejaba salir un suspiro.
No pudo, esa piedra era demasiado pesada.
La alfa se levantó del suelo y se acercó a la omega.
- Te lo dije - le recrimino.
- Hazlo tú, sí es que crees que eres tan fuerte - le dijo.
- ¿Qué gano sí lo hago? - le pregunto.
- Lo que quieras - le contestó.
Divina miro a la omega... Había cambiado un poco de opinión.
- Un beso - le contestó.
Yoko se sorprendió, no esperaba eso.
- ¿No habías dicho que no querías nada de esa índole? - le pregunto, burlesca.
- Quizás... - se posicionó frente a la piedra, lista para levantarla - cambie de opinión - dijo antes de comenzar a levantar la enorme piedra.
Poco a poco subió la piedra pero... Estaba por rendirse, ni siquiera llegaría a levantarla hasta la altura de su pecho. Yoko miró el rostro ya casi rojo de la alfa, no iba a poder... Quería ese beso, lo anhelaba. Posiciono sus manos en la piedra y comenzó a levantarla, ayudando a la alfa que se sorprendió con tal acción. La piedra estaba encima de ellas, las mismas sostenían la piedra, extendiendo sus brazos, mirándose cara a cara.
- Eso es trampa - le dijo Divina.
- Técnicamente, no lo es. Nunca dije que te podrían ayudar - le contestó.
Divina río y con cuidado dejó caer la piedra al suelo. Yoko rodeo la piedra y se acercó a la alfa que la miraba con desesperación, esas pocas horas charlando con la omega le habían agradado y sin duda, algún mal le había hecho ya.
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[WEDNESDAY] Love or you
FanfictionYoko Tanaka había comenzado su primer semestre de universidad junto a su compañera y amiga, Enid Sinclair. Pero, a diferencia de su amiga, ella estaba centrada en la diversión, conocer alfas que le dieran lo que ella quisiera por las noches. Divina...