DARKNESS - Jacob Black

[11] Aun mas?

Jacob​

La pregunta del como es que un humano se encontraba dentro de la cúpula, encerrado al igual que nosotros. Nos resultaba inquietante. 

El era un humano, un ser fragil, debil y, debia admitir, inservible (Convencido por palabras de Saxa). Sabia que ellos era debiles, pero solo por eso no debia estar aquí?... Lo dudaba. Según Saxa, los humanos no poseían la fuerza, la velocidad ni la astucia necesarias para sobrevivir en un entorno como este. Eran presas, no depredadores. Ella pensaba fielmente q estaba aqui solo para ser la presa de los wendigos y wechuges. 

Yo lo dudaba. Considero la posibilidad de que él termino aqui por la misma razón que nosotros. Porque no creo que estemos aqui por que fuimos escogidos por algun tipo de divinidad que nos escogio para cumplir con su "mision encomendada". Saxa había insistido en que nuestra presencia en la cúpula no era una coincidencia, creia firmemente que fue asi en un inició. Pero cuando vio al humano, cambio de opinión. 

No estabamos aqui por ser especiales o poderosos. Estabamos aqui por que habíamos tenido la mala suerte de perdernos en el bosque y por consiguiente entrar a la cúpula.

Todos habíamos llegado a la cúpula de maneras distintas  y en tiempos diferentes. Nadie sabía realmente cómo funcionaba, si había una lógica detrás o si simplemente éramos víctimas de una trampa sin sentido.

Al parecer el no estaba aqui ya por mucho tiempo. Lo supimos cuando detectamos su olor en una parte del bosque. Era un rastro tenue, casi imperceptible, lo que indicaba que no había pasado mucho tiempo desde su llegada. Siguiendo ese rastro, dimos con algo que rara vez encontrábamos en este lugar: un auto. Estaba parcialmente cubierto por hojas y ramas, pero el bosque aún no se lo había tragado por completo. Eso confirmaba nuestra sospecha. Él había llegado hace poco. 

Nos acercamos con cautela. El vehículo parecía intacto por fuera, aunque el polvo y la suciedad acumulados en la carrocería indicaban que llevaba al menos unos días abandonado. Me acerqué a la puerta trasera y tomé el pomo, intentando abrirla con cuidado. Forcejeé unos instantes, tratando de no causar más daño del necesario, pero estaba trabada.

Saxa, que me observaba con los brazos cruzados, dejó escapar un suspiro exagerado. Tal parece que a Saxa no le gusto mis métodos menos invasivos. 

—Apártate —dijo con fastidio. 

Antes de que pudiera protestar, levantó el puño y lo estrelló contra la ventana del copiloto. El sonido del vidrio rompiéndose resonó en el aire y los fragmentos volaron en todas direcciones. Me aparté instintivamente, sintiendo algunos trozos golpearme la piel.

—¿Podrías haber esperado un poco más? —murmuré, frotándome el brazo pero Saxa solo me dedicó una sonrisa burlona mientras apartaba los restos de vidrio y abria la puerta desde adentro. 

—Perdemos el tiempo, Jacob —dijo con frustración.

Apreté los dientes y, con un gesto desafiante, tomé el pomo de la puerta del copiloto. Para mi sorpresa, esta vez sí se abrió con facilidad. La miré con expectación, disfrutando ese pequeño triunfo. Saxa frunció el ceño, gruñó en mi dirección y luego se encogió de hombros, restándole importancia.

Revisamos el interior del auto. El primer hallazgo fue una billetera con la identificación del humano en la guantera la cual nos dio el nombre del chico. Pero lo que realmente llamó nuestra atención fue el asiento del copiloto: había varias botellas de alcohol vacías y a medio consumir, junto con paquetes de cigarrillos esparcidos por todas partes.

—Es un alcohólico —comentó Saxa con una mezcla de diversión  y desdén, tomando una de las botellas del asiento. La inspeccionó con curiosidad, leyendo la etiqueta con una ceja arqueada—. Bueno, al menos tiene buen gusto. — Quitó el corcho y acerco su nariz a la boquilla.