∆Marina ∆

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Cuándo se fué Mandy me sentí fatal, era mi mejor amiga y yo una cobarde por haberme liado con Alba y no atreverme a decirle la verdad.
Que me estaba enamorando de ella y no quería reconocerlo. Me daba tanto miedo de pasarlo mal que no me atrevía a dar el paso.
Con Alba solo había sido una atracción y me arrepentía muchísimo.
-No para Alba no podemos hacerle esto a Mandy.
-¿Que hay de malo en que nos divirtamos? Se le acabará pasando y al final estaremos bien las tres juntas.
-Tú no te enteras, está mal y solo piensas en divertirte.
-Oye que la que se ha ido es ella. Deberíais de arreglar vosotras vuestras movidas. Bien que disfrutabas hoy conmigo en la cama.
- Sí eso no voy a negarlo, pero lo hemos hecho mal y ahora mismo solo me importa que ella esté bien.
La llamaba pero no me cogía las llamadas. A saber dónde se había ido esta chica.
Era tan cobarde, si no hubiera accedido a esto del trio, nada de esto habría ocurrido.
Le mandé varios mensajes.
-Amanda siento mucho todo esto, no pretendía hacerte daño, se nos ha ido de las manos. No quiero perderte, perdoname.
-Alba: No te sientas mal Marina ella también ha estado jugando con nosotras, tú le molas mogollón y conmigo también se ha liado. Así que no te preocupes que si recapacita de le acabará pasando.
-Como se nota que no conoces a Mandy, ya nada será igual que antes... Ya lo verás.
Me sentía fatal, para mí Amanda lo era todo. Sé que últimamente me estaba portando como una estúpida.
Pero es que ni con Lu sentía lo que sentía cuando estaba con Mandy.
Era muy especial, de esas personas que te la lian pero no te puedes enfadar con ellas, además yo no podía quejarme de que estuviera con Alba porqué yo no me atrevía a dar el paso y bastante con aguantarme a mí y a la situación que teníamos últimamente como para reprocharle que estaba teniendo algo con otra chica que no fuera yo.
Además partimos de que había una jodida amistad que no queríamos perder.
Pero si hubiéramos sido valientes nada de esto habría pasado.
Mandy había cambiado mi vida y consiguió ese verano que esos miedos internos desaparecieran, ella hizó que fuera otra persona más fuerte, desde que la conocí podía ser mucho más feliz.
Pero no estaba preparada para tener una relación con ella, joder siempre la acababa cagando. Si no era porque dejaba que me hicieran daño era porque no me valoraba una mierda y nunca me atrevía a que me quisieran bien.
No quería perder a Mandy, y por su mirada pude sentir que algo dentro de ella se rompió.
La volví a llamar.
-Alba: Déjala, se le acabará pasando.
Entonces al ver que no me lo cogía me puse a llorar y Alba me abrazó intento sacarme una sonrisa.
-Va tonta no me llores eh. Ya verás como solucionamos todo esto.
Yo estaba destrozada.
Y Alba se acurrucó conmigo en el sofá y yo después de llorar mucho me quedé dormida a su lado.
Al día siguiente tenía un mensaje de Lu y otro de Amanda.
Primero abrí el de Mandy.
-Oye que hoy tampoco voy a dormir allí. Ya hablaremos.
Y luego el de Lu.
-Te echo mucho de menos y sé que no debería decirte esto porque fui yo la que decidí dejarlo, además te mereces a alguien mejor que yo, que sepa quererte de verdad, pero eres increíble y sólo quería que lo supieras, que quiero lo mejor para ti y que me alegro mucho de haberte conocido.
Joder, vaya drama de vida.
Cuando me levante estaba Alba a mi lado e intento darme un beso.
-¿Que haces?
-¿Besarte Marina?
-Pues no para, no estoy de humor...
Después de todo lo que había pasado quería cachondeo, yo a esta chica no la entendía. Creo que no se tomaba nada enserio y mira que se lo dije Amanda que yo no me suelo equivocar. Es de las que te la lian igual que Lu, lo que yo a Lu ya la tenía calada y a ella todavía no la había calado.
No sé de qué me arrepentía más, si de haberme follado a una chica por la que solo sentía atracción y le había hecho daño o por ser una cobarde y haber hecho eso por no dar el paso y hacerle daño a Mandy.
El caso es que le había hecho daño y lo que más miedo me daba es que algun día iba a conocer a otra chica...
Cuando volví de la uni me fui con una compañera de clase hacer unas birras a ver si así desconectaba un poco de toda esta situación.
Mientras estaba sentada pude ver en el bar de enfrente dos chicas muy acarameladas.
Que monas.
Y de camino a casa seguían allí, justo tenía que pasar por ese bar para ir para casa y a la que me fijé era Amanda y otra chica besándose.
No me lo podía creer.¿Pero desde cuándo se estaba viendo con otra?
¿Y yo preocupada por ella?
Me entraron una especie de celos enormes que me quedé en shock mirándola.
-¿A-m-a-n-d-a?
-Ey Marina, ¿Qué haces por aquí?
Ella hacía como sí nada y no hay cosa que me dé más rabia.
- Pues vengo de hacer una birras. ¿Conozco a tu amiga?
-Bueno no es mi amiga, ella es Clara.
Cuando dijo no es mi amiga... Se me encogió el corazón. Pude sentir una punzada. Y me salió mi lado malo, imaginaba que esa tal Clara no sabía nada de nuestro lío. Así que dije:
- ¿Esta noche vendrás a dormir ya que ayer no viniste? Estás desaparecida.
Me pusó cara de hija de perra para que dices eso.
-Sí esta noche si, ayer necesitaba estudiar en silencio y siempre montáis mucho follón tú y tu novia Alba y me fui fuera.
Zasca doble que me dió ahí.
Me despedí de ella y le dije que nos veíamos esta noche, estaba deseando que volviera esta noche para hablar con ella y decirle que de que cojones iba.
Yo llorando toda la noche y ella de juerga por ahí con otra tía.
Me estaba enamorando de una chica que se parecía a Lu y eso daba mucho mucho miedo. O eso creía. Me había roto en dos aquella situación. Mandy acaramelada y con cara de tonta con otra chica preciosa, muy elegante y se notaba que estaban bien.

Cuando llegue al piso estaba Alba estudiando en el comedor.
-Me he venido aquí porque en mi piso están de celebración, espero que no te importe. Me ha abierto Leo.
-Así, tranquila no te preocupes.
Me puse a llorar y al final se lo conté a Alba.
-Ves te lo dije que estaba jugando con nosotras, ves como no tenías que preocuparte tanto. A ver qué nos explica esta noche.
Y me acarició la cara y me dió un beso.
Y entonces me agarró fuerte del culo. Yo sentí muchísima atracción, me daba miedo que llegara Mandy y nos pillara pero entonces me arrancó la camiseta y empezó a comerme los pezones y a mordermelos, yo gemí intensamente y no pude resistirme al resto.
Me bajo la bragueta y empezó a meterme los dedos.
Yo empecé a humedecerme y gemir.
Y me susurró.
-Voy hacerte mía.
No me dejaba que la tocase, me pusó los brazos en alto y mientras me lamía los pechos me tocaba el clítoris, yo gemía y gemía, me tumbó en la cama y mientras me agarraba los brazos con la otra mano me bajo los pantalones y empezó a comermelo, yo no podía evitar dejarme llevar.
Me deje llevar más y más y acabe corriéndome en su boca mientras con la otra mano me apretaba fuerte los pezones.
-Ya eres mía me dijo.
Y yo tumbada en la cama desnuda respire profundamente.
Fui a tocarla pero me lo negó.
-He dicho que yo te queria hacer mía.
Y poco después sonó la puerta ya solo por la forma de andar sabía que era Amanda.

∆ Descubriendo su libertad ∆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora