Capitulo 9

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Evan Pov.

Ya lo he decidido.

Decidi que ire a la casa de Angelica para decirle la verdad de su existencia.

Pero, algo que me pregunto esque, no creo que haya nacido con esos vampiros...

Tengo tantas preguntas...

Entre a la biblioteca a buscar mas información

Camine por los pasillos lentamente observando todos los libros

-¿Buscas algo? -pregunto mi madre sentada en una silla

-Busco información

-Sabia que vendrías aquí. Tu curiosidad es grande Evan -dijo y se levanto

Solte un suspiro y le mire aburrido

Verónica rio

-Pues, sígueme -dijo y camino adelante

Sin decir nada, le segui

-Si buscas el libro de la historia de Angelica, no lo encontraras aquí -hizo una pausa -Esos tipos de libros están escondidos, son libros bastantes viejos -dijo y dejo de caminar y agarro un libro que estaba sobre la mesa

Me entrego el libro con una sonrisa

-Tienes suerte de que lo haya encontrado mas antes

Agarre el libro y era un libro raro

No había titulo, ni dibujos, ni el nombre del autor

-Los seres oscuros robaron los libros asi que antes teníamos. Supongo que no querían que supiéramos que un Angel nos salvara -dijo y se sento nuevamente en su silla

-Dios debería salvarnos -dije con el ceño fruncido

-Dios mando a este Angel en su lugar

-Angelica es débil. ¿Como acabara con doscientos de demonios? -pregunte aun confundido

-Paciencia hijo, simplemente hay que entrenarla

-Ni lo pienses, Angelica no tocara ni un cuchillo -le amenaze

No dejare que un Angel se vuelva un Asesino

-No de esa forma idiota -dijo riendo -a la forma de Angelica. Pronto la conoceras

Abri el libro y movi todas las paginas rápidamente y solo habían palabras y palabras

Cerre el libro y volvi a mirar a mi madre

-Acompañame a decirle la verdad a Angelica -dije serio

Las cejas de Victoria salieron disparadas arriba

-¿De verdad crees que te creerá? -pregunto riendo

-Por eso, necesito tu ayuda -hice una pausa -Necesito que me ayudes a salvar mi reino

-Aun no eres rey, tranquilo -dijo -pero bueno, te ayudare

Sonrei satisfecho.



(...)



Caminamos hacia la mansión de Angelica

En lo que íbamos caminando encontrábamos cuerpos muertos

Verónica estaba jodida de miedo

De repente unas manos agarraban mi pie y jalaban débilmente

Verónica dio un grito. Mire y solo era un muerto viviente que solo tenia la mitad de su cuerpo

Saque mi espada y la clave justo en su cráneo

Solto mi pie y por fin había muerto

Seguimos caminando

Hasta que llegamos

Toque la puerta, no respondieron

Toque de nuevo y mas veces y me abrió un hombre con cabello color purpura

Fruncio el ceño y me cerro la puerta en la cara

¿Qué carajos...?

Toque mas fuerte la puerta y esta vez abrió Angelica

-¡EVAN! -grito y me abrazo

No conteste y imagine la cara que pondría cuando sepa la verdad...

-¿Que pasa? -pregunto preocupada al ver a mi madre detrás de mi

-Tenemos que hablar -susurre



(...)



-Estan locos -rio Angelica

-Eso eres -afirmo mi madre

-¿Un Angel? No es cierto -dijo ojeando de nuevo el libro

-Creeme porfavor -susurre

Senti los ojos de Angelica mirándome

Estaba mirando el piso

Me gustaría ver su cara, pero no puedo

Senti el suspiro de ella

-Y...¿Qué se supone que debo hacer? -pregunto

¿Ya? ¿Ya nos creyo? ¿Ya acepto ser un Angel Salvador?

-¿Osea que lo aceptas? -pregunte con un brillo en mis ojos

-Si tu dices que es verdad, entonces lo es -dijo con una sonrisa corta

-Pues, tendremos que entrenarte para cuando llegue la guerra -dijo directa mi madre

-¿Guerra? -susurro Angelica

Asenti lentamente

-¿Si lucho... salvare este reino de la desgracia de los demonios? -pregunto

Asenti con una sonrisa triste

-Entonces... hagamoslo -dijo sonriendo

No se porque, pero sentí que la iba a perder.

Eres Mi Angel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora