capítulo 1: Londres

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La tarde estaba nublada y el viento soplaba con furia anunciando una nueva tormenta en la ciudad de Londres.
Mientras que en una casa no muy lejos de la ciudad una discusión se escuchaba.

— William  crees que yo no me preocupe por Jack?– dijo toni tratando de tranquilizarse – claro que me preocupe

— no no te preocupaste en lo absoluto... ¿Sabes que es lo que eres tu?– preguntó señalándole con el dedo

— muero por que me lo digas – dijo con una voz firme y segura

— eres una puta rata Toni – con eso dicho William  salio de la casa

Toni trago en seco y lo siguió asta afuera de la casa.

— ¡YO PODRE SER UNA RATA PERO TU ERES PEOR QUE YO!

William  lo ignoró y se subió al auto, tenía que despejarse y tratar de olvidar lo ocurrido en Marbella.
Tenía bien claro que por mas que intentara salir de esa vida no lo conseguiría muy fácil, no lo quería admitir pero extrañaba a Jack sus tonterías y vender un poco de droga.
Pero ahora era imposible hacer todo eso, tenía que seguir adelante pero algo se lo  impedía y lo hacían retroceder cada vez que se sentía capaz de olvidar tanto a Jack y su antigua  vida.

Se estaciono en frente de una cafetería para poder tratar de pensar y tener alguna idea para continuar adelante con su vida sin que el pasado se interponga en sus planes.

Entró y se sentó en una mesa cerca de la ventana.

— señor que va a ordenar?– pregunto la camarera amablemente

—un café amargo

La señorita anoto el pedido y se fue.

William  estaba tan  distraído que no se dio cuenta que un joven se había sentado detrás suyo, William  no le presto mucha importancia, pero poco a poco la discusión que el joven estaba teniendo por teléfono se le hacia aun mas  interesante.

—mira escucha por que no te lo voy a repetir no te quiero ver escuchaste.

<madre mía que chisme> pensó William.

Esta muy distraído como para darse cuenta que el muchacho notó que William  se había inclinado para escuchar su conversación.

— ¿te gusto el chisme?– pregunto el muchacho mientras se volteaba a ver a William

William  cuando escuchó eso  casi tira su café de lo nervioso que estaba por el echo de que lo hallan descubierto.

El joven al notar lo nervioso que estaba William  se echo a reír y se dirigió a la mesa donde estaba sentado William 

— tranquilo – dijo recuperando el aliento

—perdón por escuchar tu conversación – se disculpó William

— tranquilo no pasa nada

La conversación fue muy agradable esa tarde William  se había olvidado por completo de Jack y lo ocurrido en Marbella.

Blake era muy agradable y al parecer no se llevaba del todo bien con su padre pero aun hací a William  le agrado, Blake le dio su número de teléfono por si acaso.
Por todo un mes William  estaba mas feliz y de vez en cuando se encontraba con Blake para hablar  de la vida etc.

***

Una mañana un nuevo avión aterriza en el aeropuerto de Londres, un muchacho guapo llego a Londres.

– toma aquí tienes tu paga– dijo el muchacho de piel clara y cabello castaño

Ya afuera del aeropuerto tomo su teléfono y llamó a uno de sus amigos que estaba en la ciudad

—si

—Emilio ven a buscarme en el aeropuerto

Emilio no tardo en llegar al aeropuerto.

— hola tu eres...

— si Emilio pero llevame a un lugar donde no hallan tantas cámaras de seguridad – dijo el joven subiéndose al auto

Un silencio se apodero del auto pero Emilio temía que este enojado pero mejor decidió manejar asta un monte.

Los dos hombres bajaron y Emilio no pudo contenerse mas y le dio un abrazo.

— Jack no sabes como te extrañe – dijo aferrándose a el

Jack correspondió al abrazo

— ya tranquilo

— espera...– Emilio se separó bruscamente y lo observó – y ¿ese pelo? – preguntó confundido

— Emilio este pelo es mi pelo natural – dijo tratando de contener la risa que le daba ver a Emilio con esa cara

Emilio no lo podía creer Jack no era rubio con fuerza le dio una cachetada

— eso por Mentirme

Jack se recompuso pero no tardo en recibir una segunda cachetada por parte del mexicano

— y eso por desaparecer

Cuando ya iba por la tercera cachetada, Jack agarro el brazo de Emilio

— ya Emilio las primeras dos cachetadas si me las merezco pero tres ya es abusar

Emilio enojado se cruzo de brazos y dejo de mirarlo

— oh... Vamos Emilio no te pongas hací – dijo Jack observando minuciosamente al mexicano

— Jack no digas que no me ponga hací pendejo

Luego de muchas explicaciones y de tirarse mierda en uno a otro las cosas se  arreglaron.

Emilio dejo a Jack en un hotel para ver si era de su agrado, Jack no pensó mucho donde se quedaría a dormir ni tampoco tenía planeado quedarse mucho tiempo en Londres.

La mafia en Londres Donde viven las historias. Descúbrelo ahora