Capítulo 1

384 28 11
                                    


Craig llevaba más del tiempo necesario en el baño. Estaba cansado de correr detrás de una pelota y fingir que le gustaba el fútbol. Era otro sábado consecutivo en una actividad extraescolar solo para acompañar a Clyde porque Token no podía. Craig podría estar perdiendo su tiempo con Tweek, en casa de este, cuidándolo porque estaba con gripe, pero no. Ya era más del medio día y estaba demasiado cansado. No quería salir del baño y seguir expuesto al sol, a la tierra y a los gritos del entrenador. Miró otra vez su celular que era atacado por mensajes de Clyde preguntando por él. Entró al chat con Tweek con la esperanza de ver una respuesta, pero no había nada por lo que supuso que este aun dormía.

Cuando ya se rindió de perder el tiempo e iba a salir del cubículo y volver al campo, escuchó la puerta abrirse. La voz chillona de Kyle inundó el lugar mientras Stan le pedía que se detuviese y le explicase bien las cosas. Por alguna razón decidió ser chismoso, seguir oculto y no salir.

¡Dios mio! Ese gordo culón otra vez—decía entre dientes. Mientras Stan le preguntaba qué le pasaba—. Escucha Stan, Cartman y el doctor Mephisto han hecho algo terrible. Debemos ir donde tu Tío Jimbo, tomar sus armas y prepararnos—Susurró Kyle—. Es un ataque zombie.

Craig se congeló. Puede que, en otro momento, en cualquier otro pueblo o país aquello no fuera más que una broma, algo tremendamente irreal e imposible de suceder, pero en South Park no. Si cualquier de ese cuarteto de amigos llegaba a decir que sucedía la cosa más extraña era verdad y, por tanto, había que temer. A sus dieciséis años ya había aprendido suficiente de cómo actuar ante un caos en South Park debido al grupo de Stan.

Sabiendo que se encontraba en peligro, su mente comenzó a idear planes, huidas, alguna forma de escapar, de alejarse de lo que sea que fuera a suceder, tal y como siempre lo hacía. Volvió la atención a su celular y mensajeo a su hermana menor.

"Tricia, ¿aún estás con papá de compras? Llámame, es urgente."

Y mientras esperaba la llamada, mensajeó a Tweek que seguía sin contestar sus anteriores mensajes. Y luego a Clyde.

"Tweek, no salgas de casa"

"Clyde, ven al baño de chicos. AHORA"

El tono de llamada de su celular irrumpió fuertemente en el silencio del lugar. Dándose cuenta de que ambos chicos ya se habían ido. Por lo que, Craig contestó y salió del cubículo.

—¿Qué pasa tonto? —Escucha a Tricia, y a su padre de fondo regañándola por llamarle así—Ya fuimos por tu pedido, quédate tranquilo.

—Por favor, pásame a papá

—¿Por qué no le llamaste a él entonces? —Dice, como siempre, enfadada.

—Tricia, es urgente—le interrumpe cuando sabe que va a empezar otro reclamo sobre papá que no contesta su celular nunca y que ella no es un servicio telefónico. Y sabe que está nervioso y el pánico se escucha en su voz porque Tricia no sigue y luego escucha a su padre al teléfono.

—¿Qué pasa campeón?

—Papá, vayan por mamá y luego busquen un lugar seguro. Algo malo va a pasar, otra vez Stan y sus amigos—habló rápidamente. Al instante, escuchó un sonido fuerte a través de la línea, a Tricia gritar junto a otras personas—¿Papá? —preguntó preocupado al no tener respuesta.

—Craig—le gritó y lo escuchó lejos del teléfono—. Vamos a la cafetería, con Richard, algo está pasando—y el ruido de fondo seguía y escuchaba la respiración pesada de su papá por el esfuerzo de correr.

—Voy por Tweek.

—Craig, quédate donde estás, oculto. Iré por ti.

—Voy por Tweek—repitió—. Sabes que tengo que ir, papá. Nos reunimos en la cafetería ve por mamá—Y no sabe si su papá terminó de oír todo porque la línea dejó de funcionar y solo comenzó a escuchar un pitido.

DecliveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora