En la guerra y el amor

La unión más desafortunada

Después de tanto tiempo el gran día había llegado. Muy temprano se había despertado Undyne, siendo bañanada y arreglada por sus sirvientas y damas de compañía. En la mirada de su cuñada y hermano había una gran ilusión, ambos están felices por saber que hoy es el día de la boda tan esperada por todos

En el lugar de Undyne, ella estaba nerviosa, casi no hablaba y mucho menos había desayunado correctamente, fingir una sonrisa es pesado, más aún cuando supuestamente hoy es el día más feliz de tu vida. Tiempo después ya era hora de colocar su vestido, todos estaban muy a pendiente de cada detalle en la jóven novia

Es entonces cuando lo mejor había llegado, pues bajando de las escaleras de la mansión estaba Undyne luciendo ese bello vestido blanco, su cabello rojo peinado y sostenía un ramo de gardenias blancas, ideales para las novias

-¡Estás hermosa! -le dijo Shyren mostrándose plenamente feliz por ella- No hay duda de que será un gran día, me siento orgullosa por ti Undyne

-Yo también, estás hermosa hermanita

-G-gracias -había apretado el ramo con sus manos, los nervios la hacían querer huir del sitio- ¿Podemos tardar un poco?, es que...estoy nerviosa, seguramente me voy a desmayar en cualquier momento

-No, ya vamos tarde y no debemos hacer esperar al novio, además los nervios se te van a pasar en el camino, vamos Undyne

-Pero herma-

Sin mayor remedio, la monstruo fue llevada por su cuñada y hermano hasta la salida, ahí los espera un hermoso carruaje adornado de flores y llevado por caballos blancos, tras soltar un suspiro pesado subió finalmente, su hermano y Shyren van a irse en otro carruaje, esto al menos la dejará en silencio

Mientras avanzaba, veía que cada vez más estaba cerca de la iglesia, a un paso más de ser la princesa y futura reina de Ebott, esto simplemente la hace sentirse aún peor, además está Alphys, no la ha visto desde hace mucho tiempo, no quiere verla en la iglesia, desea que no venga de preferencia, le va a doler esto

No ama a Asriel, tampoco quiere ser reina y mucho menos había pensado en la idea de casarse, todo esto la altera y enoja, cada vez más está dispuesta a dejar todo atrás

-No te lo dije antes porque seguramente pensarás que estoy enferma como dicen los demás, pero, solamente tu hiciste latir mi corazón de una forma especial...Alphys, solamente tu sonrisa y dulces palabras me ruborizaban, ningún hombre me hizo sentir así, lo siento...estoy loca, pero te prefiero a ti

Al haber confesado esto a su misma, sus dudas se despejaron, sabe que todos condenan a las mujeres que gustan de otras mujeres, lo mismo con los hombres que gustan de los suyos, todos los repudian y atacan, ¿algo con Alphys es posible?, no, definitivamente no lo es, más ahora que está a punto de casarse

¿Porqué?, ¿porqué se siente así?, ¿porqué ningún hombre la hace feliz solo como Alphys sabe hacerlo?

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Mientras todos estaban esperando dentro de la iglesia, Asriel estaba en el altar ahora, sus padres a un costado mientras esperaban a la novia, incluso habían invitado a la familia Determ y evidentemente estaban los Gaster, presentes y callados, pero el jóven esqueleto se mostraba demasiado inquieto

Pues en los bancos de al lado, estaba Frisk, usando un hermoso y elegante vestido rosa pastel, se veía tan hermosa, esos guantes largos y tocado de flores lo mantienen loco, quuere ir con ella ahora mismo y decirle lo hermosa que se ve

-Ese deberías ser tu -dijo Wingdings con los brazos detrás de la espalda- Pero pierdes el tiempo

-Simplemente pienso las cosas con claridad, no quiero a cualquier mujer como la reina de Snowdin, deseo a una buena esposa y acompañante, no me voy a apresurar -le respondió con tranquilidad- Además, es una boda padre, no hablemos de estas cosas ahora, ¿bien?