T1 C.1 / Piloto 🛩️

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¿Alguna vez se han preguntado cómo una acción aparentemente inofensiva puede ser en realidad el primer domino en caer dentro de un camino repleto de malas decisiones?

¿O cómo es que alguien que tiene la serenidad y paciencia de una vaca, puede de pronto sacar a relucir una traición con la fuerza y agresividad de un rinoceronte?

Son preguntas que llamó "filosóficas". No sé nada de filosofía ni de lenguas así que de ahí que suenen tan vagas y perezosas. Hacerme estas interrogantes no es de lo mejor, pero es parte de mis pocos entretenimientos personales que me disocian de la realidad de este miserable lugar.
Una de mis "preguntas filosóficas" más personales es:

"¿Cuál fue el 'piedrazo' que despertó al caimán del sereno río de nuestro camino?"

Esa duda.. ¡Esa principal duda! (la cual no tiene nada que ver con un desamor ni ningún romance por el estilo) Es la duda que me recubre cruelmente los esqueléticos hombros en el amanecer de cada mañana, siempre acompañado de ese sentido de culpa que cargó en mi adolorida espalda desde el día en que acabó todo.

"Yo.. 'Ellos'.. aquellos.. Y.."

Y el resto de gente (incluso quienes llamaba amigos) que nos acompañaron desde el primer día en que conocí a ese sujeto..
A ese imbécil que arruinó mi vida y la de muchos que yo conocía.

UNA HISTORIA DE
ENFERMOS 🦏🐮

Mi nombre es Daniel Mendoza, un flacuchento mestizo al que se le resaltan mucho más las ojeras que sus propios ojos. Me podría denominar un miserable, hasta un frustrado tal vez. No acabé la universidad y duermo en una deteriorada cabaña abandonada a la cual llamó "hogar".

Trabajó de vigilante y portero de la salida del vecindario en el que vivo y, a cambio de eso, recibo comida. Los únicos hobbies que tengo son dibujar y divagar en mis pensamientos hasta crear alguna otra "pregunta filosófica".

"Tampoco es que se pueda pedir mucho en el fin del mundo"

Y sí. Este es el fin del mundo, bueno, al menos el fin de esta nación (no tengo ni la menor idea de cómo será la situación en el resto de países). Contar detalle por detalle como el país llegó a esta situación me llevaría una eternidad, así que ignoraré ello. Solo puedo decir que.. De alguna manera, yo estuve involucrado.

Actualmente, yo y alrededor de cuarenta personas más nos encontramos residiendo en lo que se podría denominar "un milagroso vecindario abandonado en medio del bosque".

Lo digo con ironía porque hace algún tiempo, nuestro verdadero objetivo a llegar era la ciudad, pero después de veinticuatro días de partir, encontramos "milagrosamente" este lugar durante la tarde.

A decir verdad, no creo en Dios ni en ese tipo de cosas, pero (¿ya cuántas veces dije "pero"?), fue una maravilla de acontecimiento.

"Una maravilla para ellos, no para mí"

¡Ejem! En corto, al notar la gran cantidad de casas del vecindario y lo encubierta que estaba dentro del bosque, el grupo decidió hacer una votación para quedarse aquí a largo plazo.

Cuando gritaron:

----¡Ahora levanten la mano lo que están en contra!

Fui el único imbécil que alzó el brazo.

Con el paso de los días, de las semanas y de los meses, limpiamos y arreglamos el lugar, encontramos un río cercano, logramos cultivar y la caza junto con la ganadería eran las actividades más frecuentes de esta "zona segura".

"Aún así, como dejamos de lado la voluntad de ir a la ciudad, no sabemos si lo que dijo Goyolo es verdad"

Es triste, es demasiado triste.. Supuestamente por lo último que me dijo Goyolo, en la ciudad habría un gran refugio para todos los "Tellos" y "Tellas" (gentilicio de este país llamado "Tellend"), pero, ahora, quien sabe..

Y aunque este vecindario no es tan malo, yo tanto como el resto tenía una familia que me esperaba en esa ciudad. Lastimosamente ahora no sé si algún día retomamos el camino a nuestro objetivo.

"Sin embargo, esa no es mi única razón para querer que vayamos allá, también es con tal de alejarme de él, de Mingito"

Ese imbécil que ya había mencionado desde hace rato.. mientras yo estoy alojado en una cabaña rústica de madera sucia y desgastada (acompañado por el sonido de las ratas de mi sala por la noche), él duerme tranquilamente en una casa rojiza de dos pisos con un "floooorefiente" jardín con olor a naranjas afuera.

Lo que dije acerca de las casas suena estúpido y.. ¡Lo es! No tiene casi nada que ver con lo que viví con ese tipo a lo largo de estos tres años, más allá de que es un "buen ejemplo" de que él siempre se salía (y aún se sale) con la suya y, por mi parte.. bueno.. Lo que sobraba, me lo quedaba.

Y pensar que durante los primeros dos años lo consideraba mi mejor amigo ¡Ja, ja! Ahh.. que deprimente es mirar a la nada y pensar en como acabamos así.. Como juntos provocamos esto..

Se me es extraño procesar el hecho de que el punto al que antes nos dirigíamos en grupo hace meses, es el mismo lugar en donde conocí a Mingito hace años.
Porque sí, en la Ciudad de Perros fue en donde conocí a ese bastardo por primera vez y en donde inició todo para llegar a acabar así..

Una historia de Enfermos🦏🐮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora