Capítulo 002: Fabricante

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—— El señor Wonka sin previo aviso nos pidió a cada uno que nos saliéramos de la fábrica

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—— El señor Wonka sin previo aviso nos pidió a cada uno que nos saliéramos de la fábrica. Dijo que cerraría su fábrica de chocolate para siempre.

Hubo un silencio incómodo entre ellos hasta que uno de los niños volvió a hablar

—— Pero no cerró para siempre, ahora está abierta otra vez.

—— Si, sale humo.

—— Si pero a veces cuando dicen "para siempre" quieren decir en mucho tiempo.

—— Es como decir que me gustaría comer esta sopa para siempre — comentó uno de los señores ganándose el regaño de su hijo —

—— La fabrica si cerró, mis niños.
—— En ese entonces parecía un para siempre. Pero hace poco vimos cómo salía humo otra vez, la fábrica volvía a operar.

—— Pero nadie regresó a trabajar — la rubia mayor frunció el ceño mientras que comía con ellos —

—— No...nadie.
—— Pero alguien debe trabajar allí.
—— Dime algo, Charlie. ¿Ustedes han visto a alguien entrar o salir allí?

—— No. La puerta siempre está cerrada.
—— Exacto — Janeth se levantó y recogió su plato —

—— ¿Pero quien controla las máquinas?
—— Nadie lo sabe, Charlie. Es un misterio.
—— ¿Le han preguntado al señor Wonka?
—— Jamás a salido de la fábrica, nadie lo a visto en años. Lo único que sale de la fábrica son los dulces, listos para ser entregados.

—— Que extraño. — murmuró Janeth mientras lavaba los platos —

—— Daría todo lo que poseo con tal de entrar y ver que a sido de esa fábrica. ¿Que pasó con esa maravillosa fábrica de chocolate?

—— Lastima, porque no entrarás. Nadie lo hará. Es un misterio y será siempre un misterio.

—— Pero que positivó es, señor — Dijo Janeth con sarcasmo y con una sonrisa —

—— ¿Que? La fábrica de los niños será lo único que podremos conocer.

—— Muy bien, es hora de dejar dormir a tus abuelos. Janeth, no tenías porque hacerlo-

—— Está bien, señora. Vine a ayudar después de todo. Mary, tráeme todo lo que falta.

—— Claro.
—— Nos iremos después de que termine aquí. Ve despidiéndote amablemente de los abuelos.

—— Si, Jane. — los abrazó a cada uno, cuando ambos niños se acercaron a la última señora para despedirse ella les susurró —

—— Nada es imposible, mis niños. — ellos sonrieron, se abrazaron por última vez y La Niña salió, su hermana mayor se despidió de todos y salió siendo perseguida por la madre de Charlie —

Dulce amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora