HER NICKNAME IS "CONTROL"

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- ¿Estás bien? –

Kara pregunta tocando ligeramente mi hombro izquierdo y yo siento un nudo en la garganta, pero me contengo y asiento sonriendo levemente. Ella suspira asintiendo y alejando su mano, casi me muevo siguiéndola.

- ¿Imra te llamó? — Pregunto y me mira con confusión, mierda.

-No, vine a almorzar — Señala el restaurant al otro lado de la calle, es verdad, es su lugar favorito.

-Veo que mantienes los mismos gustos — Trato de cambiar de tema.

-Sí, nada cambió después del accidente, o eso creía hasta que apareciste tú con una parte de mi pasado — Hago una mueca mirando hacia un lado — Imra te llamó para explicarte mi condición, ¿Cierto? –

-Sí, pero no te enfades con ella, lo hizo para que no te busque más — Me encojo de hombros cerrando los puños con fuerza en los bolsillos de mi chaqueta — Bueno, lamento chocar contigo de nuevo, debo volver al trabajo — La rodeo para alejarme.

-Espera — Cierro los ojos dándole la espalda y giro lentamente para verla — ¿Ya almorzaste? –

-Sí — Mi estómago hace un ruido traicionero y arquea las cejas sonriendo — No, no tuve tiempo, pero ya me compraré un burrito de camino al trabajo-

- ¿Puedo invitarte el almuerzo? — Ella parece ver mi duda y suspira — Creo que necesitamos hablar sin intermediarios-

-No creo que sea buena idea-

- ¿Por favor? — No, no esa mirada.

-De acuerdo — Exhalo y ella sonríe ampliamente — Sólo porque sigo procesando el que digas por favor-

Me espera para caminar a la par hasta ingresar al restaurant donde nos guían a la mesa de siempre, sólo una vez me trajo aquí y sé que los empleados además de sorprendidos, deben estar confundidos pues he de suponer que siempre viene con su prometida. Ordenamos, y al estar a solas de esta manera me pone nerviosa, sobre todo la forma en que mira como buscando algo que pueda recordar.

-Disculpa si te incomodo — Parece darse cuenta y luce apenada.

-Tranquila, sé que debe ser difícil para ti saber que no recuerdas algo-

-Sí... — Suspira — Y no me agrada que me oculten las cosas-

-Lo sé — Me mira, frunciendo el ceño mientras sonríe — Quiero decir, te conozco, Kara-

-Cierto, fuimos...-

-Sí — Asiento apretando mis labios — Sólo que es extraño-

- ¿El qué? –

-Verte tan distinta, ya no tienes esa mirada gélida y dices por favor-

-Realmente era una estúpida — Sonrío encogiéndome de hombros y ella ríe levemente — Me agrada que tú sí seas honesta conmigo-

-Siempre lo he sido-

-Puedo notarlo — Vuelve a fruncir su ceño, observándome y yo le sostengo la mirada hasta que el mesero llega con nuestra comida — Gracias — Ella le dice.

-Su jugo, señorita — Me dice y yo le sonrío.

-Gracias-

-Infiero que no aceptas el vino ya que vas a trabajar-

-Sí, no puedo siquiera oler a alcohol podría afectar mi trabajo, además, la pasta también es deliciosa acompañada con jugo-

- ¿En serio? — Pregunta, divertida.

-Sí, ¿Quieres probar? — Tiendo mi vaso hacia ella y rápidamente lo retraigo dándome cuenta de lo que estoy haciendo — Lo siento, eso fue inadecuado-